Las actrices Rosa Merás (izda.) y Marta Bódalo en plena bronca, durante una representación de la comedia. Alba Pasamontes
El conflicto intergeneracional medido en blancas, negras y corcheas
El Marín acoge este sábado a las 20.00 horas la comedia musical ‘A que voy yo y lo encuentro’
La música mueve el mundo y lo lleva describiendo desde que se empezó a guardar algún tipo de registro de esta, en el medievo, y posiblemente aún antes. Al mismo tiempo es un campo de batalla en el que se reflejan todas las antítesis entre generación y generación. Lo que separó a barrocos de clasicistas, y a estos de los románticos, es lo mismo por lo que porfían los amantes del punk, del pop latino o del trap. ¿Por qué Libre de Nino Bravo, Soy rebelde de Jeanette, Necesito respirar de Medina Azahara o Estando contigo de Conchita Bautista son capaces de despertar los recuerdos más felices de millones de personas, y al mismo tiempo irritar y poner de los nervios a otros tantos?
Esa es la tesis de A que voy yo y lo encuentro, la comedia de mujeres, sobre mujeres y para todos los públicos que Territorio Violeta y Producciones Circulares llevan al Teatro Marín de Teruel este sábado, a partir de las 20 horas.
Ángela es una anciana que vive en una residencia cuya vida se va a apagando al mismo tiempo que su memoria. Amparo, quien fue su cuidadora y confidente, rebusca entre sus viejos discos de vinilo con la intención de crear una lista de música en una plataforma digital con los temas que han marcado la vida de la anciana, y la esperanza de que estos rescaten muchos de los recuerdos que comienzan a enfangarse en su agotado cerebro. Coincidirá en casa de Ángela con Alba, la hija de esta, que lleva años sin hablarse con su madre y que es una música de éxito en el género indie, moviéndose como pez en el agua en los festivales y circuitos internacionales más prestigiosos.
Para Alba la banda sonora de la vida de su madre no tiene mayor valor musical que la sintonía del NO-DO, y el hecho de que tanta gente los considere grandes éxitos de la música no hace sino dejar claro la escasa cultura musical y en nulo criterio de la sociedad española. Una sociedad main stream que se deja llevar por el marketing de lo facilón.
Pero Amparo tratará de hacerle ver que no es tan diferente a su madre, y entre las dos conseguirán hacer entender al público que madres, hijas, padres e hijos somos exactamente iguales, cargados de defectos y algunas virtudes que no dejan de sorprendernos nunca, con la única diferencia de haber nacido en diferentes lugares y momentos.
A través de un divertido toma y daca entre los dos personajes principales y de los continuos interludios musicales, A que voy yo y lo encuentro realiza un juego de espejos en los que todas las madres y todas las hijas tendrán la ocasión de verse reflejadas, e incluso de hacer algo al respecto.
A que voy yo y lo encuentro es una comedia que está escrita y dirigida por Ana Graciani en clave de comedia, teatro musical y tragedia, con tintes de humor absurdo y de aséptico naturalismo, interpretada por Marta Bódalo y Rosa Merás, con música en directo de Ester Fernández (voz) y Juan Miguel Valero (guitarra) y escenografía de Eleni Chaidemenaki.
Esa es la tesis de A que voy yo y lo encuentro, la comedia de mujeres, sobre mujeres y para todos los públicos que Territorio Violeta y Producciones Circulares llevan al Teatro Marín de Teruel este sábado, a partir de las 20 horas.
Ángela es una anciana que vive en una residencia cuya vida se va a apagando al mismo tiempo que su memoria. Amparo, quien fue su cuidadora y confidente, rebusca entre sus viejos discos de vinilo con la intención de crear una lista de música en una plataforma digital con los temas que han marcado la vida de la anciana, y la esperanza de que estos rescaten muchos de los recuerdos que comienzan a enfangarse en su agotado cerebro. Coincidirá en casa de Ángela con Alba, la hija de esta, que lleva años sin hablarse con su madre y que es una música de éxito en el género indie, moviéndose como pez en el agua en los festivales y circuitos internacionales más prestigiosos.
Para Alba la banda sonora de la vida de su madre no tiene mayor valor musical que la sintonía del NO-DO, y el hecho de que tanta gente los considere grandes éxitos de la música no hace sino dejar claro la escasa cultura musical y en nulo criterio de la sociedad española. Una sociedad main stream que se deja llevar por el marketing de lo facilón.
Pero Amparo tratará de hacerle ver que no es tan diferente a su madre, y entre las dos conseguirán hacer entender al público que madres, hijas, padres e hijos somos exactamente iguales, cargados de defectos y algunas virtudes que no dejan de sorprendernos nunca, con la única diferencia de haber nacido en diferentes lugares y momentos.
A través de un divertido toma y daca entre los dos personajes principales y de los continuos interludios musicales, A que voy yo y lo encuentro realiza un juego de espejos en los que todas las madres y todas las hijas tendrán la ocasión de verse reflejadas, e incluso de hacer algo al respecto.
A que voy yo y lo encuentro es una comedia que está escrita y dirigida por Ana Graciani en clave de comedia, teatro musical y tragedia, con tintes de humor absurdo y de aséptico naturalismo, interpretada por Marta Bódalo y Rosa Merás, con música en directo de Ester Fernández (voz) y Juan Miguel Valero (guitarra) y escenografía de Eleni Chaidemenaki.
