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Éxito de público  en la representación del Drama de  la Cruz de Alcorisa Éxito de público  en la representación del Drama de  la Cruz de Alcorisa
Cristo es crucificado en el momento cumbre de la representación. M.C. Aguilar

Éxito de público en la representación del Drama de la Cruz de Alcorisa

Las pantallas gigantes para seguir la representación, novedad de este año
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El público respondió el Viernes Santo y volvió a abarrotar el espacio natural del Calvario de Alcorisa, donde se desarrolló el Drama de la Cruz que narra los últimos días de la vida de Cristo con total realismo y rigor histórico.

La actuación destacó este año por la instalación de tres pantallas gigantes, que permitieron a los espectadores disfrutar con mayor comodidad de una representación que involucra a unos 300 vecinos del municipio turolense.

Una hora antes de que comenzara el Drama de la Cruz, eran centenares los espectadores que buscaban un sitio en la Plaza José Ángel Azuara de Alcorisa. Este año, los visitantes, mientras esperaban, pudieron ver el documental que la Asociación Cultural ha elaborado en el 2020.

En ese documento audiovisual se hace un repaso de la historia del Drama a través de los 17 alcorisanos que han representado el papel principal de Cristo.

Más de 45.000 Watios de sonido, más de 500 metros de fibra óptica, 8 videocámaras y un equipo de 25 técnicos se emplearon para que la representación, que se desarrolló en un escenario de más de 20.000 metros cuadrados, se pudiera seguir también a través de tres pantallas gigantes y por streaming.

La representación comenzó con el sermón de la montaña, en la que el Cristo -interpretado este año por Iván López- hace un sucinto resumen de las enseñanzas del Mesías. Tras varias escenas como la última cena o la flagelación, la obra se desarrolla a lo largo del vía crucis natural del Calvario de Alcorisa. Entre esas escenas destaca la del encuentro con el Cirineo.

Como es habitual, tanto Jesús como los ladrones no cargan con una cruz, si no que suben portando un madero en los hombros, tal como solían ser los castigos de los romanos en el siglo I.

En lo alto del monte Calvario se procede a la escena final de la crucifixión. Se hizo un silencio sepulcral en el momento en que la guardia romana golpeaba los clavos de manos y pies de los tres ajusticiados. Durante toda la escena, la pantalla gigante situada en la parte de arriba se apagó para preservar la plasticidad y dramatismo de la escena cumbre de la representación.

“Ha sido una sensación muy especial representar el papel de Cristo ante tantísima gente”, explicó Iván López. “Han sido muchos meses de ensayos y de nervios para poder completar la interpretación. Estamos todos muy satisfechos con el resultado”.

El presidente de la Asociación Drama de la Cruz, Jorge Martín, destacó tras finalizar la representación que “ahora toca hacer balance de la representación de este año. Como siempre decimos, ponemos en marcha ya para la del año próximo cuando se desarrollará la 47 edición”.

La tradición de representar la pasión de Cristo goza de popularidad en algunos pueblos españoles dentro de espacios cerrados, pero la singularidad del de Alcorisa es que se representa al aire libre aprovechando el citado Calvario que data del siglo XVI.