Los calandinos honran a su patrona ofreciéndole decenas de ramos de claveles
Buen ambiente y mejor tiempo en la Ofrenda de flores a la Virgen del PilarLa Pilarica no se quedó sin homenaje, como no podía ser de otra manera, ayer por la mañana en Calanda, que vive sus días de Fiestas patronales por todo lo alto y que ayer registró un lleno absoluto en la plaza de España para honrar a su patrona.
Decenas de calandinos de todas las edades, algunos en pareja y otros muchos en familia, honraron a la Virgen del Pilar depositando decenas de ramos de flores, claveles que vistieron el manto de la imagen (este año de blanco y con cruz roja) y que quedaron depositados a los pies de la Virgen.
La localidad bajoaragonesa vivió un jueves de fiesta intenso, después de que el miércoles arrancaran oficialmente unos festejos que se prolongarán hasta el próximo domingo. Muchos calandinos acudieron vestidos de calle para depositar los ramos de claveles en la ofrenda floral, pero también otros muchos lo hicieron ataviados con el traje regional.
La mañana acompañó, con un sol espléndido y muchas ganas de rendir tributo a la patrona de calandinos, que llegan hoy viernes al ecuador de sus Fiestas patronales.
Aunq
ue todo esta
ba preparado en la plaza de Calanda desde primera hora de la mañana, fue a partir de las 11.30 cuando empezó a verse mucho más movimiento de gente. A partir de esa hora y hasta las dos de la tarde, los voluntarios que se encargan de recoger los ramos de claveles y de cortar el tallo a las flores trabajaron intensamente para que todos los que quisieran pudieran fotografiarse junto a la imagen de la Virgen del Pilar y se fuera conformando el manto que ha vestido este año 2023 a la Virgen del Pilar.
En cualquier caso, cuando más público se concentró en la plaza fue a partir de las doce y media. No en vano, este punto horario coincidió con la salida de la iglesia de los feligreses, que acudieron puntuales a la Ofrenda que se estaba desarrollando en la plaza desde hacía una hora.
Amenizó la jornada el grupo de jota y la rondalla de la Asociación El Cachirulo, que no falla ningún año en Calanda y acompaña a los vecinos en este acto tan especial.
