La teleasistencia de la DPT avanza del analógico al digital y móvil, para ofrecer más servicios y seguridad a las personas usuarias
El servicio se presta a 1.765 personas en la provincia de TeruelLa Diputación Provincial de Teruel ofrece a las personas usuarias de teleasistencia nuevos dispositivos, digitales y móviles, que se suman a los analógicos ya existentes para ofrecer un mayor y mejor servicio. La diputada delegada del área de Bienestar Social, Beatriz Redón, ha presentado este viernes las novedades en el centro de personas mayores Calamocha – Jiloca, junto a la Junta del Hogar de Personas Mayores de Calamocha, ha informado la DPT en una nota de prensa.
A finales de 2024 entró en vigor el nuevo contrato de terminales de teleasistencia para las personas usuarias de la provincia de Teruel, que estará en vigor durante 24 meses (adjudicado por 512.385,12 euros, desde octubre de 2024 a septiembre de 2026). Como novedad, la entidad concesionaria deberá facilitar dispositivos tanto analógicos como digitales y móviles, en función de las necesidades establecidas para cada persona y que permiten mayor funcionalidad para garantizar su seguridad y una mayor independencia.
Desde el servicio de Bienestar Social se está prestando este servicio en la provincia de Teruel a un total de 1.765 personas usuarias, de las cuales hay 1.263 mujeres y 502 hombres.
Redón ha explicado que van a presentar las novedades por distintas localidades de la provincia. “Desde el servicio de Bienestar Social de DPT tenemos claro que la teleasistencia es un servicio básico para que las personas puedan permanecer en sus domicilios de forma segura, que tengan la garantía de que, en caso de necesitarlo, únicamente pulsando un botón van a tener la ayuda que precisen. Y por eso hemos apostado por mejorar la calidad de este servicio", ha comentado la diputada.
"Además de los dispositivos tradicionales vamos a contar con relojes digitales, con sensores de movimiento, con sensores de colchón o de nevera... para favorecer que las personas que lo precisan, mayores o en situación de dependencia que lo puedan necesitar, cuentan con un servicio que garantice que en caso de necesidad (por una caída, un incendio, una situación sobrevenida...) van a contar con la ayuda necesaria. Esto favorece que puedan permanecer en su entorno durante más tiempo. Y vamos a intentar explicar las novedades de este servicio en diferentes poblaciones de la provincia. Por eso esta tarde en Calamocha vamos a enseñarles a que puedan manipular los diferentes sistemas de teleasistencia con los que vamos a mejorar este servicio”, ha detallado Redón.
Tipos y nuevos usos de los dispositivos
La tipología de dispositivos a disposición de los usuarios se ha ampliado con el nuevo contrato. Así, es posible solicitar Terminales Digitales o GSM, que son aquellos que llevan una tarjeta SIM de roamming en su interior (con acceso a cobertura de todas las compañías) por lo que no es necesario conectarlos a ninguna línea fija.
Asimismo, se puede solicitar la Teleasistencia móvil o reloj digital, que se utilizan en usuarios con deterioro cognitivo que puedan salir del domicilio sin permiso o atención, o para usuarios con enfermedades de alto riesgo que sí que se desplazan fuera del domicilio. Tienen funciones de contado de pasos y pulsómetro, son resistentes al agua y tienen un sistema de geolocalización con posibilidad de instalar perímetros. No detectan caídas, la llamada se hace pulsando.
Por otro lado, en las casas es posible instalar un sensor de humo, adaptado para alertar de la presencia de humo o monóxido de carbono e instalado en los techos de cocinas o salones con estufas de leña, para evitar fuegos o ahogos con humos.
Otra opción es el sensor de movimiento o presencia, que se utiliza para comprobar si la persona usuaria está presente en el domicilio. Se pone en la zona de paso de cocinas o baños, con el objetivo de detectar si existe movimiento en el hogar. En caso de no producirse paso de persona en 24 horas, el sensor avisa de que algo está pasando.
También existe el sensor de nevera o colchón, que, al igual que el sensor de movimiento o presencia, detecta la actividad del abonado. El sensor de nevera se pone en el frigorífico para detectar si en 24 horas se abre o, por el contrario, no hay actividad. El del colchón funciona al revés: detecta la presión y si existe presión durante más de 24 horas seguidas, avisa indicando que algo no funciona correctamente.
Otro de los dispositivos es el sensor de gas, que detecta si existen fugas o escapes de gas butano o gas natural. En el caso del gas butano, el sensor se coloca en el suelo al lado del butano, ya que el gas butano pesa más que el aire. En cuanto al gas natural, el sensor se suele poner en el techo de las casas, ya que el gas natural pesa menos que el aire.
En la actualidad, la Diputación de Teruel cuenta con 167 terminales sin línea fija, ocho terminales de teleasistencia móvil (relojes), ocho sensores de gas, nueve sensores de humo y nueve sensores de presencia / movimiento.
