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Alcañiz prevé terminar las obras de Pui Pinos en febrero de 2019 Alcañiz prevé terminar las obras de Pui Pinos en febrero de 2019
Una máquina trabajaba esta semana en la primera plataforma del cerro

Alcañiz prevé terminar las obras de Pui Pinos en febrero de 2019

Pendiente de que Patrimonio autorice el traslado de la muralla para continuar
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Las obras de emergencia para el saneamiento del cerro de Pui Pinos costarán 1.100.00 euros y continuarán durante al menos cuatro meses más, esto es, hasta febrero del año que viene, según el cronograma que baraja el Ayuntamiento de Alcañiz y al que ha tenido acceso este periódico. El cumplimiento de estos plazos dependerá de cómo avancen las obras en las próximas semanas, ya que Alcañiz está a la espera de que la Comisión Provincial de Patrimonio Cultural (CPPC) autorice el desmontaje de la muralla suroeste, un paño del siglo XIV que atraviesa el cerro de este a oeste.

Cuatro meses parece poco para acometer las cuatro plataformas de ocho metros de ancho cada una que el proyecto de las obras de emergencia plantea realizar para vaciar el cerro y mejorar sus condiciones de estabilidad. No en vano, la única máquina retroexcavadora que trabaja en el cabezo todavía no ha terminado la primera de las cuatro que están previstas.

Hasta ahora, las máquina se ha ubicado en la parte más elevada del cabezo, a la altura del parque del Cuartellillo, y se ha dedicado a la retirada de rellenos de la pared, lo que ha conformado la primera plataforma llana. 

Pese a la urgencia de la obra, los trabajos han avanzado muy lentamente durante los últimos meses y más ahora que se han topado con los restos de la muralla suroeste que quedó en pie tras las tareas de desescombro realizadas en 2017. 

El 31 de octubre

Por otra parte, entre tanto no se pronuncie la CPPC en su reunión de la semana que viene, la obra poco más puede avanzar, ya que Patrimonio advirtió al Ayuntamiento de que no toque la muralla en tanto no se tome una decisión sobre qué hacer con el paño que atraviesa el cerro. 

Los restos arqueológicos impiden, según un informe técnico redactado por la empresa Prodia SLP, avanzar y continuar con la excavación y realizar las cuatro plataformas previstas. 

Los ingenieros de la empresa, que tiene encomendada la dirección de obra, han propuesto o bien retirar los restos de la muralla para que sean acopiados y montados en otro lugar, según criterio de la Administración, o bien retirarlos y volverlos a montar cuando terminen las obras de emergencia. En ambos casos se hace necesaria, según el criterio aportado por los ingenieros, la retirada del muro medieval para continuar con el vaciado del cabezo.

Si el día 31 de octubre la Comisión de Patrimonio no autoriza la retirada de la muralla, el Ayuntamiento ha advertido de que las obras no podrán continuar, tal y como se puso de manifiesto en la última comisión de Infraestructuras y urbanismo, donde quedó constancia de la tensión que existe sobre este asunto entre el Ayuntamiento de Alcañiz y el departamento de Patrimonio del Gobierno de Aragón, después de que éste amenazara con sanciones si se intervenía en la muralla sin el debido permiso. Como contestación, el Ayuntamiento envió a su vez un escrito advirtiendo de que éstas eran obras de emergencia y de que de no llevarse a cabo podrían producirse daños y perjuicios de los que no se haría responsable como administración