El Grupo Alpino Javalambre reconoce a su equipo de CxM
Varios de sus componentes son habituales de los podios en las carreras por montaña
El Grupo Alpino Javalambre homenajea a su equipo de carreras por montaña. Lo hizo en su cena anual en la que se reconocieron los méritos de esta sección del club, en una disciplina que cada vez gana más adeptos.
Entre los miembros del GAJ, se destacaron méritos como las victorias absolutas y podios de Javier Barea (1º en Cabanes, 3º en el 30K del Trail de Nogueruelas, 1º en el Trail de Villarroya, 1º en el 25K de Yeste, 2º en los 22K del Trail de La Iglesuela, 1º en Sierra de Luesia, 1º en el Trail de Tramacastilla, 2º en la Media Maratón de Teruel y 1º en la Aragón Sur), así como su participación con la selección aragonesa en el Campeonato de España en Zumaia. También se honró a Eduardo Salvador (1º en la Minero Trail de Ojos Negros, 3º en el Trail de Villarroya, 1º en la CxM Ciudad de Teruel, 2º en los 46K del Trail del Sobrarbe, 1º en el Maratón de las Tucas de Benasque y 2º en la Aragón Sur).
Otros corredores, también habituales de los cajones de los podios como Sergio García, Óscar Martín Rucio, Carmen Guillén y, en representación de los más jóvenes, Vanesa Egido y Adrián Hernández (1º este año en categoría Promesas en la Vuelta al Molino de Cerler) también recibieron su regalo.
De la misma manera se reconoció a otros miembros del club “no solo en las carreras sino en otras modalidades, que todavía siguen dando mucha guerra” como Santiago Gracia, Miguel Ángel Monclús y José Manuel Plumed, o los veteranos Pepa Plumed y José Antonio Valero, habituales de los podios y almas de la Aragón Sur, que este año ha celebrado su décimo sexta edición.
El Grupo Alpino cerrará su calendario de actividades de este año 2017 con una marcha senderista desde Secañet, en el Alto Palancia, hasta el Santuario de la Cueva Santa, en la localidad castellonense de Altura, que se desarrollará el domingo 17 de diciembre y a la que se espera que acudan más de ochenta integrantes del GAJ.
Se trata de un recorrido por el GR-10 de unos 14,5 kilómetros, aproximadamente, que terminará con una comida de hermandad.
