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Diego Gómez celebra uno de los tantos marcados con el CD Teruel este año.

Diego Gómez se encuentra a dos goles de alcanzar la histórica cifra de 400 en competición oficial. Más de media vida rondando por los campos de Segunda B y Tercera han permitido al delantero centro del CD Teruel estar tan solo a dos pasos de una marca de la que pueden presumir muy pocos, incluso dentro del fútbol profesional.

Diego Gómez se encuentra a dos goles de alcanzar la histórica cifra de 400 en competición oficial. Más de media vida rondando por los campos de Segunda B y Tercera han permitido al delantero centro del CD Teruel estar tan solo a dos pasos de una marca de la que pueden presumir muy pocos, incluso dentro del fútbol profesional. Muy cerca de cumplir los 39 años, Diego sigue disfrutando como al principio de una trayectoria que ha tenido catorce estaciones en veinte años de carrera.

-Le faltan tan sólo dos goles para alcanzar una cifra histórica por lo inusual.

-Es cierto que me faltan tan solo dos para llega a cuatrocientos en partidos oficiales, contando liga, play off, copa y copa federación. Hay un amigo que ha seguido mi trayectoria desde hace años los lleva apuntados y es él quién me lo ha comentado.

-¿Sabe si hay alguien con un registro similar?

-Lo cierto es que no lo sé. Lo desconozco.

-¿Cuando debutó con el Utebo, llegó alguna vez a pensar en alcanzar un registro similar?

-Cuando comienzas te vas poniendo metas, pero son más a corto plazo, pero llegar a esta cifra de goles nunca es una cosa que tienes en mente. Entonces te planteas jugar el mayor número de partidos y hacer goles, pero nunca una cosa similar.

-¿Se acuerda del primer gol que marcó cuando llegó a Tercera División?

-Perfectamente. Fue en un derbi Utebo-Casetas, perdíamos 0-2 y me llegó un centro desde la derecha que remate de volea. Luego posteriormente me hicieron un penalty que yo mismo lancé y me lo paró Pepe Marco. Al final perdimos 1-4.

-¿Hay alguno del que guarde un recuerdo más especial?

-Cuando llegas a estas cifras siempre hay mas de uno porque consigues marcar en momentos importantes para tu equipo. No puedo decidirme, no sabría decantarme tan solo por uno de los goles.

-Alcanzar esta cifra supone también que por detrás hay una larga trayectoria deportiva. ¿Cuando llegó al Utebo, en algún momento se planteó la posibilidad de estar persiguiendo un balón por tantos campos del fútbol aficionado?

-Nunca te lo planteas. Lo que buscas siempre es jugar al fútbol que es lo que más te gusta. A todos los que nos dedicamos a esto nos apasiona jugar. Como decía, al principio, las metas son más a corto plazo, jugar y disfrutar. Mi secreto para permanecer tanto tiempo es que en todos los sitios me he encontrado bien y he tenido la posibilidad de jugar en equipos importantes. En la mayor parte de las ocasiones los entrenadores han contado conmigo y así una cosa te va llevando a la otra.

-Aunque la mayor parte de su trayectoria ha transcurrido por equipos de Aragón, hubo un momento en el que pasó varios años fuera de la comunidad autónoma.

-Estuve seis años fuera jugando en Segunda B. En esa etapa en dos oportunidades incluso pude ir a equipos de Segunda, aunque tenía contrato en vigor y no me dejaron marchar. Fueron años en los que pude disfrutar jugando en clubes importantes más profesionales, en una etapa donde se manejaba más dinero en fichas.

-Después de esa etapa, de nuevo vuelta a casa.

-Me llamó el Ejea que tenía acompañada una posibilidad de trabajo, donde todavía sigo, y decidimos volver a Aragón.

-¿Es de imaginar que para poder estar tanto tiempo, la familia tiene que ofrecer un apoyo importante?

-A ellos les cuesta también muchos sacrificios. Con mi pareja llevo toda la vida y sabe lo que hay. Hay cosas que sabemos que no podemos hacer y ellos me han apoyado siempre.

-Dicen de usted que es el primero en llegar al entrenamiento y el último en abandonarlo. Ese sacrificio luego tiene recompensa.

-Se trata de tener sacrificio, constancia y de disfrutar con lo que hacer. Cuando cumples años el secreto es que yo disfruto también entrenando, porque es una cosa que me gusta hacer. Esto te ayuda a llevar el día a día. Es un sacrificio que llevo bien, todo el mundo espera competir el domingo, pero yo también me lo pasó bien entrenado para mejorar cada día.

-Antes comentaba que ha pasado por muchos clubes de Aragón. ¿Hay alguno del que guarde un mejor recuerdo?

-En todos los sitios he estado muy a gusto, de ninguno guardo un recuero negativo. De chaval estuve en el Zaragoza, el Stadium Casablanca y el Santa Isabel , que es mi barrio. En Ejea es donde más he estado, pero también me lo pasé bien en los demás sitios, como Tarazona, o Borja. En Andorra pasé en dos etapas, y ahora en el Teruel. Cuando estuve fuera tuve la suerte de pasar por equipos importantes donde se vive con gran intensidad el deporte.

-Curiosamente siempre fue uno de los objetivos que el CD Teruel manejaba para reforzar su delantera. ¿Que es lo que ha cambiado para aceptar ahora la propuesta?

-Son momentos y circunstancias. Es cierto que otros años hubo conversaciones, pero ellos tenían otros jugadores y yo otros equipos. Particularmente tenía esa espinita clavada, y no quería dejar el fútbol sin jugar en el CD Teruel. Estoy disfrutando mucho, el equipo está bien y yo también. Ojalá podamos alargar esta trayectoria hasta mayo o junio.

-La guinda sería culminar la temporada con el ascenso.

-Ese es el objetivo. Antes pasa por acabar la liga entre los cuatro primeros con la imagen de un equipo serio y capaz de competir con cualquier equipo nacional de tercera. Hay que llegar en las condiciones necesarias, aunque luego siempre hay condicionantes.

-Por último, una curiosidad. ¿Tiene alguna celebración preparada para el gol 400?

-No lo he pensado. No suelo ser muy efusivo y excepto en momentos puntuales no celebro los goles de forma especial. Ojalá sea pronto, pero no estoy obsesionado con el tema.

Autor:Ismael Ramón Teruel