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Las batallas entre íberos y romanos y los gladiadores amenizan Lakuerter Las batallas entre íberos y romanos y los gladiadores amenizan Lakuerter
Los íberos festejan Lakuerter Íbera en la arena del espacio escénico. M. N.

Las batallas entre íberos y romanos y los gladiadores amenizan Lakuerter

Gran actividad en el poblado para deleite de los 2.000 participantes y miles de visitantes
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El intento de romanización del poblado íbero de Andorra desencadenó este fin de semana un sinfín de trifulcas entre el grupo romano y los once clanes íberos. Se sucedieron las batallas, los secuestros y las luchas de gladiadores para deleite de los más de 2.000 participantes y los miles de visitantes que se dieron una vuelta por Lakuerter Íbera, un evento que se esfuerza por estar a la altura de la reciente declaración como Fiesta de Interés Turístico de Aragón

El momento de mayor tensión entre íberos y romanos se vivió a mediodía del domingo con una gran batalla en el campamento que se saldó con varias bajas en ambos bandos. 

Salieron en plan triunfal los romanos desde su carpa en busca de los íberos, que los estaban esperando con lanzas. El primer arreón colonizador tuvo respuesta y fue preciso reunir a todo el batallón. Fue entonces cuando se sucedieron las acometidas, que en momentos de peligro para los romanos permitieron al público visualizar las típicas formaciones de defensa que aparecen en los tebeos de Astérix y Obélix: todos los soldados parapetados en rectángulo, protegidos con escudos rojos por delante y por arriba. 

El espectáculo gustó al resto de pobladores este fin de semana del descampado junto a la avenida Dos de Mayo y al numeroso público que se dio cita en la jornada sabatina para disfrutar de otras actuaciones. Muy celebrada fue la lucha de gladiadores en la zona escénica, cuyo patio de butacas quedó abarrotado para presenciar las peleas. 

“Estamos un grupo de gladiadores y cada año lo ensayamos”, dijo Milun, coordinador de los espectáculos de guerra que animó a los íberos a salir más a las batallas porque “hay bastantes más romanos”. 

A los guerreros se les distingue a la legua por sus falcatas y sus escudos. Llevan menos ropa que el resto porque siempre están en acción. 

Tras el clásico y vistoso desfile de clanes por las calles de Andorra, los guerreros juraron fidelidad a sus príncipes en el acto de la Devotio, la novedad de este año. No dudarán en entregar su vida en la batalla si es necesario por el bien del clan. 

Lakuerter Íbera está integrada en la Asociación Española de Fiestas y Recreaciones Históricas. A ella pertenece la Fiesta de Astures y Romanos que se lleva celebrando desde 1986 en Astorga (León). El domingo, la Legión VI Victrix de esta localidad quiso representar en Andorra La Leyenda del Minotauro. 

Puso en escena una parte de las pompas gladiatorias, los clásicos espectáculos de circo romano que, además de las luchas a muerte de gladiadores, tenían también una sección más amable en forma de actuación teatral basada en la mitología. Según esta, el Minotauro es una especie mitad hombre, mitad toro, fruto de la infidelidad de Pasifae con un toro blanco enviado por el dios Poseidón como venganza contra el rey Minos de Creta, marido de ella. 

El Minotauro devora a la población y Minos ruega al sabio Dédalo que construya un laberinto del que el monstruo nunca pueda salir. Una vez hecho, el rey ofrece periódicamente al monstruo siete mujeres y siete jóvenes, tributo a pagar para que la bestia no arrase Atenas. Harto de esta situación, el guerrero Teseo se ofrece voluntario para matar al Minotauro. Lo logra y consigue salir del laberinto gracias a un ovillo de hilo que le guía.

Lakuerter gana en calidad

“Aquí ya hay un equipo muy bueno de gladiadores y queríamos colaborar con esta parte de la pompa gladiatoria”, dijo José Luis Carro, que encarnó a Teseo. 

La fiesta de Astorga se celebra el último fin de semana completo de julio. Como en Andorra, el pueblo se vuelca en la participación. “Astorga tiene 12.000 habitantes y somos 1.200 socios, pero todo el mundo se involucra. La ciudad tiene 2.000 años de antigüedad y precisamente recreamos los orígenes romanos”, indicó el recreacionista leonés.

