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"El secreto para mejorar la rentabilidad del ovino es producir más con lo mismo"

El profesor del área de economía agraria de la Escuela Politécnica Superior de Huesca Luis Pardo, en la masía El Chantre

El doctor en Veterinaria y profesor del Área de Economía, Sociología y Política agraria de la Escuela Politécnica Superior de Huesca Luis Pardos participó recientemente en Teruel en la jornada técnica sobre eficiencia de la producción ovina de carne, organizada por el grupo consolidado de investigación en la materia, del que forma parte.

El doctor en Veterinaria y profesor del Área de Economía, Sociología y Política agraria de la Escuela Politécnica Superior de Huesca Luis Pardos participó recientemente en Teruel en la jornada técnica sobre eficiencia de la producción ovina de carne, organizada por el grupo consolidado de investigación en la materia, del que forma parte.

Pardos aseguró que, para mejorar la rentabilidad de las explotaciones de ovino, es necesario "producir más con lo mismo", o lo que es lo mismo, "conseguir un mayor número de corderos vendidos por oveja".

- ¿Qué trabajo está desarrollando el grupo?

- El grupo, reconocido por el Gobierno de Aragón, está formado por técnicos de diferentes ámbitos relacionados con la ganadería del ovino de carne. Mi tema es la economía del sector. Como profesor de Economía Agraria de la Universidad de Zaragoza, llevo 23 años intentando mejorar la rentabilidad utilizando un programa de gestión técnico-económica en colaboración con la cooperativa Grupo Pastores. Esto nos permite tener información real de una muestra importante de explotaciones ovinas, con la que podemos trabajar para ver por qué camino tiene que ir la ganadería para mejorar la rentabilidad. Todas las acciones del grupo parten previamente de un estudio económico que manifiesta una necesidad de mejorar la rentabilidad de las ganaderías.

- ¿Se trata también de hacer la vida más fácil al ganadero?

- La mejora de la rentabilidad no puede ir separada de la mejora de la calidad de vida de los ganaderos. Hay que encontrar un equilibrio porque una buena rentabilidad sin calidad de vida no tiene futuro, y una mala rentabilidad con una buena calidad de vida evidentemente tampoco. A encontrar ese equilibrio es a lo que nos dedicamos.

- ¿Y cuáles son las claves para conseguirlo?

- Cada explotación es distinta pero de forma general hay que intentar mejorar la eficiencia, producir más con lo mismo. Ese es el secreto. Se puede hacer mucho a día de hoy por mejorar la productividad de nuestras ganaderías de muchas maneras: mejorando el aspecto reproductivo, identificando y eliminando a los animales que no son productivos, mejorando el diagnóstico de gestación, testando a los machos para que sean eficientes... Hay muchas técnicas de manejo aparte de la intensificación reproductiva que también son muy interesantes y que van todas ellas encaminadas a intensificar la productividad, es decir, a conseguir un mayor número de corderos vendidos por oveja, optimizando la alimentación. Eso es lo que intenta todo el mundo.

- ¿Y cuántos lo consiguen?

- Hay ganaderías que lo consiguen y nuestros datos lo demuestran. Y hay ganaderías que consiguen unos resultados económicos superiores a la media, lo que les permiten tener viabilidad ahora y pensamos que también en el futuro. Nuestro interés es identificar aquellas ganaderías de futuro, esto es, aquellas que puedan mantenerse en el sector.

- La crisis de precios sigue...

- A pesar de ello, hay que dar un mensaje de optimismo. Aunque es un sector en crisis, ha estado y está por mejorar su rentabilidad. Por eso estamos observando aquellas explotaciones que ya son rentables, que están abriendo el camino para que otras puedan seguir por la misma senda. Independientemente de lo que haga la Administración y del reparto de la PAC, hay cosas que dependen de nosotros mismos, de cada explotación, y son en las que intento hacer hincapié.

- ¿Qué importancia tiene el tamaño en esta cuestión?

- Es un aspecto fundamental. Las explotaciones han incrementado su tamaño, aunque esta determinado por los recursos pastables de los que disponen. Pero a nosotros nos gusta hablar más del número de ovejas que tiene que manejar cada unidad de trabajo y pensamos que ese número de ovejas tiene que estar en torno a las 500 o 550.

- Las explotaciones que de-saparecen, ¿son las pequeñas?

- Esa es una tendencia en el sector. Las explotaciones que se han manternido han aumentado su tamaño. Pero en esta cuestión influyen también aspectos sociales. Hay que tener en cuenta la elevada edad media de los ganaderos y, en muchos casos, cuando se jubilan desaparece la explotación. Existe un problema de relevo generacional.

- ¿Y qué importancia tiene la integración en grandes grupos?

- La integración cooperativa es fundamental en todo el sector agrario. Estamos hablando de un modelo de éxito, que puede servir para mejorar la comercialización de los productos, pero también la producción cuando aborda todo el ciclo productivo. Es el caso de Oviaragón Grupo Pastores. Ese es el camino que hay que seguir.

Autor: Alicia Royo / Teruel