Los chopos cabeceros toman Estercuel en su XV fiesta anual con éxito de participación
Miguel Ángel Lázaro fue distinguido como Amigo del Chopo Cabecero 2025La naturaleza, la tradición y el paisaje cultural se unieron este fin de semana en Estercuel durante la XV Fiesta del Chopo Cabecero, una cita que congregó a decenas de participantes en torno a este emblema del medio rural turolense. El evento, impulsado por el Ayuntamiento de Estercuel y el Centro de Estudios del Jiloca, contó con la colaboración de la Comarca Andorra-Sierra de Arcos, el Centro de Estudios Locales de Andorra, el Parque Cultural del Maestrazgo y el Monasterio del Olivar. Bajo el lema “Hacia una gestión forestal”, la celebración puso de relieve la importancia de conservar y transmitir las prácticas tradicionales que han dado forma al paisaje ribereño de la provincia de Teruel.
La jornada comenzó a las 9:40 horas en la plaza del Ayuntamiento, con la recepción de los participantes, que iniciaron a continuación una excursión guiada por la ribera del río Estercuel, siguiendo el sendero PR-TE 93. Durante el recorrido, los asistentes pudieron contemplar más de un centenar de chopos cabeceros en excelente estado de conservación y conocer distintos aspectos del paisaje cultural que rodea estas arboledas. La caminata incluyó una parada en el Caseto del Plano, donde se visitaron las catarras, un singular sistema hidráulico tradicional del municipio. A media mañana, tuvo lugar uno de los momentos más esperados: la demostración de escamonda, realizada por el motosierrista Herminio Santafé, quien mostró con destreza la técnica ancestral que da al chopo su característico porte. La actividad permitió comprender de cerca cómo estas prácticas han contribuido durante generaciones a mantener viva esta especie tan emblemática. Tras la escamonda, los asistentes visitaron el Centro de Interpretación del Fuego y de la Fiesta y el Museo del Aceite, donde se presentó la exposición temporal “El Chopo Cabecero, un patrimonio para el desarrollo rural”. Además, se celebró el fallo del X Concurso de Fotografía sobre el Chopo Cabecero, que premió las mejores imágenes relacionadas con este patrimonio natural y cultural. La comida popular, organizada en el pabellón municipal, reunió a numerosos participantes inscritos previamente, mientras que por la tarde la plaza de la Fuente acogió el concierto del grupo Deluxe Rock Band, que puso el broche musical a una jornada marcada por la convivencia y el amor por la naturaleza.
Pilar Sarto, miembro destacado de la organización, explicó que la elección de Estercuel se debió a su gran chopera y a la importante labor de conservación que se realiza en la zona. Señaló que el objetivo es dar a conocer distintos pueblos y bosques de chopos cabeceros, “para que la gente los sepa querer, los aproveche y valore el patrimonio natural de la zona”. Además, añadió que lo que se pretende con esta iniciativa es seguir impulsando acciones que permitan que la fiesta se mantenga en el tiempo y “que se ponga en valor”. Por último, detalló que la jornada incluye un recorrido con diferentes paradas explicativas y una comida de convivencia antes de la entrega del premio, indicando que “en eso consiste esta fiesta”. Por su parte, Ángel Sancho, de la Asociación de Jóvenes Estercuelanos y natural del municipio, destacó la utilidad de los chopos a lo largo de la historia local y su importancia en la economía del pueblo, subrayando que “forman parte de la economía circular y de su aprovechamiento tradicional”.
Galardón
Dentro de la programación de actividades, se llevó a cabo un emotivo homenaje a Miguel Ángel Lázaro Palacios, distinguido con el título de Amigo del Chopo Cabecero 2025. Visiblemente emocionado, Lázaro expresó su agradecimiento por este galardón, asegurando que “es todo un orgullo que hayan pensado en mí. Aún sigo encajando el reconocimiento y con muchos nervios en el cuerpo, pero muy feliz. Es un día muy importante: reconocen tu trabajo y es un agradecimiento enorme. Estoy contento, agradecido de que hayan pensado en mí, y esto significa que se valora una labor importantísima”. El reconocimiento puso en valor su destacada trayectoria como ingeniero de montes y motosierrista, así como su compromiso constante con la conservación y mantenimiento de los chopos cabeceros, un elemento esencial del paisaje cultural y natural de la comarca. El galardón subrayó la relevancia de su labor en la preservación de un patrimonio vivo que forma parte de la identidad de Estercuel y de toda la provincia de Teruel, recordando la importancia de las personas que, con su esfuerzo y dedicación, mantienen viva esta tradición. Desde el Centro de Estudios del Jiloca y el Centro de Estudios Locales de Andorra, destacaron el valor de su aportación: “El premio se otorga entre una lista de personas que han contribuido a divulgar y proteger la riqueza de nuestro patrimonio natural. Nunca lo destinamos a cargos políticos, sino a gente que realmente lo ha trabajado. Este año era evidente que el premio debía ser para Miguel Ángel”. El homenaje a Miguel Ángel Lázaro simboliza el reconocimiento a una vida dedicada a cuidar y poner en valor los paisajes que conforman la memoria y la identidad del territorio.
