La plantilla de la Policía de Alcañiz denuncia que faltan seis agentes

La plantilla de la Policía Local de Alcañiz ha denunciado que el municipio carece de un “servicio  adecuado a las necesidades actuales” de la ciudad como consecuencia de las plazas sin cubrir -hasta seis- que tiene el cuerpo. La representación sindical llega a hablar en un comunicado de “éxodo de policías” que se repite “año tras año y que obedece a “unas deplorables condiciones laborales y económicas”.

El conflicto laboral tiene como punto de partida unas reivindicaciones salariales que según el concejal de Policía, Nacho Esparrells, ya se están abordando “en la mesa de personal y sectorial de policía”. Según el edil, “antes de que termine la legislatura”, esto es, antes de mayo, “esperamos que esté solucionado”.

La representación sindical menciona las “numerosas jubilaciones producidas en una plantilla ya de por sí mermada, y con una media de edad elevada”, lo que provoca que haya “escasez de medios humanos sin precedentes” y que “ha desencadenando la parálisis total de nuestro cuerpo policial, que impide la prestación de un servicio público mínimamente adecuado”.

Según los agentes, “varios oficiales han dejado Alcañiz para prestar servicio como agentes en otra localidades, prefiriendo descender de categoría profesional, antes que quedarse en este municipio”. 

En esos nuevos destinos les  ofrecen “mejores condiciones laborales y económicas, además de mayor facilidad para desempeñar su labor, mediante un reconocimiento profesional adecuado a los tiempos actuales”.

El concejal de Policía reconoció que “tienen razón” y que algunos profesionales “se han ido porque en otros sitios tienen  mejores condiciones económicas y laborales”, pero apuntó que “lo  estamos intentando resolver”, a través de una negociación que pasaría por “un aumento retribuido a través de la escala C1, con un factor de dedicación y otro de titulación, con lo que se equilibraría un sueldo medio de cualquier otra policía”.

No obstante, el concejal recordó que no son solamente las condiciones económicas lo que provoca la huida de policías. “Casi todo el mundo que aprueba en Alcañiz es de otra localidad y en el momento en el que tienen otra plaza que sale en sus localidades de origen se van”, puntualizó. 

Por otra parte, Esparrells recordó que “ahora estamos con una oposición en marcha que finalizará antes del primer semestre de este año. La intención es que se cubran todas las vacantes, que son seis, lo que supondrá que la merma de personal desaparecerá”.

Desde la representación sindical de la Policía Local apuntaron que en los últimos 20 años “han pasado por la plantilla 54 agentes, 32 de los cuales la han abandonado”. Eso se traduce en que seis de cada 10 policías han dejado Alcañiz, lo que “supone que existe una plantilla poco estable y consolidada, circunstancia que redunda en un cuerpo de menor cercanía”. 

Además, buena parte de los que se marcharon “eran agentes ya formados y experimentados, con abundante conocimiento del municipio y de sus gentes”.

Los agentes llegan a hablar de que esta fuga de agentes supone un “derroche para las arcas municipales” como consecuencia “del coste económico que tienen las convocatorias de oposiciones” (ahora mismo hay una en marcha). A ello se suma el coste “tanto de la formación inicial obligatoria en Zaragoza, como de la adquisición de equipación completa para los agentes de nuevo ingreso”.

Por otra parte, afirman que desde el año 2011 -cuando se incorporaron tres policías al cuerpo-, se han marchado un total de 13. Y no fue hasta septiembre de 2018 -siete años después-, cuando se incorporaron tan solo otros dos policías, mediante una convocatoria que no logró cubrir el total de vacantes ofertadas.

Todas estas circunstancias provocan que “un gran número de avisos ciudadanos queden sin atender”. Y en este sentido recuerdan que durante el pasado mes de enero, se produjeron un total de 331 requerimientos, de los cuales 200 -más de la mitad-, no pudieron ser atendidos por falta de patrulla. 

Además, desde enero se ha paralizado el procedimiento de tramitación de denuncias de tráfico, debido a la jubilación del funcionario administrativo-policial que desempeñaba esa labor. Desde entonces el abono de las denuncias depende de la voluntad de los denunciados.