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La religiosa Pilar Omella defiende en Alcañiz la “cultura del cuidado” para todos y pide un cambio desde la esperanza La religiosa Pilar Omella defiende en Alcañiz la “cultura del cuidado” para todos y pide un cambio desde la esperanza
Pilar Omella leyó el pregón de Alcañiz. Tomás Santos

La religiosa Pilar Omella defiende en Alcañiz la “cultura del cuidado” para todos y pide un cambio desde la esperanza

Ha sido la pregonera de la Semana Santa 2023
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El pregón de Lunes Santo para la Semana Santa alcañizana fue protagonizado por Pilar Omella, hermana de la Congregación de Santa Ana e hija de Alcañiz, a donde se ha acercado en los últimos años después de tres décadas de labor docente y misionera desde Sevilla. Pronunció las palabras inaugurales de la celebración de este 2023 ante un auditorio abarrotado, el Teatro municipal, en el que resonaron con fuerza palabras que nacen de la espiritualidad pero van más allá: “Este mundo donde las guerras siguen llevándose muchas vidas inocentes, donde existe el hambre, la desnutrición, el maltrato y la violencia, necesitamos un cambio”.

Para la religiosa, “mirar la cruz nos permite mirar al mundo de una forma diferente, nos cuestiona, nos apremia, nos muestra un camino; es una oportunidad, ocasión para amar y cuidar. Es el Papa Francisco quien nos invita a recrear en nuestra vida cotidiana la cultura del cuidado -recordó Pilar Omella-. Al ser palpable la vulnerabilidad de todos, ricos y pobres, jóvenes y ancianos, hombres y mujeres; aparece en toda su dimensión la necesidad de cuidarme, de cuidarnos y de cuidarlos, convertimos así el cuidado en una acción de primera necesidad”, en palabras de la religiosa.

El pregón de la hermana Omella habló de la Semana Santa como una conmemoración pedagógica, “una guía que resume cuáles son las cosas importantes que hay que tratar de recordar a lo largo de toda la vida. Y lo va haciendo de tal forma -refirió- que podamos ir viviendo cada acontecimiento como algo nuevo que tenemos que aplicar en la vida cotidiana. Es el momento en el que convergen muchas historias de amor”, resumió la religiosa al respecto de las vidas de Jesús, de sus apóstoles y de las personas que acompañan el caminar de Cristo. Hombres, y mujeres. “Debemos dejarnos seducir por el amor, que pasa por conocer, por apostar y comprometerse”, dijo.

Recuerdos de juventud

El alcalde de Alcañiz, Ignacio Urquizu, reivindicó la oportunidad que supone la presencia de Pilar Omella, “una pregonera excepcional”.

“Pilar nació hace casi 65 años en Alcañiz y su infancia se desarrolló en el barrio de Santiago. Deportista desde muy joven, recorría nuestra ciudad ya fuera corriendo, jugando al baloncesto o pescando. Amante de la naturaleza, en lo que seguro algo tuvo que ver su pertenencia al grupo Scout de Alcañiz, su formación académica es excelente”, señaló Urquizu sobre esta diplomada en Ciencias Sociales y en Educación Física, licenciada en Geografía por la Universidad de Sevilla que también tiene estudios en Teología y en formación religiosa.

Y lo que tiene también Omella son recuerdos de su Alcañiz en estas fechas. “La Semana Santa es expresión de la fe popular, y esa fe se manifiesta por fuera y se vive desde dentro”, precisó.

“Los alcañizanos salimos a la calle y a ritmo de tambor se marcan camino los pasos a pesar del frío y hasta de otras incomodidades. Así lo recuerdo y guardo en mi memoria -desveló- al no importarme esperar con paciencia el recorrido de los pasos, porque para celebrar hay que estar, haga frío, viento o calor, se esté o no incomodo”.

Urquizu detalló la importancia de que el pregón sea la primera muestra de la categoría de la Semana Santa alcañizana, que “las instituciones trabajamos en preservar y visibilizar más allá de nuestro territorio”.

“Creo que eres un lujo para Alcañiz, querida Pilar. Hoy por la mañana, cuando le decía a mis padres que eras la pregonera, enseguida supieron situarte y todo fueron bonitas palabras. Eso es un ejemplo de la huella que has dejado en Alcañiz”, dijo.

