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Lugnastar cierra su sexta edición  con la peregrinación anual a Peñalba Lugnastar cierra su sexta edición  con la peregrinación anual a Peñalba
Vista de la vega del Turia, durante la ascensión a la Montaña Escrita de Peñalba

Lugnastar cierra su sexta edición con la peregrinación anual a Peñalba

Los participantes visitaron las rocas escritas hace unos dos mil años
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La peregrinación anual al Santuario natural de Peñalba, en Villastar, y una comida popular, pusieron fin a una nueva edición del Festival de la Cultura Celta Lugnastar de la localidad. Cerca de ochenta personas participaron en el ascenso a la Montaña Escrita a la que se rinde tributo cada año en Lugnastar, en la que Jesús Martín, presidente de la asociación cultural Santuario Celtíbero de la Montaña Escrita de Peñalba explicó todos los entresijos del yacimiento.
 

Algunos de los excursionistas con parte del farallón donde se encuentran algunas de las inscripciones celtibéricas

El santuario de la Montaña Escrita es un paraje natural considerado como el único lugar de culto celtibérico al aire libre que se conoce en la península Ibérica hasta la fecha. Se extiende a lo largo de una formación rocosa de unos tres kilómetros que corona una muela rocosa que domina la cuenca del Turia. El conjunto está formado por numerosos grabados rupestres: cazoletas, canalillos de posible función ritual, figuras geométricas, humanas, animales y, sobre todo, una treintena de inscripciones en alfabeto latino que transcriben lenguas celtibérica, ibérica y latina.

La importancia científica del lugar reside en tres puntos: por un lado es único y por tanto referente en la península Ibérica; por el otro contiene una de las colecciones más importantes de inscripciones celtibéricas de carácter religioso que, entre otras cosas, reflejan la coexistencia de lenguas y alfabetos celtibérico, ibérico y latín, que permearon entre ellos; y por último algunas de las inscripciones y restos materiales hallados han permitido profundizar en la investigación sobre las culturas celtibéricas, por la vía de que no cabe pensar en un mundo ibérico y en un mundo celtibérico estancos y unificados, sino más bien de una serie de culturas prerromanas que acrisolaron la península Ibérica, con numerosos elementos propios y comunes.
 

Imagen de la comitiva emprendiendo el ascenso a la muela rocosa

En la actualidad, el Santuario de Peñalba es objeto de un renovado interés científico. Un equipo del Departamento de Historia Antigua de la Universidad de Zaragoza ha puesto en marcha una investigación integral y bianual sobre el conjunto, en colaboración con el grupo de investigación Hiberus y el equipo Titulus (Culturas escritas y epigráficas de la Antigüedad).

Además de por equipos científicos, el lugar ha sido visitado por algunos de los principales expertos en cultural celtas, como el gaitero e investigador Carlos Núñez. Entre los que ayer acompañaron a la comitiva se encontraba el grupo madrileño de música celta Talisker Band, que habían actuado en Villastar la previa del sábado y no quisieron perderse la ocasión de visitar uno de los centros religiosos más importantes del mundo celtíbero.
 

Miembros de Talisker Band, que actuaron el sábado en Lugnastar, y que también participaron en la peregrinación

La compañía de teatro Proyecto Caravana ofreció su espectáculo Historias titiriteras tras la peregrinación al yacimiento, que se realizó a lo largo de toda la mañana. Y una comida popular cerró la celebración de la sexta edición de Lugnastar, un festival que ha sido organizado con la colaboración de la asociación cultural Bell-Stare, la Diputación Provincial, la Comarca Comunidad de Teruel y el Ayuntamiento de Villastar.