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“El 80% de los consumidores opina que la carne de cordero es excelente”

El nuevo presidente de Interovic, Francisco Marcén / Pastores Grupo Cooperativo

La asamblea general de la organización interprofesional agroalimentaria del ovino y el caprino (Interovic) eligió el pasado 1 de diciembre como nuevo presidente a Francisco Marcén Bosque, director general de Pastores Grupo Cooperativo

La asamblea general de la organización interprofesional agroalimentaria del ovino y el caprino (Interovic) eligió el pasado 1 de diciembre como nuevo presidente a Francisco Marcén Bosque, director general de Pastores Grupo Cooperativo.

Marcén, que también preside el sector de ovino de carne en el seno de Cooperativas Agro-Alimentarias de España, asume el cargo con el objetivo prioritario de incrementar el consumo de cordero, que ha descendido notablemente en los últimos años.

- ¿Qué supone para usted su nombramiento como presidente de Interovic?

- Para mí, que llevo más de 35 años en el sector, llegar a presidente del sector ovino de España es un orgullo y a la vez una responsabilidad muy grande, ya que Interovic agrupa a las cooperativas agroalimentarias de ovino y caprino; al sector industrial, con mataderos, salas de despiece y cebaderos; al sector productivo, y a las organizaciones agrarias. En los tres años que dura el mandato, tenemos temas importantes que tratar, como es cambiar la tendencia de caída del consumo y mejorar la percepción de la salud sobre la carne de cordero, entre otras medidas. Además, hay que mantener el consenso de todo el sector en torno a los temas más importantes.

- Hace un año que comenzó el Programa Europeo de la carne de cordero y lechal en España. ¿Está dando frutos?

- El 17 de febrero de 2015 empezó la campaña y a finales de diciembre fue sometida a evaluación. Ya se hizo un estudio previo de cómo estaba el consumo y de porqué era escaso según las edades. En estos doce meses, ha mejorado la percepción de los consumidores sobre la carne de cordero, y un 80% considera que es "excelente". Aunque a la mayoría les parece cara, entienden que se ajusta a los costes de producción. Aunque eso no se traduzca inmediatamente en una mejora del consumo, porque la gente tiene problemas económicos, sí se nota un deseo de compra mayor.

- Entonces, ¿todavía no se ha notado en las ventas?

- La campaña tiene efectos. La época de mayor producción, en primavera, coincidió con la emisión de un anunció en televisión, y se consiguió colocar ese 20% de más sin que hubiera exportaciones, que comenzaron en junio. Se sacó sin problema la sobreproducción con un descenso del precio del 10%. La respuesta de los consumidores es positiva porque la percepción mejora año a año. En Navidad también hubo una respuesta más favorable, coincidiendo con una situación económica mejor.

- Esta campaña hace hincapié en las nuevas formas de presentación de la carne de cordero…

- Según el estudio previo al inicio de la campaña, el 40% de los consumidores, sobre todo los menores de 35 años, no consumían cordero porque los formatos de venta no se adaptaban a sus necesidades. Por eso, la publicidad no serviría de nada si no hacemos paralelamente una modernización de las presentaciones y de la forma de venta.

- ¿Cuándo podremos verlo en los puntos de venta?

- Estamos enseñando a los carniceros a hacer nuevas presentaciones con pierna, cuello y bajos, que son más económicos que la costilla, para que se vendan más y se adapten a los nuevos consumidores. De esta manera, podremos dar salida a todo el cordero y no gravar la costilla porque el resto no se vende bien. El cordero es una de las carnes a las que menos le ganan y no es casualidad que cada vez le dediquen menos espacio en la carnicerías. En Aragón es donde hemos tenido más demanda de estos cursos, que ya realizamos en octubre en Teruel y recientemente en Alcañiz. Además, se realizan 5.000 visitas a carniceros para presentarles la guía con los nuevos cortes, que también pueden descargarse en la página web de Interovic.

- ¿Se mantiene el consumo en Aragón?

- Es el doble que la media de España, aunque también es donde más ha bajado su consumo en la última década. En los hogares españoles ha pasado de 2,7 kilos por habitante en 2006 a 1,7 en 2014, es decir, ha descendido un 36%. En Aragón, hemos pasado de 8 a 4, un 50% menos, por el envejecimiento de la población y porque la carne de cordero no se ha adaptado bien a las nuevas generaciones y a la población urbana, que quiere cosas más rápidas de cocinar.