A partir de ahí, “queremos que los demás conozcan cómo vivimos la semana de la pasión de Cristo, a la altura de las mejores de nuestro país, como son las de Sevilla, Málaga o Valladolid”, afirmó el alcalde de Alcañiz. “Recibimos visitantes de toda España y todos vienen atraídos por el estruendo de nuestros tambores, una población única en la Ruta del Tambor y el Bombo. Somos los únicos que vestimos de azul, los únicos que no tocamos el bombo y los únicos que no rompemos la hora. Por eso, la Semana Santa de Alcañiz es única y una de las más antiguas”, dijo.

Único y original fue también el pregón de Omella, que dividió su discurso según los días de la Semana Santa, atribuyendo a cada uno de ellos un personaje, un protagonista principal de la pasión y muerte de Jesús, junto con conceptos clave: cuidado, encuentro, oración, silencio, tambor…

“Todo lo dicho hasta aquí es una invitación a celebrar la vida, que de eso se trata, en este acontecimiento que comienza, en la Semana Santa, Semana Santa Alcañizana”, finalizó la hermana Pilar, la alcañizana que hizo misión desde Sevilla: “Celebraciones que no son para pensar en, son para estar con, desde el deseo de hacer algo por otro -y otros- en los que podemos descubrir lo que falta a este mundo, sensibilidad, esperanza y cuidado”.

El alcalde y el resto de la corporación, junto con los representantes de la cofradía, posan con la pregonera, Pilar Omella, en el ayuntamiento. T. S.

Mención especial a la importancia de la educación en la recepción municipal

La importancia de la educación fue objeto de una mención especial en la recepción del Ayuntamiento a la pregonera de la Semana Santa de Alcañiz, Pilar Omella.

Con la presencia del alcalde, Ignacio Urquizu, los portavoces y concejales de los grupos políticos de la corporación municipal, y los representantes de las cofradías alcañizanas, el Ayuntamiento de Alcañiz acogió este acto institucional previo al propio pregón.

“Se educan personas, se educan familias, se educan pueblos, y se educan países”, resumió Omella, reivindicando lo imprescindible de la formación, en conocimiento y en valores.

“Entramos en los días más importantes del año”, confirmó el alcalde Urquizu, aludiendo a la relevancia de la Semana Santa.

Reivindicó la figura de la pregonera de este año, una mujer religiosa que releva al del año pasado, un hombre laico, el cineasta Rodrigo Cortés. “Agradezco muchísimo que se pusiera en contacto conmigo el área de Cultura del Ayuntamiento”, señaló Pilar Omella. “No puedo profundizar en imaginería. Pero sí puedo hablar de la espiritualidad de la Semana Santa”, dijo.

En el Libro de Honor queda constancia de la presencia y la bendición de Pilar Omella, alcañizana que durante tres décadas terminó por encabezar la actividad de las hermanas de Santa Ana en Sevilla. Ha estado en La India en las últimas semanas, y acaba de llegar precisamente para el pregón de la Semana Santa de este año. Durante 37 años Omella ha entregado su vida como Hermana de la Caridad de Santa Ana. Pero, por encima de ello, como señaló el alcalde de Alcañiz, Pilar Omella “es una persona que ama la educación, la naturaleza, el arte, la creatividad… Y tiene una fuerte vocación social, le gusta soñar con todo lo que nos ofrece este mundo. Desde luego que todo un conjunto de virtudes que hacen de ella una persona excepcional”.
Urquizu reivindicó el aspecto histórico de la Semana Santa, “la historia de una ciudad que mira a su pasado con orgullo y siente como suya la herencia recibida por nuestros antepasados”, expresamente en su pregón.

“Pero nuestra Semana Santa también es antropología y sociología -añadió-. Es el momento de reencontrarnos con nosotros mismos y con nuestros familiares y amigos. En el silencio de nuestras procesiones o en el estruendo de los tambores, son muchos los que miran en su interior, intentando encontrarse consigo mismos, con los demás o con la misma pasión de Cristo. Porque nunca podemos olvidar que por encima de todo, la Semana Santa es religión y es cristianismo”, iniciado ya el domingo con las palmas del Domingo de Ramos, y que entra a partir de ahora en sus días centrales.