

Fallece Ángel Alcalá, ilustre humanista e Hijo Predilecto de Andorra
El filósofo y filólogo es considerado un “sabio” por su brillante trayectoriaEl Hijo Predilecto de Andorra Ángel Alcalá Galve ha fallecido este domingo a los 89 años de edad. El filólogo, filósofo, teólogo e historiador es considerado “un gran sabio” en la villa minera, que llora su muerte en un fin de semana aciago por la muerte del operario de la central térmica Luis Polo.
Alcalá, con estudios superiores de Filosofía, Teología y Filología, enseñó la primera materia en la Universidad Pontificia de Salamanca hasta que, en 1963, se trasladó a Nueva York para impartir Literatura Española en la City University. Publicó una treintena de libros y un centenar de ensayos sobre muy diversas materias, entre ellos: Medicina y moral en los discursos de Pío XII, La Iglesia, misterio y misión, Proceso inquisitorial de fray Ángel de León, Vida y muerte del príncipe don Juan, Testigo, víctima, profeta: Ramón J. Sender, Alcalá-Zamora y la agonía de la República, Los judeoconversos en la cultura y sociedad españolas o Música, pintura, poesía: poemas a la música y los músicos en la literatura europea.
Miembro correspondiente de la Academia de Historia y reconocido experto en la Inquisición, editó las obras de Alfonso y Juan de Valdés, y tradujo y editó las de Miguel Servet en siete tomos. En 2015, además, publicó su primera novela histórica: La infanta y el cardenal.
Por su relevancia intelectual y social recibió en 2003 la Cruz de San Jorge de la Diputación de Teruel y fue nombrado en 2005 Hijo Predilecto de Andorra. También es socio de honor del Centro de Estudios Locales de Andorra (Celan), que a las 18 horas de este domingo anunciaba que su hija les había transmitido que Ángel había fallecido de madrugada en Nueva York, donde residía.
Este lunes el pleno del Ayuntamiento guardará un minuto de silencio. “Fue un andorrano ilustre que ha dejado a Andorra en lo más alto”, valoró la alcaldesa, Sofía Ciércoles, quien lamentó que, tras el trágico accidente en la térmica del viernes, “Andorra vuelve a estar de luto”.
“Llevaba en el corazón” a su pueblo, que soñaba “rico culturalmente; su vitalidad y emoción siempre estuvieron presentes en cuantas actividades realizamos conjuntamente”, valoraba ayer el Celan en una nota de prensa.
Homenaje en vida
“Le recordaremos con su sonrisa y sus palabras”, continuó el Celan, en referencia al homenaje que, junto al Ayuntamiento y el Instituto de Estudios Turolenses (IET), le brindó en octubre de 2016, cuando se presentó una publicación titulada Homenaje a Ángel Alcalá: un humanista aragonés. En ese acto, el erudito dijo: “Mi pasión es la libertad, la igualdad, las grandes ideas humanas, los grandes valores que nos hacen progresar en la historia”.
Aquel libro, coordinado por el también Hijo Predilecto de Andorra Eloy Fernández Clemente –el tercero junto al ‘Pastor de Andorra’, José Iranzo, fallecido en 2016–, tenía como única pretensión que su obra fuera reconocida en el pueblo y en la provincia.
El presidente del Celan, Javier Alquézar, valoraba en aquel acto que Alcalá “siempre” estaba allí cuando se le llamaba para una iniciativa cultural de Andorra. “Ángel siempre ha mostrado una fidelidad inquebrantable hacia el pueblo que le vio nacer”, valoraba Alquézar, consciente de que el intelectual era querido y reconocido entre sus paisanos, “pero su obra, sus libros, sus investigaciones, sus preocupaciones intelectuales, su docencia no es conocida al mismo nivel en el que está su reconocimiento público”.
Al homenaje asistió Fernández Clemente, quien reconocía a Alcalá como “profesor, amigo, paisano y hasta pariente de algunos de nosotros, hermano mayor y maestro intelectual: estamos homenajeando a un gran sabio”. Y es que toda su vida giró “en torno a las grandes ideas, al gran pensamiento (filosófico, teológico, literario) español de la modernidad de oro”. Porque “se ha quemado las cejas en archivos y bibliotecas de medio mundo y nos ha contado esos mundos con maestría y claridad”.
El director del IET, Félix Royo, destacaba su “actitud vital”, pues “no ha perdido las raíces andorranas pese a trabajar fuera”.
“Abrid los ojos” con el carbón
En aquel acto, Alcalá quiso dar unas “ideícas” para el futuro de Andorra con las que entró de lleno en la problemática del carbón. “Cuando una empresa se sitúa en un pueblo establece un contrato social con la comarca. Endesa no puede abandonarnos, hay una responsabilidad corporativa”, dijo. Sin embargo, “¡tenéis que abrir los ojos! La era del carbón ha terminado, la energía hoy día tenemos que sacarla de las fuentes limpias: ¡agua, viento, sol! Sueño con Andorra como la puerta de los vientos, el futuro; hay que aceptar la realidad en función del progreso”, concluyó para aplauso del público. El mismo que ahora se le brinda en agradecimiento a su trayectoria profesional y, sobre todo, vital.