José Miguel Bellido, escritor turolense: "El reinado de Felipe II y el siglo XVI en España dan mucho juego para escribir una novela"

José Miguel Bellido es un turolense afincado en Zaragoza desde hace más de treinta años. Abogado especialista en Derecho Civil y Mercantil de profesión, la historia es una de sus grandes pasiones desde niño, pasión que finalmente a cristalizado en 1582. El privilegio de los infames (MIRA Editores), su primera novela.

Bellido lleva al lector hasta una de las épocas más trascendentales para España, finales del siglo XVI con Felipe II en el trono y la pugna religiosa en Europa en lo más álgido. El turolense funde con sabiduría la historia y la ficción para construir un relato que incide en algunos de los acontecimientos históricos que efectivamente sucedieron, dándoles una respuesta que entra en el terreno de la historia ficción, con el legítimo propósito de entretener y disfrutar con un final sorprendente e inesperado, que tiene tanto de thriller como de novela histórica y de personaje.

-¿Qué cuenta en su primera novela?
-La historia que narra 1582. El Privilegio de los Infames es difícil de conceptuar. Es como una partida de ajedrez en la que la dama intenta hacer jaque al rey. Se trata de una novela de sentimientos, de la relación de amor y odio, de afecto y despecho entre la que fue amante del rey,  Isabel Osorio, y el propio Felipe II. Se trata de un amor adolescente que deriva en un odio obsesivo y oculto de Isabel, que utiliza la religión como arma de poder para conseguir sus fines,  hacía su rey. Ese rencor es alimentado a través de los años por el resentimiento y el desprecio del monarca al hijo en común de ambos, el bastardo Pedro Osorio. Hay dos relatos principales. El primero es más evidente a lo largo de la novela y está protagonizado por el propio rey Felipe II, sus esposas y herederos. El otro es más oculto y tenebroso, y está protagonizado por Isabel, cuya trama se va desvelando conforme avanza la historia hasta converger ambos en un desenlace final sorprendente.

No olvidemos, y por ahí discurre la novela, que Felipe II sobrevive a sus cuatro esposas, Maria Manuela de Portugal, María Tudor, Isabel de Valois y Ana de Austria y que mueren todos sus descendientes varones a excepción, lógicamente, de Felipe III, Felipín en la novela. Qué les ha ocurrido a las reinas y los legítimos herederos? Suceden muchos hechos que no puedo adelantar y todo eso lo va explicando la historia. Muchos lectores coinciden en que se trata de una novela documentada, entretenida, con diálogos divertidos y, lo más importante, que su sorprendente final les ha hecho meditar.

-La novela parte de que la Bula Inter Gravissimas se redacta en febrero de 1582 para eliminar diez días, entre el 4 y el 15 de octubre, con el objeto de ocultar algo que pone en peligro la corona de Felipe II... Realmente fue el momento en el que se introdujo el calendario Gregoriano, más perfecto que el Juliano, en los países de la esfera cristiana, que eliminó 10 días porque era el desfase que existía entre ambos... ¿Este planteamiento es una licencia que te permites dentro de la ficción? ¿O plantea su posible historicidad?
-En efecto, con el cambio del calendario juliano al gregoriano, el papa Gregorio XIII para aproximar el equinoccio de primavera a la luna pascual promulgó la bula Inter Gravissimas; de forma que eliminó diez días, del 5 al 14 de octubre de 1582. ¡Esos días nunca existieron! Obviamente estamos en la ficción. Y en esos días que nunca existieron, en los que en cierto modo se solapa ese espacio temporal, se desarrolla el insólito desenlace de la novela pero que deviene, el desenlace, de hechos reales.
 

-En cualquier caso, qué fondos documentales ha consultado, o en cuáles se ha basado para escribir la novela? La fase documental suele ser lo más duro de la novela histórica... ¿ha sido su caso?
-Tengo mucha curiosidad por la historia y esa misma curiosidad hace que me documente sin apenas darme cuenta, mientras leo, observo o escucho. Más si se trata de un tema que me gusta o interesa. De forma que son varias y distintas las fuentes de documentación. Obviamente todo acompañado por el estudio y la búsqueda de datos que son las más importantes.

