Pinilla, campo base hasta el próximo invierno

La idea era que la base de operaciones fuera el campo municipal de Luis Milla. Es, en realidad, el terreno de juego del fútbol de toda la ciudad, en todas las categorías, masculino y femenino, también allí ha arrancado la pretemporada el filial, el CD Teruel B. Pero para los mayores, para el primer equipo que entrena Vicente Parras y que sigue preparando su reestreno liguero en Primera Federación, esta cancha de césped artificial aún no asegura las condiciones óptimas que precisa el preparador alicantino para desarrollar el potencial del grupo.

Pronto encontró una alternativa en el terreno de juego de fútbol-7 anexo al pabellón polideportivo de Los Planos; césped artificial de última generación, una subbase alfombrada y esponjosa que castiga menos el físico de los futbolistas... Eso sí, un tamaño reducido que impide la ejecución de ejercicios de gran formato. Así que, al menos en estas primeras semanas de preparación liguera para el Teruel, la base de operaciones de la primera plantilla del equipo, el de RFEF, está siendo directamente Campo Pinilla, que alberga el grueso de los entrenamientos y las sesiones formativas y de preparación organizadas por Parras y su cuerpo técnico.

Igualmente lo será a lo largo de toda esta semana. Y hasta el invierno. El equipo regresó el lunes a los entrenamientos, en Pinilla, después de un fin de semana de pausa y descanso tras una primera fase de pretemporada cargada tanto en lo físico como también en lo futbolístico, con una agenda de partidos amistosos que viene mostrando un grupo cohesionado y comprometido en el trabajo y la disciplina táctica y defensiva.

Aún le resta al CD Teruel, eso sí, algo más de desarrollo y desparpajo con el balón en los pies; ello tiene también que ver con el hecho de que buena parte de las incorporaciones y los fichajes que debe realizar el club en lo que queda de mercado estival deberán reforzar precisamente la zona de ataque, tanto en la posición de ariete como en la zona de tres cuartos. Sigue en ello la dirección deportiva del club rojillo con Juanra Cabrero a la cabeza. 

Un vistazo a los sub-23

En realidad, en la planificación de la plantilla del Teruel para lo que queda hasta el inicio de liga, el último fin de semana de agosto, se tiene un ojo puesto en los dossieres de los futbolistas que pueden llegar a Pinilla, y el otro precisamente en el elemento que va a predeterminar quiénes y con qué perfiles reforzarán al equipo: Un total de dieciséis futbolistas tienen contrato de primer equipo. De todos ellos sólo uno, Redón, es de edad sub-23. Así es que, atendiendo a lo que predeterminan las normativas, sólo caben otros tres jugadores mayores.

Todo lo demás habrán de ser perfiles jóvenes en una plantilla que, por lo demás, no irá más allá de la veintena de integrantes. Los que están, y los que vengan, irán viendo que Pinilla es el escenario principal del regreso del equipo a la ciudad. Esta semana, con dos amistosos a la vista mañana ante el Castellón B y el fin de semana ante el Ejea, todo lo demás serán sesiones preparatorias en el coliseo del Ensanche salvo una que tendrá lugar el jueves por la mañana en Los Planos.

De momento no se prevén problemas en el césped; cuando llegue el crudo invierno, será el momento de cuidar Pinilla y dar más uso al Milla. Será entonces, con el frío y la humedad, cuando el tapete del estadio sufra más y necesite el relevo de la pista artificial en Fuenfresca. Seguirá también activa la opción de Los Planos. Ayuda, en fin, que el horario habitual de entrenamientos de los de Parras sea casi siempre matutino, ajeno a las demandas del resto del deporte de la ciudad.