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IU alerta del impacto socioambiental  de la macrogranja  de Pini en Alcañiz IU alerta del impacto socioambiental  de la macrogranja  de Pini en Alcañiz
Coloquio ‘¿Macrogranjas o futuro’, el jueves en el Palacio Ardid. IU

IU alerta del impacto socioambiental de la macrogranja de Pini en Alcañiz

Un coloquio en el que participa Ecologistas en Acción critica la ganadería intensiva
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La granja del Grupo Pini en Alcañiz consumirá 800 millones de litros de agua y generará 434.000 metros cúbicos de purines en caso de que se llegue a materializar, además de tener impacto sobre zonas protegidas y humedales, y efectos sobre el turismo, la calidad del aire y la salud. Así lo advirtió Izquierda Unida el pasado jueves en el Palacio Ardid de Alcañiz, durante el acto público “¿Macrogranjas o futuro?” en el que, junto a Ecologistas en Acción, abrió una reflexión sobre la trascendencia del modelo de ganadería intensiva en las zonas rurales.

El encuentro tuvo lugar un día después de que, el miércoles, el Ayuntamiento de Alcañiz ordenara la paralización de las obras en una parcela del polígono 501 de la pedanía de Valmuel en la que se plantea la construcción de una explotación porcina, al carecer la empresa promotora de la pertinente licencia de obra que debe expedir el consistorio.

El martes, Ecologistas en Acción, la coordinadora Stop Ganadería Industrial e Izquierda Unida denunciaron precisamente ante el consistorio alcañizano el inicio ilegal de estas obras, promovidas por el Grupo Pini a través de Litera Meats SLU. Se trata de un proyecto que está pendiente de aprobación por el Instituto Aragonés de Gestión Ambiental (Inaga) y sobre el que se han presentado alegaciones en su fase de exposición pública. El consistorio advirtió al promotor de las obras de que el incumplimiento de la orden de paralización constituye una infracción grave, tipificada en el artículo 275 de la Ley de Urbanismo de Aragón. 

“Un disparate”

El encuentro organizado por IU contó con las intervenciones de María Milián, portavoz de IU-Ganar Alcañiz en el ayuntamiento; Ester Rubio, ganadera y activista de Malas Yerbas; Nacho Escartín, miembro de Ecologistas en Acción; y Jesús García, responsable de modelo productivo de IU Aragón.

Escartín consideró “un disparate” que el ayuntamiento haya permitido que una empresa multinacional sin ninguna vinculación con el municipio haya iniciado unas obras ilegales sin permisos administrativos.

Escartín denunció además que la empresa promotora pretende construir en el Bajo Aragón 25 macrogranjas clónicas de cerdos, lo que supone, según dijo, un ataque directo a la salud pública de la zona, por el consumo de agua y por la posible contaminación por exceso de nitratos mal gestionados.

El portavoz de Ecologistas en Acción aseguró que el Grupo Pini es propietario del matadero de Binéfar y ha ampliado su nicho de negocio para matar más cabezas. La siguiente actividad asociada, denunció el ecologista, son “las plantas de biometano” para eliminar purines. Pidió al Gobierno de Aragón “que amplíe el foco porque son 25 proyectos que, unidos, tienen unos impactos tremendos”, cuando Aragón ya es “la región que más cerdos produce de Europa”, aseguró.

IU alertó sobre el impacto negativo de las macrogranjas. En su opinión, se trata de contaminación de acuíferos, emisión masiva de gases de efecto invernadero, consumo desproporcionado de agua y deterioro de la calidad de vida en el medio rural.

La formación defiende un modelo alternativo basado en la sostenibilidad, la economía local y el empleo digno. “Entre placas fotovoltaicas, aerogeneradores, Catalinas y macrogranjas, nos vamos a tener que marchar a vivir a otro sitio”, resumió Milián, quien valoró positivamente que la charla interesara a 60 personas, entre ellas varios vecinos de Valmuel “que no están de acuerdo con que pongan una granja de 8.000 cerdos al lado del río Regallo”.

El acto fue un encuentro para la ciudadanía, colectivos sociales, profesionales y representantes políticos comprometidos, según IU, con un futuro rural vivo, justo y respetuoso con el medio ambiente. “Se propuso hacer una plataforma”, dijo Milián.

Rubio explicó las dificultades que tienen los autónomos que quieren montar una granja, primero con los trámites administrativos y después porque dependen de los métodos de las integradoras en su mayor parte. “Les obligan a entrar en una rueda y al final queda muy claro que quien manda son empresas como Litera Meat y Grupo Jorge”, denunció Milián.