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Jonás Sancho se encumbra en el regreso del Descenso a Saco Jonás Sancho se encumbra en el regreso del Descenso a Saco
Los participantes esperan a que se de la salida, que desde este año se cambia de lugar para no cruzar la carretera entre Fórnoles y La Fresneda

Jonás Sancho se encumbra en el regreso del Descenso a Saco

La prueba de la Fresneda congregó a 115 participantes en su regreso al calendario provincial
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José Luis Rubio

Jonás Sánchez ha escrito su nombre en el libro de oro de la carrera de bicicleta de montaña Descenso a Saco, en La Fresneda, que este sábado volvió a la carga después de dos años de silencio.
El ciclista de Puigmoreno vivió un duelo trepidante con el grupo de cabeza que terminó en cosa de dos en los últimos metros en uno de los tramos nuevos en esta vigésimo tercera edición, que llegaba hasta la misma plaza mayor de la localidad del Matarraña.
En total, 115 participantes se dieron cita en esta prueba que aunque lleva en su título el apelativo de “descenso” dista un mundo de las carreras de puro downhill ya que además de con contar con un desnivel negativo extremo, sí incluye algún tramo de subida. De hecho la práctica totalidad de corredores participó con bicicletas de cross country o de all mountain.
Sancho fue el vencedor, pero el segundo clasificado, su vecino Jorge Lamiel, no se lo puso fácil. Ambos llegaron codo con codo a la última subida por las calles del municipio y fue allí donde se decidió la distribución de los metales del podio, aunque fuera por un ajustado segundo. Sancho paraba el cronómetro en 21:10 y Lamiel lo hacía en  21:11.
El tercero fue el alcañizano Carlos Pina, que se impuso al resto de perseguidores pero sin poder contactar con la dupla de cabeza, cruzando la meta en solitario a escasos siete segundos del vencedor.
La primera fémina fue Marta Punzano, trigésimo primera en la clasificación general, con un crono de 27:52. Detrás suyo ocuparían los puestos de honor Isabel Soler e Isabel Arasa, a dos y tres minutos de la primera fémina.
La participación en la carrera, una de las más veteranas del calendario provincial con 23 ediciones a sus espaldas, ascendió a 115 bicicletas. Una cifra inferior a la que acostumbraba la prueba en sus mejores años, pero aceptable después de dos años de parón por las dificultades para cumplir con los requerimientos de la nueva normativa de eventos deportivos. De hecho, en esta edición se ha suprimido el tramo de la salida desde la era para evitar cruzar la carretera de Fórnoles por no poder reunir al número suficiente de voluntarios.