Andorra se convierte en el primer pictopueblo inclusivo de la Comunidad

Doscientos centros públicos, comercios, edificios singulares y monumentos de Andorra son ya identificables por personas con diversidad funcional gracias a los pictogramas que figuran en sus fachadas. La localidad se ha convertido en el primer “pictopueblo” de Aragón dentro de las iniciativas de interés social contempladas en el plan socioeconómico que acompaña al proyecto de Endesa para el Nudo de Transición Justa Mudéjar.

El plan de creación de valor compartido (CSV, por sus siglas en inglés) que Endesa aplica en la construcción de sus instalaciones renovables ha hecho, desde esta semana, que personas con discapacidad intelectual o con problemas de comprensión puedan superar las barreras del lenguaje identificando los lugares de forma sencilla y visual.

Se trata del segundo pictopueblo que lleva a cabo Endesa dentro de esta filosofía de CSV. El primero se llevó a cabo en 2020 en la localidad malagueña de Almargen.

En esta iniciativa se ha implicado la Agrupación Turolense de Atención a Personas con Discapacidad (Atadi), que ha participado del proyecto de desarrollo urbano inclusivo en todas sus fases: desde el diseño y conceptualización del proyecto, pasando por la identificación de las localizaciones e interlocución con el comercio local, y concretando en la fabricación e instalación de los pictogramas.

El proyecto ha consistido en la colocación de imágenes básicas (pictogramas) que permiten señalar lugares y edificios singulares, instalaciones y negocios, para que las personas con diversidad funcional, problemas de compresión o incluso barreras idiomáticas puedan identificar los lugares de forma sencilla y visual.

Tendrá como beneficiarios directos personas con alguna discapacidad del propio colectivo de Atadi y del colegio de educación especial Gloria Fuertes. De modo que esta iniciativa contribuye a la inclusión plena de las personas con diversidad funcional a través de la eliminación de barreras en entornos sociales que mejoren su accesibilidad cognitiva y comunicativa.

El proyecto, que ha recibido una inversión de 25.000 euros, fue presentado con participación del alcalde de Andorra, Rafael Guía; el director del Proyecto de Transición Justa Mudéjar de Endesa, Ramón White; el director administrativo de Atadi, José Antonio Mora; y la directora del colegio Gloria Fuertes, Lola Oriol.

Guía señaló que el proyecto hace de Andorra “un pueblo mucho más amable, sostenible y atractivo a un turismo inclusivo” en auge.

“Un día feliz”

White aseguró que el jueves fue “un día feliz” para Endesa, pues se facilitará “el día a día de estos colectivos con los que estamos comprometidos”. El proyecto “forma parte del plan de acompañamiento socioeconómico que presentamos en la oferta al concurso de Transición Justa que convocó el ministerio”. De modo que “hemos querido contar con Atadi, que en el ámbito de la discapacidad es una entidad de referencia en Teruel y en Aragón, y hemos contado con el apoyo del ayuntamiento para hacerlo posible”.

Mora deseó que facilitar la accesibilidad cognitiva sea “un derecho universal” para “que las personas que tienen dificultades de comprensión puedan llevar una vida normal”.

“A nivel de inclusión es importante que la sociedad cree unas condiciones de base para que todos seamos ciudadanos de primer nivel, que tengamos las mismas oportunidades”, añadió Mora, que aseguró que el “reto ha sido importante” y “ha contribuido a generar y mantener algún puesto de trabajo en el centro especial de empleo” en Andorra.

Mora recordó que Atadi está presente en 10 localidades de la provincia y atiende a personas de hasta 45 municipios. “Este es un punto de inicio y nos gustaría que el resto de ayuntamientos e instituciones se contagiaran para hacer de Teruel una provincia mucho más inclusiva”, concluyó.

“Para el colegio ha sido un placer trabajar con Atadi. Permitir la accesibilidad cognitiva es un lujo, pero nada es casualidad. Me gusta decir que Andorra es el lugar más inclusivo que conozco. Las personas con discapacidad intelectual son ciudadanos de primera y tienen el derecho de tener esa información accesible”, resaltó Oriol, quien trasladó el “momento de emoción” que sintió la comunidad cuando vieron los pictogramas colocados definitivamente.