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Realojados  los 28 vecinos de Alcañiz afectados por el derrumbe del pasado 6 de julio Realojados  los 28 vecinos de Alcañiz afectados por el derrumbe del pasado 6 de julio
Zona que fue desalojada

Realojados los 28 vecinos de Alcañiz afectados por el derrumbe del pasado 6 de julio

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Los 28 vecinos de Alcañiz desalojados de sus casas el 6 de julio después de que una intensa tormenta derrumbara una terraza ya han sido realojados. La Policía Local de Alcañiz desprecintó el martes los números 11 de la ronda de Belchite y el 20 de la plaza del Deán, esta última comunidad afectante ya apuntalada.

El informe del arquitecto contratado por la propiedad causante ha determinado, tras los trabajos de limpieza y apuntalado, que el edificio de la plaza del Deán cuyo patio interior se comunica con el de los números 9 y 11 de la ronda de Belchite no tiene daños estructurales, por lo que todos los vecinos han podido volver antes de las fiestas de Alcañiz, como se deseaba.

Los primeros en regresar fueron los ocupantes de seis viviendas en el portal 9 de la ronda de Belchite, el jueves pasado. Los vecinos de Deán 20 no pudieron hacerlo hasta el martes, pese a que la semana pasada el Ayuntamiento de Alcañiz informó de lo contrario.

Por una cuestión de falta de entendimiento entre comunidades sobre la que el consistorio no ha abundado, los últimos vecinos en volver tuvieron que esperar a que la empresa contratada para el desescombro finalizara las tareas en los patios interiores de sus casas. Para ello fue necesario recurrir a una grúa.

Durante los dos meses que han estado fuera, la mayoría ha podido acomodarse en segundas residencias o viviendas de familiares, aunque el consistorio ha asumido los gastos de hasta cinco personas en un hostal.

El desescombro comenzó el 12 de agosto. Desde el 6 de julio, el gobierno municipal ha mantenido encuentros en los que se ha ido actualizando información a los vecinos, según informó el ayuntamiento.

Ha estado vigente asimismo un protocolo de acompañamiento de Servicios Sociales y de Protección Civil, Policía Local y Bomberos, para que las familias pudieran volver puntualmente en busca de enseres o medicinas.

Este derribo fue una de las consecuencias más destacadas de la tormenta del 6 de julio, que descargó 46 litros por metro cuadrado en apenas un cuarto de hora sobre las cinco de la tarde.