Los expertos piden coordinación rural para acceder a fondos europeos
El CIT analiza en Alcañiz cómo alinear a la provincia con el Pacto Rural EuropeoAlcañiz fue ayer uno de los centros de debate sobre el futuro de las políticas europeas para el medio rural turolense. En un contexto decisivo, señalado por el rediseño del marco financiero europeo y la reformulación del Pacto Rural Europeo, el Centro de Innovación Territorial (CIT) de Teruel organizó la jornada Visión rural de la UE: Implicaciones y beneficios para el rural de Teruel, en el edificio del Liceo de Alcañiz.
El objetivo no era menor: se pretende entender cómo funcionan las políticas comunitarias, identificar los retos para el territorio y preparar proyectos sólidos que puedan atraer financiación europea. Un ejercicio que, según los expertos y participantes, “es imprescindible” si se quiere evitar que Teruel quede al margen de los nuevos recursos que se están articulando desde Bruselas.
Sara Anés, coordinadora del CIT Teruel, subrayó que el verdadero reto para el medio rural es pasar de ser receptor a protagonista en el diseño de proyectos europeos. Según explicó, la clave está en elegir prioridades claras, coordinar a los agentes del territorio y consolidar propuestas antes de que lleguen las convocatorias. “No se trata solo de acceder a las herramientas que lanza la UE, sino de adaptarlas a nuestras necesidades y hablar con voz propia”, resumió. Anés anunció además que el CIT pondrá a disposición de toda la provincia un “kit de herramientas” con aportaciones estratégicas, que sirva de base para construir una hoja de ruta común hacia Europa.
Escuchar al territorio
La jornada fue inaugurada por la eurodiputada aragonesa Rosa Serrano, miembro de la Comisión de Desarrollo Regional del Parlamento Europeo y una de las voces que participa en el diseño del nuevo pacto rural. “Es ahora cuando se está configurando el plan financiero europeo que definirá los fondos que llegarán a los territorios hasta 2027. Queremos que se escuche a quienes viven y trabajan en el medio rural, y que se mantenga la cogobernanza con las entidades locales”, reclamó. Serrano alertó del riesgo de centralizar demasiado la gestión de fondos, ya que podría perder perspectiva local. “Un fondo de cohesión no puede convertirse en un cajón de sastre para emergencias; debe ser un instrumento que incentive la actuación en los territorios rurales y se construya desde las necesidades concretas de estos entornos”. La eurodiputada defendió que el Pacto Rural Europeo debe convertirse en una herramienta de trabajo real, con participación directa de los actores del territorio.
En esa misma línea se expresó Beatriz Martín, vicepresidenta de la Diputación de Teruel, quien defendió que, aunque ya llegan políticas y recursos como la PAC o los programas culturales, “hace falta más pedagogía” para comprender y aprovechar todo el potencial de las políticas europeas. “Jornadas como ésta ayudan a entender cómo funciona Europa y cómo podemos encajar mejor en sus estrategias”, aseguró.
El experto en políticas europeas Enrique Nieto fue el encargado de explicar los fundamentos del Pacto Rural Europeo, una iniciativa que busca revitalizar las zonas rurales europeas hasta 2040. Nieto recalcó que esta hoja de ruta está introduciendo en la agenda temas hasta ahora poco presentes, como la sanidad, la educación o la vivienda rural, y lo hace generando redes entre agentes locales para amplificar la voz de los territorios. En la segunda parte de la jornada se presentaron dos casos que la Comisión Europea considera ejemplares en la implementación del pacto rural: la Asociación de Iniciativas Rurales y Marítimas de Cataluña (ARCA) y el Consejo Comarcal del Priorat. Ambas entidades han logrado integrar con éxito la visión rural europea en sus estrategias locales, movilizando a una amplia red de actores y aprovechando los fondos europeos de forma estructurada.
El cierre de la jornada en Alcañiz incluyó una dinámica de grupo en la que los asistentes identificaron retos y oportunidades para conectar los proyectos locales con las herramientas europeas. El objetivo final: impulsar proyectos tractores y multifactoriales, capaces de generar impacto estructural.
