

Todos los animales de compañía de Andorra deberán estar registrados
Entra en vigor la ordenanza de tenencia, que obliga a incluir perfiles genéticos de perros y regula sancionesAndorra cuenta desde la pasada semana con una ordenanza reguladora de la tenencia responsable de animales de compañía. Publicada ya en el Boletín Oficial de la Provincia de Teruel (BOPTE), la norma obliga a registrar, identificar y acreditar a los animales de la localidad en un censo municipal gestionado a través del Registro de Identificación de Animales de Compañía de Aragón (RIACA).
El censo deberá incluir el perfil genético de ADN exclusivamente en el caso de los perros, aunque sin excepciones, especialmente para controlar a los peligrosos que habitualmente residan en el término municipal.
“Con esta ordenanza queremos regular todas las obligaciones de los propietarios de mascotas para evitar, en la medida de lo posible, las molestias hacia terceros y los posibles daños al patrimonio municipal que pudieran causar dichos animales, así como regular ciertos derechos a favor de las especies animales”, afirma Marco Negredo, concejal delegado de Medio Ambiente en el Ayuntamiento de Andorra.
Los animales deberán ser censados e identificados mediante un microchip en el que se recoja toda la información sobre el animal y su propietario para sancionarle en caso de que no recoja las heces, de que muerdan, estén abandonados o sean perros maltratados. La norma contempla sustituir las multas económicas por trabajos relacionados con la protección animal, en el caso de infracciones leves.
“Cada vez hay más animales de compañía en Andorra y esto constituye uno de los múltiples focos de conflicto en las relaciones vecinales, por lo que queremos evitar, en la medida de lo posible, las molestias hacia terceros y los posibles daños al patrimonio municipal que pudieran causar dichos animales, lo cual se pone de relieve con mayor facilidad en los ámbitos urbanizados”, afirma Marco Negredo.
La ordenanza complementa, a nivel municipal, las diversas disposiciones de diferente rango –en especial autonómico– que regulan los derechos y deberes ante la propiedad de animales domésticos, con el fin de que ésta se ejerza de un modo socialmente responsable.
Otro de los objetivos que pretende conseguir la normativa es lograr que las personas que poseen animales domésticos sean socialmente responsables con el resto de vecinos y vecinas. “Además de que una mascota es un ser vivo y se merece todos los cuidados, los espacios públicos constituyen el lugar donde convivimos los habitantes del pueblo y donde realizamos nuestras actividades cotidianas y recreativas, por lo que estos cuidados también deben extremarse en estos espacios recogiendo los excrementos de los perros”, concluye el concejal de Medio Ambiente.
El Ayuntamiento de Andorra tiene previsto iniciar próximamente una campaña para recordar que es obligatorio recoger las deposiciones de los animales.