“A los 17 años me di cuenta de que tocar en una orquesta me aportaba”
Tiene 29 años. Empezó a tocar la trompeta a los ocho en el Conservatorio Profesional de Música de Alcañiz, donde se dio cuenta de que quería dedicarse profesionalmente a la música. El sueño de Andrés Nebot se hizo realidad , y ahora es trompetista solista en la Orquesta Filarmónica de Cottbus (Alemania).
- ¿La trompeta empieza a tocarla porque ya le gustaba, o porque se la impusieron?
- A los ocho años no sabes mucho lo que quieres, aunque el instrumento tiene que llamarte la atención y tienes que tener peculiaridades para poder hacer un buen trabajo con el instrumento.
-¿A los 8 años, cuando entró en el Conservatorio de Alcañiz ya tenía un interés especial por la música?
-En la música vas entrando poco a poco y con el tiempo vas viendo si te aporta algo en la vida. A lo largo del tiempo me he encontrado con gente que ve la música no como una profesión, como yo, sino como un complemento al trabajo. Yo, a los 17 años, ya tuve claro que quería dedicarme profesionalmente a la música y vivir de ello. A esa edad entré a formar parte de la Joven Orquesta de Castellón, y anteriormente había formado parte de la Orquesta de la Universidad de Zaragoza. Me di cuenta de que tocar en una orquesta me aportaba, aunque tampoco me cerré la puerta e hice el Bachiller de Letras y llegue a examinarme en la Selectividad.
-Ahora está en Alemania. ¿Cuánto tiempo lleva allí?
-Dos años y medio. Me fui primero a Austria a hacer un máster.
-Y el alemán...
-Allí te exigen aprender alemán en un semestre. En seis meses tienes que sacarte el título B2, lo que aquí son cuatro años de la Escuela Oficial de Idiomas. Lo veo bien, porque si vas allí has de aprender bien el idioma, para poder desenvolverte bien en las clases.
-¿Y en seis meses es posible?
-Si te aplicas, sí, porque yo durante la semana tenía tres horas al día de clase en alemán.
-Después del máster.
-Después de terminar el máster de Orquesta me marché a Alemania, donde también estaba mi novia, porque en España no había muchas posibilidades de trabajar en una orquesta. Aquí hay pocas orquestas y las que hay tienen gente muy joven ocupando la plaza. Desde allí fui enviando todas las solicitudes posibles en las que sabía que podía salir una plaza y, finalmente, en noviembre de 2014 conseguí entrar en la Orquesta de Cottbus.
-¿Usted hace el papel principal de trompeta en la orquesta para la que trabaja?
-Sí, el trompeta solista es el que tiene el papel más difícil y el que toca algunos solos.
-¿Qué tal con los alemanes?
-Siempre te puedes encontrar con todo tipo de gente, pero la verdad es que yo he tenido suerte, porque mis compañeros, tanto de orquesta como de oficina, son simpáticos y no he tenido nunca ningún problema con ellos. Me he integrado bien allí, aunque es cierto que te puedes encontrar gente dura. En Alemania mucha gente lleva 30 años trabajando junta y aún se tratan de usted, pero bueno, tienes que adaptarte y dar lo máximo de tí mismo. Es una sociedad muy burocrática, que busca la perfección, aunque a veces eso no es posible.
- ¿Qué hace un trompetista solista todos los días?
-Mi trabajo consiste en un estudio personal diario. Tengo que estar en forma. De alguna manera, me comparo con los deportistas, porque tenemos que hacer preparación física, con una hora de calentamiento, con ejercicios técnicos para bien. Aparte tenemos ensayos, unos días por la mañana y por la tarde y otros con ensayo por la mañana y por la tarde concierto. La semana que viene, por ejemplo, tenemos unos conciertos didácticos.
-¿Hay más orquestas en Alemania que aquí?
-Sí, supongo que hay más tradición. Muchas orquestas en Alemania son municipales o dependen de la región, lo que aquí sería la Comunidad Autónoma. De hecho, allí las regiones tienen una o dos orquestas a su cargo. Todas se financian con dinero público.
-¿Hay más tradición, históricamente?
-Supongo que sí. El teatro en el que ahora estoy trabajando, por ejemplo, cumplió los 100 años hace 10 años. En España, la Orquesta Nacional de España es la más antigua del país. Nació durante la época de Isabel II, cuando en Alemania hacía siglos que existían orquestas de este tipo.
-¿Se ve en Alemania muchos más años?
-Por el momento sí. De aquí a 10 años no lo sé, porque la vida da muchas vueltas. He sacrificado mucho por el sueño de vivir de esto, sea en Alemania, en Malasia o en Estados Unidos.?Sé que algún día volveré, que no me veo en Alemania para siempre, pero por el momento, sí.
Autor:Maribel S.Timoneda