Endesa no cierra las puertas a invertir en Andorra, pero lo vincula a ayudas estatales
Endesa no da por perdida la central térmica de Andorra. Esa es la principal conclusión de la reunión que ayer mantuvo la consejera de Economía, Industria y Empleo de Aragón, Marta Gastón, con el presidente y el consejero delegado de Endesa, Borja Prado y José Bogas, respectivamente. El encuentro, que duró más de una hora, no sirvió para traer las buenas noticias que la cuenca minera de Teruel espera desde hace meses, pero sí para mantener un hilo de esperanza que los mineros se niegan a perder a pesar de que el tiempo corre en su contra.
Endesa no se comprometió ante los representantes aragoneses a realizar las inversiones a las que le obliga la Directiva2010 /75/UE sobre Emisiones Industriales (DEI) para continuar quemando carbón en la térmica de Andorra, pero los responsables de Endesa tampoco dijeron que esta posibilidad está descartada. Es decir, algo de esperanza queda a pesar del silencio de la eléctrica, y esto precisamente es lo que quiso trasladar la consejera de Economía al término de la reunión: "Si tuvieran la decisión tomada ya lo hubieran dejado claro", afirmó evidenciando que puede que todo no esté perdido.
Pese a que aún no ha dicho que no, la compañía sigue vinculando la continuidad de la actividad de la central de carbón a las ayudas que el Estado pueda aportarle para compensar los 230 millones de euros que tiene que destinar a la planta de Teruel para cumplir con la normativa europea antes aludida y seguir con su actividad más allá de 2023. Lo peor es que estas ayudas dependen de una regulación estatal que quedó pendiente en diciembre del año pasado con la convocatoria de elecciones generales. Desde entonces y con un Gobierno central en funciones de manera permanente, Endesa no ha vuelto a tener noticias del ministerio de Industria.
La consejera de Economía subrayó la "cordialidad" con la que se desenvolvió la reunión y transmitió un mensaje alentador: Endesa "está por la labor" de que la central andorrana "continue" su actividad más allá de 2023, aunque "no tanto porque lo consideren un proyecto rentable como por las ayudas a las que se había comprometido el Gobierno" vinculadas al procedimiento de garantía por suministro, lo que llevaría a otorgar incentivos a las térmicas por la quema de carbón autóctono.
La garantía de suministro viene regulada en la Directiva europea 2003/54/CE, según la cual, "por motivos de seguridad del suministro", los Estados miembros podrán dar preferencia a la entrada en funcionamiento de las instalaciones generadoras que utilicen fuentes autóctonas (como el carbón) "en una proporción que no supere, en el curso de un año civil, el 15 % de la cantidad total de energía primaria que se consuma en el Estado". Esta normativa, por ejemplo, ya dio pie en 2010, durante el gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, al real decreto de restricciones por garantía de suministro, un marco regulatorio que dejó de estar en vigor el 1 de enero de 2015 sin que el Gobierno central haya implementado otra alternativa.
Endesa espera que se constituya pronto un gobierno que autorice esas subvenciones a las que vincula la continuidad de la térmica. La titular de Economía dijo que "la empresa está esperando que haya un gobierno en firme para negociar las ayudas por generación eléctrica", algo que, apostilló, también está esperando el Ejecutivo aragonés. "Nosotros también necesitamos una interlocución para que se retomen esos compromisos", dijo.
Endesa pide gestos
Por otra parte, Endesa pidió gestos a la representante aragonesa para que en Bruselas sean conscientes del papel que juega la central de Andorra en la provincia y del consenso que genera entre la sociedad.?Con ello se allanaría el camino a la orden de ayudas que redacte el futuro gobierno. Hay que recordar que la Comisión de la Competencia echó por tierra en otoño pasado la orden de pagos por capacidad con la que el Gobierno central pretendía incentivar la generación eléctrica en las térmicas que queman carbón nacional.
Estos gestos podrían ir vinculados a una "declaración institucional" en las Cortes de Aragón en la que, según Gastón, "ya se ha puesto a trabajar el grupo parlamentario socialista". La intención, añadió la consejera, "es conseguir unanimidad institucional en relación al carbón y a la térmica de Andorra, porque tanto Endesa como nuestro gobierno estamos por la labor del alargar la vida útil de la central". A este documento "podrán sumarse las instituciones de la provincia de Teruel", añadió, La intención pasa por "hacer todo lo que esté en nuestra mano para que en Bruselas tengan clara" la relevancia que para Aragón tiene la central de Andorra. De hecho, la consejera subrayó que "llevar un acuerdo unánime desde las Cortes de Aragón y desde la sociedad turolense sería un plus".
Hay plazo
En cuanto a los plazos, los dos representantes de la eléctrica trasladaron tranquilidad a los representantes del Gobierno de Aragón. "Endesa considera que hay tiempo.Nos ha trasladado que el calendario no es preocupante y que estamos en tiempo y forma", para que las inversiones se realicen", comentó Marta Gastón, si bien es cierto que "cuando se han dado fechas en meses pasados siempre se ha hecho pensando que a estas alturas habría un gobierno", añadió.
La reunión deja "algo de ilusión" entre los mineros
Aunque el resultado del encuentro de ayer no fue muy clarificador, las "sensaciones" transmitidas por los responsables del Gobierno de Aragón hicieron que los alcaldes mineros y responsables sindicales mantengan "algo de ilusión". Con esas palabras se expresó el responsable de UGT en Teruel, Alejo Galve, quien manifestó que "estaremos alerta y a la espera de que el Gobierno se comprometa, porque si es así, Endesa lo hará".
También el alcalde de Ariño, Joaquín Noe, sin ser exageradamente optimista, consideró que "malo hubiera sido que Endesa comunicara que no hará las inversiones, cosa que no ha hecho". En este sentido, deseó que "la declaración que se plantee en las Cortes de Aragón cuente con la unanimidad de todos los grupos políticos para poder presentarnos ante las autoridades de Bruselas con una voz clara, unánime y firme".
Autor:Maribel Sancho Timoneda