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El comité de Gilva pide a trabajadores y empresa extremar la seguridad

El Comité de empresa de Gilva convocó ayer a mediodía una concentración en el polígono La Fuensalada de Calanda en memoria de Hassoun Zakariae, de 32 años, fallecido este miércoles en un accidente laboral. Debido a la lluvia, el minuto de silencio se celebró dentro de las instalaciones de Gilva. Allí se reunió medio centenar de empleados que, con rostros serios, guardaron un minuto de silencio y escucharon el comunicado preparado por el Comité de empresa. En éste se recordaba que desde la entrada en vigor de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales en 1996 han fallecido en Aragón 838 personas.

En un tono más reivindicativo, el documento ponía de manifiesto que tanto las empresas como los trabajadores deben “garantizar la seguridad y salud en los puestos de trabajo”. El texto apelaba a la “responsabilidad colectiva y al cumplimiento de la normativa en prevención de riesgos laborales”, al tiempo que reclamaba a las “Administraciones públicas y en especial a la Inspección de trabajo y el ISSLA” que se extreme la “vigilancia del cumplimiento de la normativa en prevención de riesgos y salud laboral” y que se pongan “en conocimiento de la autoridad competente las infracciones y deficiencias detectadas”.

El Secretario de Salud Laboral de CCOO Aragón, Benito Carreras, informó de que su organización “exigirá conocer qué marco de formación tenía el trabajador y si contaba con la tarjeta que acreditase que estaba preparado” para realizar las tareas de fabricación de moldes de hormigón. Asimismo, indicó que esperarán al informe que elabore el Instituto Aragonés de de Seguridad y Salud Laboral (ISSLA), lo que determinará, en definitiva, “si había falta de seguridad en las instalaciones”. En el caso de que se confirme que no se cumplieron las medidas de seguridad, CC.OO exigirá “responsabilidades civiles y penales, puesto que estaríamos hablando de un delito contra la seguridad de los trabajadores”. Las responsabilidades civiles, apostilló el responsable de Salud Laboral del sindicato, irán dirigidas a indemnizar a la familia del fallecido.

Seguridad

La investigación iniciada por el  ISSLA y la inspección de trabajo del Gobierno de Aragón tras el fallecimiento del trabajador, que pertenecía a la empresa Milián Quílez de Calanda, intentará determinar si se cumplieron las medidas de seguridad y si el empleado contaba con la formación adecuada

Hassoum Zakariae recibió un golpe en la cabeza el miércoles por la mañana cuando se encontraba realizando tareas de fabricación de un molde de hormigón con un vibrador en las naves que Gilva tiene en La Fuensalada. Al parecer, la pieza metálica no estaba sujeta debidamente y se desprendió de un puente grúa atrapando al trabajador y lesionando a otro compañero, que resultó herido en una pierna.