Edurne Caballero y Ana Santidrián, Biela y Tierra, presentan ‘Orgullo Rural’
El volumen recupera un viaje de dos meses en bicicleta por la provinciaEdurne Caballero y Ana Santidrían, protagonistas del tándem Biela y Tierra, presentaron este martes su último trabajo Orgullo Rural en el que se narra una aventura de más 800 kilómetros en el que han recorrido buena parte de la provincia de Teruel. El trabajo, publicado por la editorial Pollen y el Instituto de Estudios Turolenses (IET), recupera el segundo viaje de etas dos amigas por la provincia. Tras su primera incursión por la comarca del Matarraña, las dos ciclistas se dieron “cuenta de que Teruel esconde unos tesoros que creemos que son desconocidos y que tienen que ser reconocidos y valorados como se merece y por eso la segunda ruta la hicimos específica de Teruel”, relató Santidrián momentos antes de la presentación.
Tras la primera aventura en tierras turolenses, las conclusiones de este segundo viaje no dejaron lugar a dudas sobre el título del libro. “Una de las cosas que nos encontramos y que vimos más claras las dos, además lo vimos por separado y luego lo compartimos, es que Teruel entraña mucho orgullo. Hay mucha gente muy orgullosa de su territorio, consciente de las dificultades, pero también consciente de la riqueza, el potencial y la fuerza que tiene el territorio”, explicó Caballero.
La directora del IET, Inmaculada Plaza, destacó de este trabajo que “edurne y Ana nos han propuesto un viaje que para ellas ha sido una aventura” y recalcó que la edición de Orgullo Rural ha supuesto el desembargo de la institución en la “ecoedición”.
La responsable de Pollen Edicions, Mar Carrera, calificó de “placer” el “poder publicar a estas autoras que son no solo una muestra de su fuerza de voluntad, de su curiosidad inmensa, sino de esa parte teórica, sobre soberanía narrativa, sobre la soberanía alimentaria y muy aplicado a cada territorio que ellas visitan”.
Preguntadas al mismo tiempo sobre si la provincia de Teruel es un territorio idóneo para la práctica del ciclismo, tanto deportivo como de viaje, las dos cicloviajeras respondieron al unísono un “¡indiscutiblemente!”.
“Indiscutiblemente, es de las mejores provincias para la bici. Y da igual la bici que sea, porque puedes hacer bici más mountain bike, puedes hacer gravel, puedes hacer bici de carretera”, celebró Ana Santidrián, a lo que su compañera de aventuras añadió que “a mí me gusta el asfalto, y hay un montón de carreteras secundarias muy poco transitadas que son una delicia” y destacó cómo “cambian los paisajes. Una de las cosas que nos llevamos fue ese orgullo rural del paisaje ¡Buah! Es que unos paisajes y una naturaleza prodigiosa”, concluyó.
En los dos meses que estuvieron pedaleando visitaron 63 proyectos en la provincia, con iniciativas de “ganadería extensiva de vacuno, de ovino, de caprino, transformación, fuimos a ver quesos, fuimos a ver gente que también producía carne, mermeladas, horticultura, cereal, cosas de dinamización, también tocamos la problemática y el impacto de las energías renovables, arte y cultura o educación”, resumió Caballero.
Para pasar estos dos meses las ciclistas viajan cada una “con cuatro alforjas y en las alforjas llevamos todo lo necesario para ser autosuficientes. Llevamos el camping gas para cocinar, la comida, los materiales para grabar, botiquín, llevamos la tienda de campaña, llevamos los ordenadores, llevamos todo”, recordó Santidrián, que añadió que en numerosas ocasiones las responsables de las iniciativas que visitaban les dieron alojamiento.
