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San Agustín reinaugura el horno de Los Baltasares cociendo pan y pastas San Agustín reinaugura el horno de Los Baltasares cociendo pan y pastas
Dos de los participantes en la actividad colocando sobre la pala del horno los ragañaos para cocerlos

San Agustín reinaugura el horno de Los Baltasares cociendo pan y pastas

Se ha actuado en la estructura del edificio, así como en la bóveda y chimenea
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El municipio de San Agustín reinaugura el horno de leña del barrio de Los Baltasares con una jornada de convivencia vecinal protagonizada por el propio horno, donde se cocieron pan y pastas. El acontecimiento se enmarca en la apuesta del consistorio por preservar las tradiciones locales. La rehabilitación de este espacio, que es un punto de encuentro para vecinos y visitantes, se ha hecho con fondos municipales.

El horno de Los Baltasares ha sido testigo de innumerables momentos de la vida comunitaria a lo largo de los años, según explica el alcalde, Dani Riera. Allí se ha cocido el pan tradicional y se han preparado platos típicos, pero también ha sido un símbolo de la identidad local y un lugar donde se compartían historias, recetas y risas, destacó el regidor municipal. Sin embargo, con el paso del tiempo, el horno había caído en desuso, amenazando con perderse una parte invaluable de la herencia cultural de la zona.

Gran simbolismo

Con el firme compromiso de preservar esta tradición única, el Ayuntamiento de San Agustín se embarcó en el proyecto de rehabilitación, y se llevó a cabo una meticulosa labor de renovación que devolvió al horno su esplendor original. La restauración del edificio incluyó desde la reparación de la estructura, de la bóveda, y la reparación de la chimenea y el tejado.

Durante la reinauguración, el alcalde destacó el valor simbólico del horno como un lugar de encuentro intergeneracional, donde las historias del pasado se entrelazan con el futuro. “Este horno es mucho más que piedras y cemento”, declaró, para añadir que se trata de “un símbolo de nuestra historia compartida, un recordatorio de quiénes somos y de dónde venimos”, argumentó el primer edil.

Para celebrar la recuperación del espacio, se organizó un almuerzo y una comida popular, a los que asistieron alrededor de 80 personas. Entre risas y conversaciones animadas, los asistentes compartieron regañaos, tortas, embutidos, magdalenas y roscas de anís, cocinados en el recién restaurado horno, disfrutando de la calidez de la compañía y el sabor de la autenticidad.

El Ayuntamiento se compromete a seguir trabajando en la salvaguarda de otros aspectos importantes de la cultura y el patrimonio municipal. En un mundo cada vez más globalizado, estas iniciativas son esenciales para mantener viva la rica historia y el tejido social de nuestros pueblos.

Antiguamente cada barrio de San Agustín tenía su horno y trabajaba a pleno rendimiento de manera comunal, en los próximos meses se restaurará también el del barrio del Pozo La Muela.

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