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José Gabriel Pérez Casas, alcalde de El Pobo: “Los pueblos deberían saber la cuantía de las ayudas antes de hacer la inversión” José Gabriel Pérez Casas, alcalde de El Pobo: “Los pueblos deberían saber la cuantía de las ayudas antes de hacer la inversión”
José Gabriel Pérez Casas, en El Pobo, localidad de la que es alcaldes desde esta última legislatura

José Gabriel Pérez Casas, alcalde de El Pobo: “Los pueblos deberían saber la cuantía de las ayudas antes de hacer la inversión”

“Lo importante es que la propia gente del medio rural lo veamos como un generador de recursos”
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Cruz Aguilar

José Gabriel Pérez Casas es alcalde de El Pobo desde esta última legislatura y hasta entonces no había tenido contacto con la política. La experiencia ha sido enriquecedora, reconoce, hasta el punto que va a volver a presentarse. Es ingeniero agrónomo y trabaja y vive en Teruel, algo que, asegura, no repercute en su labor como responsable municipal. 

- ¿Es complejo ser alcalde en un pueblo pequeño?

- Uno de los problemas es que mientras que en las ciudades grandes tienen técnicos especialistas en las plantillas, en un pueblo muchas veces te sientes desamparado, aunque es verdad que cuentas con el apoyo de la Diputación de Teruel, la Comarca, los anteriores alcaldes o los ediles de municipios vecinos. 

- ¿Cuál era su objetivo cuando se presentó a las elecciones?

- Siempre tienes ilusiones que quieres desarrollar, pero en un pueblo pequeño dependes mucho de subvenciones y líneas de ayudas. Intentas acomodar las convocatorias que se realizan a los objetivos que te has planteado.

- ¿Cómo está El Pobo en materia de servicios?

- Habría que mejorar internet, que es un servicio principal, y tener suministros básicos de calidad. Cuando hay tormentas, en ocasiones, se han producido cortes eléctricos durante un tiempo que se hace muy largo, sobre todo si desarrollas una actividad industrial. Ahora en verano tenemos también problemas de telefonía móvil.

- ¿Qué tiene El Pobo para ofrecer a nuevos pobladores?

- La gran acogida de la gente, la forma de ser de los vecinos, viene la gente por trabajo y está de maravilla por la acogida de todo el pueblo. La actitud y el dinamismo son muy importantes, tenemos ocho asociaciones implantadas y se organizan actividades. Hay un caldo de cultivo que favorece que haya dinamismo, ese tejido asociativo permite que haya actividades.

- Tienen la escuela abierta pero solo cuenta con alumnado inmigrante, ¿no es así?

- Son vecinos de El Pobo, yo no hago distinción entre inmigrantes y no.

- Pero la realidad es que suele ser una población inestable.

- En la medida en que tengan trabajo y una estabilidad estarán y se asentarán en el pueblo. 

- ¿Qué medidas cree que deberían tomarse para frenar la sangría demográfica que padece el medio rural español?

- Si fuera fácil tendríamos la solución. Es difícil, pero no imposible, lo primero es que la propia gente del territorio nos lo creamos y veamos el pueblo como un generador de recursos en el que podamos desarrollar nuestros proyecto vital. La solución parte de nosotros mismos.

- ¿Y qué deberían hacer las administraciones?

- Garantizar los servicios básicos de calidad, como internet, telefonía móvil, carreteras, suministro eléctrico… Y los ayuntamientos tienen que poder abordar las inversiones sabiendo lo que se va a percibir porque hay inversiones que se tienen que hacer sí o sí, pero hay otras que si luego no te van a dar las ayudas, no las haces, no me vale realizarlas y que hasta los seis meses no se resuelva si me dan las ayudas o no. Sería más adecuado saber el dinero que te van a dar y ejecutarlo dentro de unas líneas en función de las necesidades del pueblo.

- ¿Hacen lo suficiente las administraciones?

- Para frenar la despoblación lo más importante somos la gente. Todas las administraciones toman medidas de buena fe y tienen políticas más acertadas y menos. 

- ¿Pero hay medidas que sirven para frenar la sangría demográfica?

- Sí hay medidas que sirven para lugar o evitar la despoblación o al menos sostener nuestros pueblos, pero hay realidades contra las que no podemos luchar. Me daría con un canto en los dientes si en mi pueblo se mantiene una población base para mantener todos los servicios, escuela, multiservicios… y una población flotante que vuelve fines de semana y verano.

- Dice que sí hay medidas, ¿podría poner algún ejemplo?

- Las líneas de ayudas que sacan hay que saber aprovecharlas, no tomarlas como algo independiente, sino como un puzzle, hay que encajar varias para desarrollar un proyecto.

¿Que opina cuando oye hablar de despoblación?

- Me suena a refrito, es una palabra que está de moda y se hace estudio sobre estudio, pero es un problema que ya se veía hace 50 años.