

Teruel Existe lleva a Azaila su protesta por la A-68 y el puente sobre el Aguasvivas
Los participantes levantan un puente de cajas como gesto simbólico ante a la lentitud de las obrasEl movimiento ciudadano Teruel Existe volvió a salir a la calle este domingo en Azaila (Bajo Martín), para reclamar la construcción de la autovía A-68, que debe desdoblar la carretera N-232 entre Zaragoza y el Bajo Aragón. La concentración, celebrada en la plaza de Aragón a partir de las diez de la mañana, reunió a vecinos y simpatizantes que quisieron mostrar su malestar por la falta de avances en un proyecto largamente demandado por la comarca.

El acto comenzó con la instalación de un puente simbólico construido con cajas, que varios participantes levantaron caracterizados como trabajadores de la época romana. La escenificación tuvo un carácter didáctico y representativo, y fue inaugurada de manera simbólica en un gesto que buscaba “subrayar cómo los romanos eran capaces de levantar construcciones con gran rapidez y, al mismo tiempo, dotarlas de una solidez que ha perdurado durante siglos”, según explicaron desde Teruel Existe. Este puente de cajas sirvió como metáfora de la capacidad constructiva del pasado frente a la lentitud de muchas de las obras actuales, y reforzó el mensaje del movimiento sobre la “inacción del Gobierno” en relación con la mejora de la carretera y la reparación del puente sobre el río Aguasvivas. Ese puente, gravemente dañado por las lluvias torrenciales del pasado 13 de junio, todavía no ha sido rehabilitado.
Los portavoces de Teruel Existe subrayaron la urgencia de actuar. Diego Moreno, portavoz del movimiento en el Bajo Aragón, señaló que “queremos darle visibilidad al problema que tenemos con este puente. Lo conveniente sería que ya estuviera hecha la A-68 y así no tendríamos los problemas actuales”. Moreno recordó que por la zona se desplazan médicos, profesores y que el tráfico es intenso. En su opinión, la construcción de la autovía mejoraría de manera significativa la circulación y facilitaría la llegada de trabajadores y la implantación de industria. “Si contáramos con una vía que facilitara la circulación, la situación mejoraría notablemente. Además, con la autovía se favorecería la implantación de industria y se facilitaría la llegada de toda la gente que viene de fuera a trabajar”, añadió.
Urgencia de la A-68
Durante la concentración se leyó el Manifiesto por la A-68, que volvía a remarcar la urgencia de que la autovía sea una realidad. En el texto se defendía que la vía es fundamental para garantizar un adecuado funcionamiento económico, social y de comunicaciones en la zona, y se reclamaba que se ejecuten de inmediato los tramos que ya cuentan con proyecto redactado: El Burgo–Fuentes de Ebro, Fuentes–Quinto, El Regallo–Alcañiz y Alcañiz–Valdealgorfa. Asimismo, se exigió que se inicie sin más dilación la redacción y construcción del tramo Quinto–El Regallo, que incluye el trazado por Azaila, considerado estratégico para la comarca.
Tomás Guitarte, portavoz del grupo parlamentario Teruel Existe en las Cortes de Aragón, explicó que la concentración respondía también al cierre parcial del puente dañado por las tormentas. En sus declaraciones, Guitarte enfatizó que la vía es clave para conectar el Bajo Aragón y criticó que desde el Ministerio se hayan anunciado arreglos sin concretar fechas. “Queremos evidenciar que se está demorando su solución, cuando se trata de una vía muy importante y eficaz para conectar el Bajo Aragón. No se puede consentir que el Bajo Aragón histórico esté desconectado del valle del Ebro durante tanto tiempo”, afirmó. Guitarte también advirtió sobre los riesgos de reformas parciales: “No queremos reformas parciales, queremos que se haga realidad la A-68: solo falta sacar los proyectos a licitación, porque ya hay tres tramos redactados. No podemos estar eternamente demandando una autovía que pone en juego incluso cosas como Motorland, debido a las dificultades de accesibilidad”, remarcó.
Joaquín Moreno, alcalde de Utrillas y diputado autonómico, puso el acento en la trascendencia histórica y social de la autovía. Según Moreno, esta infraestructura es “la más importante con la que puede contar todo el Aragón histórico”. Subrayó que, a pesar de los anuncios de avances, la realidad es que “no vemos ninguno”, y recordó que el desdoblamiento de la carretera constituye una necesidad básica para evitar accidentes y muertes que desgraciadamente se siguen produciendo mes tras mes. Añadió que este es un momento clave “para contar con un eje de prosperidad para Teruel y el Bajo Aragón”, enfatizando el impacto económico y social que tendría la ejecución de la A-68 para toda la comarca.
La concentración sirvió además para reforzar la idea de que la A-68 no es solo una infraestructura de comunicación, sino un proyecto estratégico para la comarca que puede facilitar la movilidad, la seguridad y la economía local. La metáfora del puente romano de cajas unió simbólicamente pasado y presente: mientras que en la antigüedad los constructores eran capaces de levantar obras duraderas y rápidas, en la actualidad el Bajo Aragón sigue esperando decisiones concretas que permitan mejorar las infraestructuras y la conectividad de la zona.