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Ramón Boter, autor de las obras que se exponen en el Museo a Cielo abierto de Cedrillas: “Como artista me tengo que formar constantemente, ver obras, visitar museos” Ramón Boter, autor de las obras que se exponen en el Museo a Cielo abierto de Cedrillas: “Como artista me tengo que formar constantemente, ver obras, visitar museos”
Ramón Boter junto a una de sus obras

Ramón Boter, autor de las obras que se exponen en el Museo a Cielo abierto de Cedrillas: “Como artista me tengo que formar constantemente, ver obras, visitar museos”

“Toda mi vida me he dedicado a la pintura, pero en los últimos quince años he hecho mucha escultura”
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Ramón Boter es un artista catalán que, como él mismo explica, viajó a Teruel por amor y encontró un nuevo hogar en esta provincia. 

El artista se inició en la pintura a los 10 años y desde entonces no ha parado. Hace quince años probó una nueva disciplina como es la escultura y, al igual que sobre el lienzo, destacó por su gran talento.

Se ha encargado de varias obras en la provincia, entre ellas dos exposiciones realizadas en el Obispado de la capital, en la Fundación Amantes y en Térvalis.

Recibió el Premio Nacional de Camel Arte de escultura y la obra galardonada se encuentra expuesta en el Parque Escultórico de Cedrillas.

Actualmente, acaba de inaugurar la exposición del Museo a cielo abierto en Cedrillas, en la que sus obras pueden verse expuestas en distintos lugares del pueblo con la intención de representar su belleza.

-¿A que edad descubrió su faceta artística?

-A los 10 u 11 años. Desde siempre ha sido mi pasión, la pintura y los animales, aunque parezca un clásico.

-Ha creado muchas obras desde que comenzó. ¿Cuál de ellas considera más importante?

-Es una pregunta muy difícil. Yo he hecho de todo, lo que más he hecho ha sido pintura y exposiciones de pintura, pero estos últimos quince años he hecho mucha escultura, incluso tengo un premio nacional de escultura que para mi es una obra muy importante. Precisamente esa obra está en Cedrillas, es un caballo situado en el Parque Escultórico. También he hecho cuadros que se vendieron a través de galerías y ya no sé ni donde están. Me siento súper orgulloso de ellos. 

-Su profesión implica mucho esfuerzo y sacrificio. ¿Cuál es la obra que más trabajo le llevó? 

-Una vez hice un cuadro que me llevó diez años, luego lo quemé. Aun así, durante la creación de este cuadro hacía otras cosas, pero de él aprendí mucho, el resultado final y lo que obtuve a través de él me aportaron mucho conocimiento. 

-De entre todas sus creaciones, ¿cuál es su favorita?

-Tengo varias, pero ahora mismo una de las que más me gusta es una escultura que está precisamente en el Museo de Teruel. Me pidieron si podía llevar alguna escultura y esta está en la escalera. Es una maternidad hecha con alambre, le tengo mucho cariño.

-Realizó la escultura del Jardín de San Pedro. ¿Qué supuso para usted este hecho?

-Me supuso mucho orgullo y agradecimiento, sobre todo eso. Primero orgullo por haberla hecho, ya que es un tipo de escultura hecha con alambre que requiere mucha paciencia y tesón. Y agradecimiento porque me la compraran y por exponerla allí. 

-¿Qué significa para usted esta obra?

-Una obra así sube la autoestima ya que permite ver la capacidad que uno tiene. Toda mi vida me he dedicado a la pintura y de repente hice una escultura que considero muy bien hecha, no es fácil. Tiene una técnica muy compleja llena de rinconcitos, las manos me quedaron como si me hubieran arañado veinte gatos. Para mí representa la autoestima y la capacidad de hacer algo así. Además, el orgullo de sentir que puedes transmitir algo y expresarlo en público e incluso que la compren.

-¿Qué sintió cuando se pusieron en contacto con usted para la realización de la exposición de Cedrillas?

-Siempre siento alegría cuando me ofrecen algo así, te da un subidón de ánimo, ya que enseguida te pones las pilas, dices: “Venga, esto es trabajo”, y te da un subidón de vitalidad. 

-¿Qué le inspiró en la creación de las obras del Museo a Cielo Abierto de Cedrillas?

-Enseguida lo tuve claro. En ese momento no tenía obras en stock y pensé que para aquello lo mejor que podía hacer por Cedrillas eran retratos del pueblo. Cogí el coche y cada día me subía a Cedrillas. 

-¿Cuánto tiempo le llevó crear todas las obras?

-La creación del total de las obras me llevó un mes más o menos.

-¿Qué pretendía representar con esas obras?

-El pueblo, creí que podría crear simpatía, sobre todo para la gente de allí. Quise representar el encanto de Cedrillas.

-La exposición es una buena forma de publicitar el pueblo y darle mayor visibilidad. ¿Acuden muchas personas a visitarla?

-Justo se ha abierto ahora, hay gente que me ha llamado pidiéndome los horarios. 

-¿Qué siente mientras está creando?

-Es una pregunta compleja, la creación es compleja. Básicamente cuando te lo tomas como profesión tienes que estar muy despierto porque tú tienes que crear estés bien, estés mal, de duelo o en una época de subidón. Es un oficio en el que no tienes horario ni jefe. La creatividad implica oficio, tiene que ir a la par con tu imaginación. Tienes que cultivar mucho oficio para crecer en imaginación. Yo como artista me tengo que formar constantemente, ver museos, ver obras, tener contacto con otros artistas. Cuando creas hay de todo, como decía mi maestro: “Un artista debe ser trabajador”, es ponerte y trabajar y trabajar.