- Sin embargo, parece que el Ternasco de Aragón goza de buena salud.

- Por primera vez desde hace años, también ha bajado el consumo un 1%. Pero frente a la caída generalizada del consumo de carne de cordero, el Ternasco de Aragón ha ido creciendo de 120.000 a 200.000 canales en diez años. Se debe a que cada vez hay más carniceros que se distinguen en su calidad por tener la marca de este producto aragonés, que apuestan por diferenciarse de la competencia y de las ofertas baratas de la gran distribución con un producto diferenciado y de calidad. La expansión se está realizando también en grandes superficies como Eroski, El Corte Inglés y Alcampo, y se ha producido sobre todo en Cataluña, donde tenemos unos 100 clientes que gastan Ternasco de Aragón.

- Además de la caída del consumo, ¿qué otros problemas presenta el sector?

- La falta de rentabilidad para el productor, el envejecimiento del sector y la falta de relevo generacional. Pero estos son asuntos que corresponden a las cooperativas y a las organizaciones agrarias y que la interprofesional no puede tratar. Como organización con dependencia del Ministerio de Agricultura, tiene que elegir unos temas a tratar, como el de la promoción de la carne de cordero.

La interprofesional no tiene un papel reivindicativo, pero ponemos en voz alta los problemas para que los agentes del sector actúen. Así, en diciembre mandamos una carta a los gobiernos autonómicos y a las organizaciones profesionales sobre el etiquetado para que obliguen a identificar el origen de la carne como manda la normativa europea. Se está importando mucho lechal de Francia e Italia y no se identifica. Son ofertas muy baratas pero luego la carne no sabe bien. Si no se cumple, corresponde a los sindicatos agrarios y a las organizaciones de consumidores denunciarlo.

- ¿Se ha tocado suelo en cuanto a la reducción de la cabaña de ovino en Aragón?

- La cabaña de ovino sigue bajando. Hace dos años, contábamos con 1,5 millones de cabezas y ahora estaremos en 1.150.000 apróximadamente. El dato concreto se publicará próximamente porque hay que definir la prima asociada a la producción. Percibimos día a día en el campo que los ganaderos se quitan las ovejas por la edad y por la PAC. Estas ayudas favorecen a la tierra y provocan que, quien tiene medios suficientes con el campo, se las quite. La ayuda directa a la oveja es pequeña, de entre 10 y 20 euros cuando más, y por ese diferencial no es rentable.

- Usted es también director general de Grupo Pastores, la cooperativa de ovino más grande de Europa. Su número de socios en la provincia de Teruel, ¿se mantiene estable?

- Desciende un poquito en función del 2% anual de jubilación, pero eso supone la mitad de lo que cae el sector en Aragón. Tras las fusiones de las tres provincias, contábamos con el 22% de las ovejas de Aragón, y ahora representamos el 33%. Es un sector envejecido y crecer es imposible, pero bajar la mitad que el resto significa que el modelo cooperativo está funcionando bien.

- ¿Y han notado un incremento del interés de los jóvenes por incorporarse al sector ante la falta de oportunidades en otras áreas?

- Hay más jóvenes que se han quedado con las explotaciones familiares. En este sentido, consideramos imprescindible una formación profesional porque la rentabilidad del sector no depende solo del precio, sino que hay que saber evitar la mortalidad de las ovejas, saber porqué algunas no crían, evitar los costes excesivos, manejar bien su alimentación… Esos son los factores que al final redundan en que una explotación sea rentable porque al final el ganadero no puede cambiar los precios, aunque las cooperativas pueden mejorarlos.

- En ese sentido, ustedes han puesto en marcha algunos cursos...

- Estamos teniendo dificultades para ajustar los cursos de formación a las exigencias del Instituto Aragonés de Empleo. Impartimos un curso de 400 horas en Huesca y quisimos hacerlo también en Monreal del Campo, pero al final no hubo alumnos suficientes porque hubo que convocarlo con mucha precipitación y tampoco las fechas y los horarios eran propicios.

Para mejorar los índices de producción y que se puedan rentabilizar las explotaciones, Grupo Pastores cuenta también con un departamento técnico, pero es necesaria la formación profesional de los ganaderos para que se puedan mejorar las explotaciones y para poder apostar por el futuro del sector.

Autor:Alicia Royo / Teruel