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María Villarroya, presidenta de la Asociación de Mujeres Investigadoras y Tecnólogas: “A las mujeres nos cuesta levantar la mano cuando nos ofrecen alguna promoción” María Villarroya, presidenta de la Asociación de Mujeres Investigadoras y Tecnólogas: “A las mujeres nos cuesta levantar la mano cuando nos ofrecen alguna promoción”
María Villarroya, esta semana en el Campus de Teruel

María Villarroya, presidenta de la Asociación de Mujeres Investigadoras y Tecnólogas: “A las mujeres nos cuesta levantar la mano cuando nos ofrecen alguna promoción”

“Hay que establecer algunas estrategias para que de verdad podamos tener esa igualdad de oportunidades”
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En el marco de las Jornadas Sarteco se celebró el sesgundo Encuentro Women in Sarteco, donde las investigadores en TIC reflexionaron sobre sus carreras profesionales. La organizadora de este encuentro fue María Villarroya, profesora de la Universidad de Zaragoza y presidenta de la Asociación de mujeres investigadoras y tecnólogas, AMIT-Aragón. 

- ¿Qué se pretende con el encuentro WSarteco?

- Sabemos que existe esa brecha de género, que existe en las TIC, donde la presencia en las categorías más bajas es muy baja. Estamos hablando que tenemos un 15% de alumnas que están entrando en la Universidad de Zaragoza en estudios de Informática, pero ha habido años que han entrado menos. Luego en la carrera profesional hay algunas que no progresamos igual que nuestros compañeros por diversas razones y a veces porque hacemos las cosas un poco distintas. El objetivo es continuar con una serie de encuentros que comenzamos el año pasado. Somos mujeres que trabajamos en este campo y vamos a ver qué podemos hacer para cambiar esta situación. El año pasado fue muy abierto y este año nos concentramos un poco más en la carrera profesional.

- ¿Esta es una de sus principales preocupaciones?

- Hay un montón de actividades para fomentar vocaciones. Sí que es importante hacer actividades para fomentar vocaciones pero también es muy importante que las mujeres que estamos en las carreras profesionales no nos dediquemos solo a fomentar vocaciones quitándonos tiempo de nuestra vida personal o de nuestro tiempo de progreso laboral y por tanto de proyección en nuestras carreras sino que podamos crear nuestras redes para apoyarnos y conseguir progresar en nuestras carreras.

- Romper ese techo de cristal.

- Efectivamente. Hay que romper ese techo de cristal, que por sí solo sabemos y somos conscientes de que no se rompe. Es decir, el tiempo no es la solución, es todo lo contrario. La Universidad de Zaragoza, en estudios de ingeniería lleva desde el año 2000 estancado, el porcentaje de alumnas es del 25,4%, con una variación de más-menos un punto. Eso por sí solo no va a cambiar. En los puestos de responsabilidad tampoco por sí solo hay más mujeres. Por tanto hay que establecer algunas estrategias para que de verdad podamos tener esa igualdad de oportunidades porque si no hay muchas mujeres que acaban frustrándose. Es un esfuerzo extra haciendo lo mismo y no progresando igual.

- ¿Cuáles serían esas estrategias?

- El objetivo es ver un poco qué hay que hacer para llegar a la cima. Qué hay que hacer para progresar en la carrera científica y tecnóloga en general. Hay que progresar en liderazgo porque lideramos de forma distinta, ver qué hace que nuestro liderazgo sea distinto, nuestros comportamientos hacen que no se nos vea igual, por ejemplo, nos pensamos mucho más aspirar a los puestos. Nos cuesta mucho más levantar la mano cuando nos ofrecen alguna opción de promoción, algún puesto de responsabilidad. Solemos reflexionar antes de decir sí. Queremos que las investigadoras más jóvenes sean conscientes de que tienen que levantar esas manos, que sus logros hay que reconocerlos y contarlos, que no se metan la cabeza debajo del ala como hacen los pollitos, hay que decir: bueno, yo  lo he hecho, está bien y hay que reconocer el trabajo. También hay que hacer una reflexión: hay mujeres muy validas y ¿les estamos dando todas las oportunidades, les llamamos como ponentes de las jornadas, les llamamos como miembros de tribunales, les llamamos para formar parte de nuestras redes de opinión? 

- Que se visibilice más a estas profesionales.

- Sí y que sean unas reflexiones personales. Y cuestiones del día adía. Yo tengo tres hijas y sé que a mis compañeros con hijos nunca les preguntan con quién se quedan su hijos y donde están y qué opinan y a mí me lo preguntan con cierta frecuencia. 

- ¿Eso es lo que hace que no se levante la mano para esos puestos de responsabilidad, la concilación? 

- No. Creo que no es el problema de la conciliación. Es que no estamos acostumbradas a hacerlo desde muy pequeñas por muchas razones, culturales casi todas ellas, y por presiones externas. Tú voz es más baja y parece que no tengas interés o porque tendemos a valorar menos nuestras capacidades menos. Está demostrado que las mujeres nos autovaloramos peor. Ellos cuando cumplen el 60% de los resquisitos optan a una plaza y ellas solo si cumplen más de 100%. Estudios desde Amit-Aragón nos demuestran que sigue pasando eso.