-¿Por qué eligió el siglo XVI, el reinado de Felipe II y ese peculiar momento en el que, desde entonces y hasta pasados más de dos siglos, en 1752, los países de la esfera inglesa no adoptaron el calendario gregoriano y, por tanto, todo lo acontecido en Europa tuvo dos fechas, según quien lo datara?
- El Siglo XVI y la vida de Felipe II dan mucho juego y creo que marcaron la historia de España. Éramos el país de Europa con más ingresos por los tesoros de América y, a su vez, uno de los más pobres. Y ello debido a que esas remesas de oro y plata se malgastaron en cubrir conflictos motivados principalmente por la unidad religiosa. Los problemas sucesorios y matrimoniales de Felipe II también marcaron la historia interna en España. Su primogénito, don Carlos, era un personaje con evidentes deficiencias físicas y psíquicas, que le gustaba perseguir a las damas y sirvientas por los corredores de palacio y despedazar animales en su Cámara de las Maravillas, y que finalmente murió en el castillo de Arévalo tras ser arrestado por su propio padre. Posteriormente, se sucedieron las muertes, siendo muy jóvenes, del resto de los herederos a la corona, Fernando, Carlos Lorenzo y Diego. Tan sólo sobrevivió el más pequeño Felipe, Felipín en la novela, que finalmente fue coronado.

Pero Felipe II también sobrevivió a sus cuatro esposas María de Portugal, María Tudor, Isabel de Valois y a su sobrina y última esposa doña Anna de Austria. Esto es, sobrevivió a sus cuatro esposas y murieron cuatro de sus cinco hijos varones y legítimos herederos al trono. Cabe preguntarse por qué Felipe II y su reinado estuvo rodeado de tantas muertes. Y como digo fue a finales de ese siglo, del XVI, cuando el papa Gregorio XIII, amigo y deudor del rey, hace desaparecer los diez días de octubre que son esenciales para el desenlace de la novela.

Desenlace

-Más allá de ese desenlace, ¿qué parte de ficción y que parte de historicismo tiene la novela? ¿Es partidario de respetar al máximo los hechos históricos reales, o le gusta ficcionar y plantear el marco histórico solo como un decorado contextualizador?
-Es difícil contestar esa pregunta. En concreto en El Privilegio de los Infames, basándome en hechos históricos reales, me he dejado llevar por una cierta imaginación hipotética, por ciertas posibilidades que, para entretenimiento del lector, pudieron haber ocurrido y acaban en un desenlace inesperado pero que, paradójicamente, como digo, por su credibilidad no deja de sorprender.

-¿Qué otros personajes reales, como Felipe II o Isabel Osorio, recreas en la novela? ¿No da cierto vértigo ponerse en el pellejo de personajes históricos muy reconocidos y hacerles actuar, hablar o reflexionar sin saber exactamente cómo pudieron llegar a ser?
-Son varios los personajes, entre otros, como hemos dicho, el enajenado príncipe Carlos. Don Juan de Austria, Jero en la novela, que fue hijo bastardo de Carlos V, al igual que su amigo, también bastardo del rey e hijo de Isabel Osorio, don Pedro Osorio. Igualmente las esposas de Felipe II y los herederos. Y otros muchos que van desfilando a lo largo de la novela.

De los personajes históricos, como dices, resulta imposible saber cuál era su verdadera personalidad. Lo que he intentado y espero haber conseguido es dar o dotar a cada uno de los personajes, también a los de ficción, de cierto temperamento o carácter a través de sus descripciones y los diálogos para que ellos mismos, cobrando vida y casi sin darse cuenta, vayan desarrollando la trama.

-¿A qué público le va a gustar su novela? ¿Aficionados a la novela histórica, al thriller, a las aventuras? ¿A quién va dirigida?
-Va dirigida a todo tipo de lectores. Aunque la trama se desarrolla en un marco histórico en concreto; la novela va de auténticos sentimientos, de los de siempre, tan humanos y actuales como el amor, el afecto, la venganza, el despecho; también mucho suspense que no puedo desvelar y acontecimientos históricos en los que se ven envueltos parte de los personajes, como la batalla de Lepanto, el sitio de Logroño o el saqueo de Amberes.  Y como no, diálogos divertidos y algo de alcoba, que siempre viene bien.