El juicio contra Francis Franco, pendiente de que un testigo pueda declarar por videoconferencia

El juicio contra el nieto del dictador, Francis Franco, señalado para el próximo lunes, está pendiente de que uno de los testigos clave del caso pueda declarar por videoconferencia desde su país de origen, ya que ha anunciado que no puede viajar a España.

El Juzgado de lo Penal, donde tiene que celebrarse la vista, está haciendo gestiones con las autoridades judiciales de Rumanía para que la declaración se pueda hacer mediante videoconferencia desde ese país, al igual que se hace en España con testigos que residen en otros lugares.

La vista oral está señalada para dos días y se espera que sea compleja, ya que la instrucción ha sido larga y compleja, puesto que los hechos investigados se remontan a mayo de 2012.

A Franco, para el que se piden 6 años de prisión, se le acusa, junto a un trabajador suyo de origen rumano en el momento en que ocurrieron los hechos, de haber huido de la Guardia Civil tras cometer una infracción de tráfico y, en un camino forestal, haber arremetido contra el coche patrulla marcha atrás hasta sacarlo de la vía, dándose después a la fuga.

El nieto del dictador ha negado en todo momento que fuera él quien conducía el vehículo ni que viajara en el mismo, puesto que se encontraba en ese momento en otro lugar, mientras que un guardia civil asegura haberlo visto perfectamente. Además, está la localización de su teléfono móvil por los repetidores. 

El testigo rumano que ha pedido declarar desde Rumanía es la persona a la que tanto Franco como el otro acusado, Silviu Nicolae Rosca, dijeron que le habían dejado el coche el día en que se produjo el incidente con la patrulla de la Guardia Civil.

Esa persona en cambio compareció en el juzgado, pese a estar residiendo en Rumanía, para manifestar que él no fue y que cuando ocurrieron los hechos estaba viviendo ya en su país de origen. Tras esa declaración, Silviu, que es sobrino, compareció de forma voluntaria ante el juez para modificar parcialmente su declaración inicial reconociendo que no fue a esa persona a quien se prestó el coche, ratificándose en el resto.