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Cruz Aguilar

Me gusta hacer sumas y restas para analizar los posibles pactos electorales que salen en la provincia a todos los niveles. El escenario en Teruel es favorable para el Partido Popular, con gran peso en la Diputación y en las comarcas. Sin embargo, para lograr conquistar el mayor número de instituciones no le sirve ceder delegaciones a un único partido. En el entramado de fuerzas políticas salidas del 28M se desinflaron las izquierdas y también el PAR restó empuje en todas las comarcas, salvo en la de la Sierra de Albarracín, aunque sigue siendo la llave maestra en esta institución y en la de Gúdar-Javalambre.

Teruel Existe irrumpe con fuerza y se convierte en eje en Cuencas Mineras y Maestrazgo. La suma de Teruel Existe con el PAR daría la mayoría absoluta tanto al Partido Popular como al Partido Socialista en todas las comarcas salvo en Matarraña, donde el PP tiene ya más de la mitad de los escaños, y Bajo Martín, con Ganar-IU como clavico del abanico.

Ahora la cuestión está en con quién querrá pactar Teruel Existe, si con el PP garantizándose tocar poder en el Gobierno de Aragón, o con el PSOE de cara a mantener a los votantes con ideas de izquierdas el 23J. En la balanza de las negociaciones hay cuestiones de peso, como el viento, que le ha generado una buena cartera de votos a los de Guitarte, y también afinidades y antipatías que son fundamentales a la hora de hilvanar acuerdos.

En la Diputación de Teruel el PP puede elegir entre el PAR, un socio cómodo pero que en las últimas legislaturas se inclinó por el PSOE, o TE. La clave estará en el rosario de pactos que se materialicen fuera de esta institución o tal vez sea la Diputación, y el interés que despierta en la formación territorial, la reina del tablero.

En el Gobierno de Aragón, Azcón es ganador indiscutible, pero el anuncio de las nacionales para julio llena de piedras la negociación. Con la extrema derecha suma sobradamente, pero solo en lo regional. Cuenta con la baza de que los de Vox jamás inclinarán la balanza hacia la izquierda. La aritmética aquí es más enrevesada. La dejo para la siguiente columna, si aún tiene cabida elucubrar.