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Carlos Abad, presidente de Adibama: “No devolveremos ni un solo euro del Leader; vamos a agotar el presupuesto” Carlos Abad, presidente de Adibama: “No devolveremos ni un solo euro del Leader; vamos a agotar el presupuesto”
Carlos Abad, en una fotografía de archivo en la sede de Adibama

Carlos Abad, presidente de Adibama: “No devolveremos ni un solo euro del Leader; vamos a agotar el presupuesto”

El grupo de acción local ha comprometido ya el 84% de los 3 millones del periodo 2014-2020
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Carlos Abad ha sido reelegido presidente de la Asociación para el Desarrollo Integral del Bajo Martín y Andorra-Sierra de Arcos (Adibama). Aspira a gastar los 3 millones de euros que le fueron asignados al grupo de acción local del programa Leader 2014-2020, sostenido con fondos de la Unión Europea y los gobiernos de España y Aragón, para lo que anima a cualquier empresario, ayuntamiento o asociación que tenga un proyecto a presentar una memoria en la sede de Albalate del Arzobispo.

-Afronta su quinto mandato al frente de Adibama. ¿No hay relevo?

-Entre otras cosas, esa es la razón. Este año en la asamblea he detectado que alguien podía tener interés, pero nadie quiere dar el paso definitivo. Nos cuesta tener gente que quiera estar en la junta directiva; requiere tiempo.

-Adibama tiene un gerente y un administrativo que realizan toda la gestión. ¿En qué consiste la labor del presidente?

-Es una labor representativa. Se trata de acudir a todos los actos en los que está presente Adibama. No diría que es meramente protocolario, pero casi.

-¿Goza de buena salud su grupo de acción local?

-El grupo está funcionando. No ha tenido nunca un conflicto interno de tipo político, cuando en los grupos Leader intervienen ayuntamientos, comarcas, organizaciones de empresarios o centros culturales. Hemos tenido la paz de que la política no se ha metido dentro de las decisiones. Se toman siempre por unanimidad y esa tranquilidad se debe a una independencia y justeza muy arraigada, lo cual es de reseñar y de agradecer.

-Este es el último año del programa Leader 2014-2020. ¿Qué balance hacen?

-Aunque acabe este año, tendremos más tiempo para acabar los proyectos que están iniciados. Esperemos que se renueve y las noticias así parecen indicarlo. Tanto Europa, como la Comunidad Autónoma como el Estado están por la labor. Es la forma idónea de atender a las necesidades de los pueblos más pequeños, pues tratamos de manera casi personalizada a todo el entramado social. 

-¿Todavía hay quien no conoce de la existencia de los grupos Leader?

-Muchas veces, en los pueblos, no se dan cuenta de que pueden tener ayudas si amplían sus negocios. La clave es que la ayuda no resuelve totalmente la inversión, por lo que el particular siempre tiene que aportar la mayor parte. 

-¿Qué porcentaje de inversión subvenciona Adibama?

-Como máximo el 35%, pero vamos a intentar subirlo. Puntuamos si el pueblo es pequeño, si son jóvenes los que emprenden, si son mujeres… Yo lo que quiero es que no devolvamos ni un solo euro. Vamos a agotar el presupuesto que tenemos porque hay proyectos sobre la mesa. Hay grupos en Aragón que ya prevén que no lo van a gastar todo, y es previsible que el Gobierno de Aragón, que coordina el programa, redistribuya a quienes tengan más capacidad de gasto.

-¿Qué presupuesto tenían y qué porcentaje de gasto llevan?

-El presupuesto asciende a 2.337.248 euros para subvenciones. Después tenemos 562.000 euros para gastos de funcionamiento y de promoción, y además otros 150.000 euros para proyectos de cooperación entre grupos Leader. Entre todo, hemos comprometido un 84% del gasto, por lo que el nivel está bien. La mayor partida es para proyectos productivos, que sobrepasa el 60% del presupuesto. 

-¿Cuáles son los sectores más beneficiados?

-Sobre todo, el agroalimentario y servicios, como restaurantes o casas rurales. Los transformadores, como pueda ser una cárnica que hace chorizos, suelen entrar bien en el programa.

-¿Qué objetivo se marca para los próximos años?

-Es fundamental tratar de promocionar estas ayudas. Hay que salir a predicar que estamos gestionando fondos públicos. Todavía hay que difundirlos y dar confianza a la gente para tratar de culminar el proceso sin que nos sobre nada. Con eso nos damos por satisfechos. En nuestras dos comarcas los pueblos son muy pequeños y luce muchísimo ayudarles. Das una ayuda en Andorra y pasa desapercibida, pero la das en Jatiel o Crivillén y salen a darte las gracias con una manifestación. El propósito, repito, es que no sobre dinero.

-Se benefician empresarios y ayuntamientos, pero también asociaciones. ¿De qué forma colaboran con ellas?

-Nosotros no somos los que generamos la idea, sino que somos receptores de proyectos que necesitan ayuda. Las asociaciones son todas pequeñas y lamentablemente están desapareciendo. La gente se hace mayor y la gente joven no entra. Pero como cualquier entidad, tienen posibilidades de presentarnos algún proyecto para mejorar la sede y hacer alguna actividad que sea subvencionable. A menudo ocurre que no saben presentar una memoria, pero nuestros técnicos tienen capacidad para ayudarles.

-¿Es fundamental mantener el programa Leader para luchar contra la despoblación?

-Los siete grupos Leader de la provincia de Teruel estamos metidos en el proyecto de cooperación Desafío SSPA 2021: Teruel, Cuenca y Soria ante el reto demográfico y la despoblación, con el apoyo de CEOE y los grupos de acción local de estas provincias. Funciona como una especie de lobby para que desde Europa vengan fondos específicos para combatir la despoblación.

Pretendemos que se haga lo mismo que en las zonas frías de Europa, donde montaron industria y llevaron a gente de fuera para poblar aquello, pero en el sur de Europa y con el fin de no tanto traer gente, sino evitar que la población actual se nos vaya.

-¿Qué ha supuesto la marca de calidad norteTeruel para estas dos comarcas?

-En su día invertimos para crear la publicidad necesaria para que los empresarios se adhirieran a ella, se hizo un logotipo, un registro, etc. El otro día dimos a cuatro nuevas empresas y entidades la carta de calidad de balnearios, centros de estudios locales, museos y turismo activo, para que la puedan exhibir en sus productos y servicios. El programa ha sido un éxito pero este presupuesto está agotado. En el Matarraña, por ejemplo, al ser un territorio más grande y tener más conciencia de territorio ha sido un éxito.

Nosotros tenemos menos pero estamos funcionando muy bien, notamos que la publicidad que se le está dando beneficia a los que tienen las cartas específicas para los sectores turístico (alojamientos y restaurantes) y agroalimentario (aceite, queso y miel). Ahora hay que conseguir que ellos mismos generen su propia publicidad. Hemos arrancado, pero ahora ellos tienen que andar.

-Poco pueden hacer ustedes para absorber los centenares de puestos de trabajo que se perderán con el cierre de la central térmica de Andorra, pero cualquier puesto de trabajo que puedan generar, bueno será.

-Ahí no podemos entrar porque nuestro límite está en empresas que tengan hasta diez trabajadores. Como entidad y colectivo que está muy organizado, seguiremos apoyando en aquello que se nos pida y acudiremos a las manifestaciones y a las reuniones donde se nos invite. Pero económicamente no podemos hacer por atraer industrias.