Tronchón corta el suministro de agua a las masías para garantizar el abastecimiento al pueblo
El manantial es insuficiente para la demanda ganadera
Tronchón cortó ayer el suministro de agua a las masías para así garantizar el agua de boca a los residentes en el casco urbano. La decisión responde a la elevada demanda que había desde las explotaciones agrarias, donde hay en torno a 600 vacas que, unidas al resto de ganado ovino, consumen una gran cantidad de agua, a la vez que muchas de las fuentes que tienen los masoveros en sus terrenos se han secado por la falta de lluvia y nieve.
El alcalde, Roberto Rabaza, explicó que el manantial que abastece al pueblo, situado en el nacimiento del Río Palomita, a 1.600 metros de altitud, no está mermado, pero indicó que la sequía ha dejado sin agua los pozos de las propias masías y por eso la demanda este año es mucho mayor a la de los anteriores. De los 70.000 litros de agua que llegan al depósito, más de la mitad, en torno a 45.000 iban a parar estos últimos días a las masías.
Otros veranos las explotaciones ganaderas y las masías de Tronchón se abastecían de sus propios manantiales, muchos ahora secos.