La Legión VI Victrix de Astorga ha visto crecer año tras año Lakuerter Íbera, pues son invitados asiduos. “Va subiendo poco a poco en calidad y vemos que está alcanzando cotas importantes”, destacó Carro.

“Lo importante es que la gente se ve que participa. Llevan diez años y la gente quiere continuar”, concluyó. 

Según dijo el viernes la pregonera de este año –la directora general de Turismo del Gobierno de Aragón, Marisa Romero–, uno de los requisitos para ser Fiesta de Interés Turístico de Aragón es ir renovando la oferta de actividades y que la celebración no se estanque. 

En este sentido, el representante del Caballo en el Consejo de Clanes, Emilio Gracia, destacó que este año hay un nuevo clan, el del Cuervo, formado por más de cien personas, y “hemos cambiado la obra central, que el año pasado fue un entierro y este año es la Devotio”. 

“La intención es hacer la misma obra un par de años”, con la idea de “mejorarla el segundo” y “después cambiamos”, explicó.

Volverá la gran representación

En la mente de Consejo de Clanes, Ayuntamiento de Andorra y Asociación Empresarial de Andorra-Sierra de Arcos y Bajo Martín está recuperar la gran representación que se hizo durante los primeros años en la plaza de toros, La Noche de Astarté, tal vez en otro formato. Hay actores dispuestos y ganas de hacerlo. “Todo sería que tuviéramos financiación”, dijo Gracia, quien confía en que la declaración turística ayude en este sentido. “También haríamos otras cosas fuera (del recinto de clanes) y llenaríamos más”, indicó.

Una fiesta “para largo”

Los clanes están contentos con la actual colaboración a tres bandas y creen que la fiesta “va para largo”, aunque reconocen un problema de espacio. “Casi no nos cabe nadie en el poblado, se tendrá que hablar con el Ayuntamiento para ver qué soluciones hay, porque las parcelas de alrededor son de particulares”, dijo Emilio Gracia, quien sugirió que el consistorio las podría comprar.  

En este sentido se pronunció también el representante del Consejo de Clanes ante el Ayuntamiento, Andrés Ruiz. “Tenemos que abrirnos más y salir de aquí. La lucha de gladiadores es un espectáculo grandioso y se nos queda corto el espacio aunque hayamos doblado las gradas”.

También se mostró a favor de programar “una representación teatral en condiciones, pensando en toda esa gente de fuera”, dijo en referencia a los visitantes y a que los bares de la localidad se puedan beneficiar. 

Los clanes se consideran espacios abiertos al público en general, si bien reconocen que hace falta un servicio de hostelería integrado en la fiesta para que los visitantes puedan disfrutar más. 

“Aprovechamos para decir públicamente que no hay ningún problema, que cualquier visitante puede entrar y salir de los clanes aunque no vaya vestido. La fiesta la tenemos que hacer entre todos”, dijo Ruiz. 

El también príncipe del Lince es ambicioso: “Tenemos que subir otro peldaño más y que se nos declare Fiesta de Interés Nacional para que nos dé más empuje”. 

Incluso los mismos clanes se sorprenden del auge que está adquiriendo esta celebración, de la que nadie se quiere quedar fuera. “De seis clanes que éramos en el 2010, ahora estamos el doble. En el último mes se ha montado uno con ciento y pico personas. Un clan entero, después de estar metidos 2.000, es muy difícil de formar”, analizó.

La sección de indumentaria del Consejo de Clanes trabaja para que nadie vaya “disfrazado”, sino vestido de un modo similar al de hace 2.500 años. 

De todo ello se beneficia el comercio, tanto las tiendas de textil como carnicerías y distribuidores de bebidas, así como servicios de cáterin. “Multiplicamos por diez el dinero que, digamos, nos da el Ayuntamiento para la fiesta”, dijo Ruiz, que cuantificó en 10.000 euros el presupuesto aproximado de cada clan. “Las cuentas salen enseguida, a algún lado va este dinero”. 

La asociación empresarial formalizará un cuestionario tras esta décima edición para evaluar la incidencia que la fiesta tiene en los comercios.