CienciaTE dedica su tercera edición a las preguntas para aprender ciencias

El Grupo Beagle de Investigación en Didáctica de las Ciencias Naturales, perteneciente al Instituto Universitario de Investigación en Ciencias Ambientales de Aragón (IUCA) de la Universidad de Zaragoza, está llevando a cabo, en el Campus de Teruel, un nuevo proyecto de investigación denominado CienciaTE3, que cuenta con el apoyo del Fundación Universitaria Antonio Gargallo. En esta tercera edición de la iniciativa que apuesta por la realización de actividades científicas con alumnado de Primaria se está analizando el valor didáctico del uso de las preguntas en el aprendizaje de los contenidos científicos.

La primera reunión de trabajo tuvo lugar el 16 de enero, a la que asistieron los docentes de los centros educativos participantes, bien de forma presencial o mediante videoconferencia. En esta experiencia están involucrados el colegio San Valero y el CEIP Emilio Díaz de Alcañiz, el colegio La Purísima y Santos Mártires y el CEIP La Fuenfresca de Teruel, y el International Spanish Language Academy (ISLA) de Minnetonka (Minnesota, EEUU).

El investigador principal del proyecto, Adrián Ponz, recordó que Albert Einstein ya mostró, con algunas de sus citas célebres, la relevancia que tienen las preguntas, no solo para la construcción del conocimiento científico: “Lo importante es no dejar de hacerse preguntas”; “No significa que soy muy inteligente, pero procuro estar un buen tiempo haciéndome preguntas”; “Si tuviera una hora para resolver un problema y mi vida dependiera de la solución, dedicaría los primeros 55 minutos para encontrar la pregunta apropiada, una vez supiera la pregunta correcta, podría resolver el problema en cinco minutos”.

Ponz indicó que “centrados en la educación científica, las preguntas son una herramienta clave para involucrar a los estudiantes y extender las situaciones de aprendizaje”, porque se pueden utilizar como motivación de diálogo, iniciadores de discusión, herramientas de aprendizaje, asignación y retroalimentación de proyectos. 

Enseñar a los estudiantes a hacer y responder preguntas es de importancia crítica si quieren participar en la argumentación razonada, la resolución de problemas y el aprendizaje. Las preguntas pueden impulsar a que los estudiantes pasen desde meras afirmaciones, al desarrollo de la predicción, la experimentación y la explicación, pues les favorecen la generación de una cascada de actividades cognitivas, que les permiten ir construyendo a través de piezas su conocimiento o resolviendo conflictos de comprensión.

En la literatura científica se pueden encontrar diferentes categorizaciones sobre los tipos de preguntas que realiza el profesorado o el alumnado en el proceso de enseñanza-aprendizaje de las ciencias. En la mayoría de los estudios se muestran las preguntas de tipo investigable, las que generan procesos de indagación, como las más efectivas para el aprendizaje del alumnado.

Con más frecuencia de la deseable, en las aulas se descuida la importancia de orientar la investigación sobre cuestiones que den sentido a ideas científicas clave, es decir, con objetivos conceptuales y una clara orientación hacia la construcción de teorías y modelos científicos que expliquen las evidencias disponibles. Por ello es necesario procurar contextos significativos que impliquen cognitiva y emocionalmente al alumnado y que promuevan el desarrollo tanto de destrezas, como de conocimiento científico.

Por todo ello, el Grupo Beagle, por un lado, va a estudiar el uso de las preguntas que se hace actualmente en las aulas cuando se aprende este tipo de contenidos y, por otro, va a diseñar recursos didácticos de indagación, haciendo hincapié en el uso de éstas, para analizar la importancia didáctica de su uso, tras su implementación en los centros educativos participantes.

El proyecto Ciencia TE dispone de una página web donde se publican recursos didácticos para su uso libre y resultados de sus investigaciones que han sacado la ciencia a la calle (http://web-ter.unizar.es/cienciate).