Guitarte pide reconocer como economía social a los bares y tiendas de los pueblos

El diputado de Teruel Existe, Tomás Guitarte, ha presentado en el Congreso una proposición de ley para que los bares y tiendas de los pueblos de menos de 200 habitantes, así como la venta ambulante, sean reconocidas como actividades de economía social y puedan beneficiarse de sus ventajas. Así lo recoge la iniciativa que dio a conocer este miércoles en la Cámara Baja, que plantea modificar el artículo 5 de la Ley 5/2011, de 29 de marzo, de Economía Social.

La iniciativa, pese a su sencillez, supondría un aliciente para impulsar este tipo de actividades en las zonas rurales afectadas por la despoblación, ya que este tipo de establecimientos son fundamentales para el arraigo de sus habitantes, según explicó Guitarte en una comparecencia ofrecida en la sala de prensa del Congreso.

El parlamentario turolense recalcó que no era un tema secundario, sino que era de los que “más nos preocupan” porque afecta a la vida diaria de muchas personas en estos territorios. Recordó en este sentido la obligación del Estado de “mejorar” las condiciones de vida de quienes residen en los pueblos pequeños. Aclaró que “tampoco supone grandes inversiones”, sino demostrar “sensibilidad” hacia el problema existente con medidas que contribuyan a revertir la situación.

La proposición de ley, que fue registrada a finales de enero en el Congreso, plantea la modificación de la Ley 5/2011 de Economía Social incorporando en el artículo 5 las nuevas entidades que se beneficiarían de ese reconocimiento como actividades de economía social, donde figuran las cooperativas, las mutualidades, las fundaciones y las asociaciones que lleven a cabo actividad económica, las sociedades laborales, las empresas de inserción, los centros especiales de empleo, las cofradías de pescadores, las sociedades agrarias de transformación y las entidades singulares que persigan el objetivo de primar el fin social sobre el capital en sus actividades.

La iniciativa de Teruel Existe pide que en ese artículo se incorporen también como entidades de economía social “los establecimientos de hostelería y restauración situados en pueblos de menos de 200 habitantes, y los pequeños comercios, incluida la venta ambulante, que prestan sus servicios en pueblos de menos de 200 habitantes”.

Labor vital

Guitarte argumentó que este tipo de establecimientos van más allá del factor económico puesto que son fundamentales a la hora de prestar un servicio a los ciudadanos. Indicó que eran merecedores de “reconocer esa importantísima labor que realizan”, y que la mejor manera era hacerlo por ley para que puedan recibir y beneficiarse de las bonificaciones y ayudas que pueden existir para las entidades consideradas de economía social.

El parlamentario de Teruel Existe señaló que los bares y las escuelas son para la gente que vive en estos municipios “indicativos de si el pueblo va hacia adelante o cae en declive”. Añadió que los bares son además “centros sociales” en lugares donde no hay otros sitios de encuentro y socialización. Son “el auténtico  centro social de relación que contribuye a la cohesión social de sus habitantes”, porque son el sitio de referencia.

Guitarte mostró su confianza en que esta modificación de la ley salga adelante con el apoyo de los demás grupos, y que los bares y las tiendas, al igual que la venta ambulante en pueblos de menos de 200 habitantes sean reconocidos como entidades de economía social.

Además, abogó también por que se reconozca su labor y “no se pongan trabas a aquellas personas que deciden emprender en el medio rural”. Comentó que causa sorpresa ver cómo los pequeños establecimientos que hay en pueblos de muy pocos habitantes tengan que seguir los mismos trámites que en las ciudades, cuando ni la repercusión ni la fiscalidad puede ser la misma.

El diputado comentó que los servicios que se prestan están desapareciendo en la España vaciada y que más de 140.000 personas residen en municipios que carecen del “servicio social” que supone tener un bar, cifra que se incrementa en el caso de los que no tienen una tienda. Insistió en que es “crucial” incentivar los que existen y potenciar su reaparición en aquellos sitios donde se cerraron.