Síguenos
Las grullas buscan el agua en Lechago tras secarse la laguna de Gallocanta Las grullas buscan el agua en Lechago tras secarse la laguna de Gallocanta
El agua del embalse de Lechago está siendo alternativa para 200 y 300 grullas ante la seca laguna de Gallocanta con un censo el pasado 14 de 869. Fernando Herrero

Las grullas buscan el agua en Lechago tras secarse la laguna de Gallocanta

Varios centenares de aves eligen de dormidero el embalse por protección
banner click 244 banner 244
banner click 236 banner 236

Varios centenares de grullas duermen en el embalse de Lechago ante la falta de agua de la laguna de Gallocanta. Las grullas están eligiendo esta alternativa, además de la tradicional laguna de Gallocanta, tanto en su paso postnupcial como para la invernada. Lo que sí están constantando naturalistas y ornitólogos es el bajo número de grullas en la presente temporada por culpa de la sequía. 

El naturalista y fotógrafo, Fernando Herrero, manifestó que este año se están viendo de doscientas a trescientas grullas durmiendo en las primeras láminas de agua del embalse de Lechago y que ello se debe a la falta de agua que tiene la laguna de Gallocanta esta temporada por la sequía. 

Fernando Herrero señaló que la sequía y falta de agua está causando que el número de grullas en Gallocanta sea muy inferior con censos muy bajos. “Los censos de grullas son muy pobres en relación a lo que viene siendo habitual en Gallocanta, tanto en migración o paso como en invernada”.

Herrero añadió que en los 13 años que lleva publicándose el censo de grullas de Gallocanta es el actual el primero con un número tan bajo de aves invernantes. 

En el censo de invernada realizado el pasado 14 de diciembre se contabilizaron un total de 869 grullas. El pasado año, en el censo de invernada realizado el 15 de diciembre se contabilizaron 27.491 grullas. En 2015 el número de grullas que se contabilizaron el 17 de diciembre fue de 26.437. Pero en el periodo postnupcial del pasado año realizado el 7 de diciembre se contabilizaron 30.151. Y este año el 5 de diciembre se contaron 2.977.

Herrero comentó que al número tan bajo de este año en Gallocanta se suma que se están viendo entre 200 a 300 grullas que pasan el día para comer por  el Jiloca y para dormir eligen el agua protectora en sus primeras láminas del embalse de Lechago.  El naturalista apuntó que en lo que se lleva de temporada apenas se han registrado de 5 a 6 litros en la Comarca del Jiloca.