Exigen explicaciones por el retraso en la licitación de la nueva presa del cañón
El Sindicato central de la cuenca del Guadalope ha pedido a la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) y a la empresa pública AquaEs la convocatoria en enero de una Comisión de Seguimiento de las obras de recrecimiento del embalse de Santolea, después de que haya pasado un año tras la redacción del nuevo proyecto y sin que la obra haya salido a licitación. La presa ha sido proyectada a un kilómetro y medio aguas arriba de la pared del embalse, después de que un deslizamiento en la ladera derecha llevara a AquaEs a desechar el proyecto de recrecimiento de la pared principal y a optar por la construcción de una nueva estructura de hormigón en los estrechos del cañón. Anunciada la licitación para finales de 2015, los regantes se han cansado de esperar a que el ministerio de Agricultura mueva ficha en ese sentido, y sobre todo se han sentido estafados al ver que el proyecto tenía que pasar por nuevos trámites administrativos que retrasaban la obra. Primero, nunca llegaron a comprender cómo el proyecto del cañón tenía que pasar otra evaluación ambiental, puesto que "la cota de esta obra es la misma que la del proyecto que ya fue evaluado anteriormente", argumentó el presidente del Sindicato central del Guadalope, José Fernando Murria. De hecho, apuntó, "hubo tres alegaciones que se solucionaron, así que todo estaba listo para que se licitara la obra a finales del año pasado". Pero llegaron las elecciones generales y lo que ha pasado después es de sobra conocido. Han perdido un año. En segundo lugar, los regantes acaban de saber que desde el propio ministerio de Medio Ambiente se han requerido a AquaEs "unas explicaciones fuera de plazo" que "están retrasando todavía más el procedimiento", señaló Murria, así que "estamos a finales de otro año más y seguimos sin saber nada". Los regantes están "enfadados" y "algunos quieren empezar a tomar medidas", según el presidente. En la última reunión del Sindicato central hubo quien ya propuso organizar de manera simbólica y como protesta un simulacro de inicio de obras en el propio embalse de Santolea. Y es que en opinión de Murria no se puede pedir información ahora sobre una obra que lleva en tramitación desde los años 60 del siglo pasado". En su opinión, "unos años de sequía, y éste ya ha sido un año seco, pueden enviar al garete toda nuestra zona". La CHE sometió a información pública el proyecto del nuevo recrecimiento del embalse de Santolea, en los estrechos del cañón, así como su estudio de impacto ambiental y todos los bienes y derechos afectados por las obras en noviembre de 2015. El procedimiento iba por aquel entonces en plazo, después de que un año antes el ministerio de Agricultura renunciara a llevar a cabo el proyecto de recrecimiento inicial (ampliación de la presa) al haberse detectado un deslizamiento geológico en una de las paredes del embalse que complicaba las obras. La presa del cañón de Santolea debería haber salido a licitación por un importe de 32.158.725 euros. La pared de este proyecto está a la misma cota que la del proyecto de recrecimiento anterior, por lo que gran parte de los terrenos que se han de ocupar con su construcción ya han sido expropiados durante el procedimientos administrativo del proyecto original. La obra El objetivo de la obra es el recrecimiento del embalse en 16 metros de su nivel máximo normal mediante la construcción de una presa con la misma función que la proyectada en el año 1999 mediante el proyecto que resultó fallido por motivos técnicos. La capacidad de almacenamiento del nuevo embalse debe de ser de 81,75 hectómetros cúbicos (Hm3), cuando con el proyecto inicial se llegaba a los 111 Hm3, volumen que incorpora los 17,67 Hm3 que ya puede almacenar el embalse del Puente de Santolea, construido en cola con el fin de que pueda suministrarse agua de riego aguas abajo mientras se llevan a cabo las obras en la pared principal. A estas dos infraestructuras (embalses del cañón y de cola) se añadirán los 5,42 Hm3 que quedarán almacenados entre la presa actual de Santolea y la del cañón, separadas por un kilómetro y medio de distancia. Una presa de gravedad La obra proyectada en los estrechos del cañón es una presa de gravedad de hormigón compactado. La sección tipo es trapecial, de seis metros de anchura en coronación y con taludes escalonados. La cota de coronación es de 601 metros y la altura máxima de la presa sobre cimentación de 59 metros. En la cota 596 se proyectará un aliviadero con cuatro vanos de 12 metros de longitud libre, cuya tipología es de vertido libre en pared gruesa. Las obras incluirán la construcción de un camino de servicio de la presa de un kilómetro de longitud que permitirá el acceso al estribo derecho desde la carretera que comunica Castellote con Cantavieja.
Autor:Maribel S.Timoneda