Los robos con fuerza en domicilios aumentan un 59% en la provincia
En el conjunto de Aragón estos delitos disminuyeron un 2,3% y en el Estado se incrementaron solo en un 1,8%La despoblación y la dispersión territorial afectan también a la seguridad ciudadana y prueba de ello ha sido el incremento en un 59,1% de los robos con fuerza en los domicilios en la provincia de Teruel durante el año pasado, según el balance de criminalidad dado a conocer por el Ministerio del Interior. El aumento porcentual es muy superior al experimentado en el conjunto del Estado, donde estos delitos subieron un 1,8%, mientras que en la Comunidad Autónoma hubo un descenso del 2,3%.
La seguridad en el medio rural ha vuelto a ser puesta en entredicho por las estadísticas del propio Ministerio del Interior, ya que aunque en número absolutos no son números muy altos en comparación con los del resto del Estado y la propia región, porcentualmente indican que esta clase de delitos crecen ante la realidad de un territorio despoblado: municipios y propiedades dispersas con viviendas que son segundas residencias en muchos casos y que no están ocupadas la mayor parte del año.
Durante el año pasado, según la estadística de Interior, se cometieron en la provincia 183 de estos delitos por robos con fuerza en domicilios frente a los 115 del año anterior, lo que supone un incremento del 59,1%.
Si se suman también los robos con fuerza a establecimientos y otras instalaciones, además de domicilios, la cifra se incrementó en 2018 hasta los 247 delitos frente a los 176 de 2017, con lo cual en este caso el incremento fue del 40,3%.
Las cifras absolutas en Teruel capital son muy inferiores, lo que indica que la actividad delictiva por este tipo de ilícitos se dan sobre todo en el medio rural. Tanto es así que en la capital se produjeron 27 robos con fuerza en domicilios durante el año pasado frente a los 12 del anterior, lo que equivale a un aumento del 125%. Si se tienen en cuenta también los robos a establecimientos y otras instalaciones, la cifra se eleva a 34 frente a las 25 del año anterior, lo que supone un incremento del 36%.
Frente a estos datos, la tendencia en el conjunto del Estado es a la baja en la comisión de estos delitos, puesto que disminuyeron un 2,2% en su conjunto, y en el caso concreto de los perpetrados con fuerza en domicilios disminuyeron un 2,3% con respecto al ejercicio anterior.
Si se compara con las otras dos provincias aragonesas, los robos con fuerza en domicilios disminuyeron un 3,5% en la de Zaragoza, mientras que en la de Huesca descendieron también un 22,8%.
Infracciones penales
El total de infracciones penales registradas en la provincia durante el año pasado fue de 2.701, lo que supone 292 más que en 2017, que en términos porcentuales equivale a un incremento anual del 12.1%. En la Comunidad Autónoma de Aragón la subida fue del 6,3% mientras que en el conjunto del Estado hubo un aumento del 4,2%.
En la provincia de Teruel lo que más creció porcentualmente fueron los delitos por tráfico de drogas, que se incrementaron un 161,5% al pasar de 13 a 34.
Durante el ejercicio no se cometió ningún homicidio doloso o asesinato tras los tres que se produjeron el año anterior por el triple crimen de Andorra, mientras que los homicidios dolosos y asesinatos en grado de tentativa disminuyeron un 25% al pasar de 4 a 3.
Los delitos graves y menos graves de lesiones y riña tumultuaria pasaron de 27 a 33, lo que supone un incremento del 22,2%, y los delitos contra la libertad e indemnidad sexual aumentaron un 15,4% después de que se produjeran 15 frente a los 13 de 2017.
Los robos con violencia e intimidación aumentaron un 6,7%, si bien en números absolutos eso solo supuso pasar de 15 a 16 delitos de este tipo, mientras que los hurtos descendieron un 7% al cometerse 464 frente a los 499 del año anterior.
Las sustracciones de vehículos también disminuyeron un 5,6%, si bien la variación solo fue de un delito menos al cometerse 17 frente a los 18 de 2017.
En la capital turolense las infracciones penales también aumentaron aunque solo un 2,7% al pasar de 631 a 648. El mayor incremento se produjo en los robos con fuerza en los domicilios.
Los homicidios dolosos y asesinatos en grado de tentativa descendieron un 50% al pasar de 2 a 1, mientras que los delitos graves y menos graves de lesiones y riña tumultuaria pasaron de 13 a 11, lo que equivale a un descenso del 15,4%.
Durante el ejercicio, a pesar de que en números absolutos el volumen no fue muy grande, se registró un importante descenso de los delitos contra la libertad e indemnidad sexual, al registrarse solo uno frente a los siete el ejercicio anterior, provocando así un descenso del 85,7%.
Los robos con violencia e intimidación disminuyeron también un 33,3%, al pasar de 6 a 4, lo mismo que los hurtos, que pasaron de 181 a 145, lo que supone un descenso del 19,9%.
También hubo una disminución en las sustracciones de vehículos en la capital, que pasaron de 8 a 12, lo que supone una caída del 44%, mientras que los delitos por tráfico de drogas aumentaron un 50% al pasar de 8 a 12.
La Delegación del Gobierno en Aragón destacó por otra parte que Teruel sea la provincia aragonesa con mayor porcentaje de infracciones penales esclarecidas, un 44,8%.
