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Doce clanes y el escuadron romano recrean en Lakuerter Íbera el espíritu guerrero de los andorranos Doce clanes y el escuadron romano recrean en Lakuerter Íbera el espíritu guerrero de los andorranos
Desfile íbero por las calles de Andorra, durante la inauguración de Lakuerter Íbera. Marcos Navarro

Doce clanes y el escuadron romano recrean en Lakuerter Íbera el espíritu guerrero de los andorranos

La villa de Andorra se viste de época para recordar y honrar en ambiente festivo a los antepasados del lugar
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Dos mil personas recrean un gran poblado íbero en la avenida Dos de Mayo de Andorra desde que este viernes por la tarde se encendieran los pebeteros de los 12 clanes y el escuadrón romano que se remontan más de 2.000 años en el tiempo para rememorar los orígenes de la localidad con la celebración de Lakuerter Íbera.

“Andorra es un pueblo guerrero, luchador, nos debemos a nuestros orígenes y sacamos a relucir toda nuestra sangre guerrera en esta fiesta”, sentenció el flamante presidente del Consejo de Clanes, Raimundo Blasco, que invitó a participar a toda la ciudadanía turolense en esta fiesta declarada de Interés Turístico de Aragón pero que aspira a ser nacional, según apostilló Sheila Cazorla, la vicepresidenta de la nueva “asociación de asociaciones” que está en ciernes para mayor proyección del evento.

Los clanes son el alma

La fiesta, integrada en el calendario de la Asociación Española de Recreaciones Históricas, alcanza su XV edición. Durante todo el fin de semana, el solar frente a la estación de autobuses recrea la vida y costumbres de los antepasados íberos que habitaban la zona. Cada uno se organiza internamente y cuenta con príncipe, sacerdotisa, sabio, guerreros y agricultores, entre otros, y están representados por animales. Inicialmente se constituyeron los clanes del Lince, Toro, Caballo, Buitre y Jabalí, y posteriormente se fueron sumando el Lobo, Búho, Cabra, Ciervo, Cuervo, Culebra y Grulla. Les acompañan los romanos, contra los cuales se representan batallas.

La principal novedad de la velada del viernes fue un toro embolado íbero, que tuvo lugar de madrugada en la plaza de toros con la colaboración de la peña taurina y el clan de la Grulla, inspirado en una tradición documentada de las batallas de los íberos contra los cartagineses.

Los actos comenzaron siete horas antes con la inauguración en la plaza del Regallo, en esta ocasión a cargo de las Guerras Cántabras de Los Corrales de Buelna y con homenaje póstumo a César Fernández. Uno de sus participantes, Luis Peñín, explicó que llevan acudiendo a Andorra desde 2013 “porque nos tratan muy bien y estamos a gusto”. Tal es así que se les ha visto incluso en las fiestas de San Macario.

En su localidad tienen un “campamento cántabro y uno romano”, en plena naturaleza, e instalan un circo “donde se hacen las representaciones”. También hay un desfile.

Un mercado íbero con artesanía y alimentación ambienta la avenida Dos de Mayo durante todo el fin de semana.

Este sábado, los actos principales serán la presentación de los nacidos a los dioses por la mañana, y la lucha de gladiadores y torneo de juegos íberos por la tarde, a los que sucederá el tradicional desfiles de clanes.

El domingo habrá una demostración de artesanía y oficios a cargo de los clanes, y la asociación de la tercera edad asará mondongo para todos. La Martingala y Celticue ambientarán musicalmente el evento.

Visitas al Cabo a las 12:00

La fiesta, que se inventaron los empresarios locales en 2009 para dinamizar el comercio local en base a una tradición, es un homenaje a los vestigios íberos de la localidad, principalmente el poblado de El Cabo, que hace 23 años fue excavado en su totalidad tras ser hallado en una mina a cielo abierto. Hoy es visitable en el monte de San Macario, donde se reconstruyó a modo de parque arqueológico único en España. Este fin de semana se podrá acceder gratis, con posibilidad de subir en minibús (11:30 horas) a 1 euro con reserva previa en www.eventum365.

“Es la decimoquinta edición y esto es señal de que la fiesta va a más cada año. Estoy muy contento porque la gente del pueblo se involucra completamente con esta celebración y cada año hay más clanes y más gente que participa en esta recreación con amplio componente lúdico y cultural”, manifestó el alcalde de Andorra, Rafael Guía.

Ahora los clanes se agruparán en “asociación de asociaciones”, lo que les permitirá “llegar a subvenciones” y tener más pulmón económico, dijo Guía. “Estamos en la Asociación de Fiestas y Recreaciones Históricas de España, vamos a Intur y Fitur todos los años y poco a poco nos vamos promocionando”, dijo el regidor.

Preguntado por si el año que viene los clanes ya no estarán en Dos de Mayo ante la intención del consistorio de levantar en este espacio un pabellón multiusos, el alcalde se limitó a decir que se hará “si la economía lo permite”.

“Ellos nos cuentan que están muy a gusto aquí porque están todos juntos. Hay opiniones de que podrían volver a los orígenes, más repartidos por el pueblo, y con un año vista barajaremos las opciones”, concluyó”. Blasco aseguró que en el emplazamiento actual es difícil hacer hueco a más clanes, pero existe demanda porque “los jóvenes quieren tener grupo propio”.

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