

Carmen Tortajada, protagonista del ciclo Monrealeros por el Mundo: "Era brutal porque era como estar dentro del mundo de Pandora, de la película Avatar"
Carmen Tortajada se fue a Orlando (Estados Unidos) para aprender inglés trabajando durante el verano en Disneyworld y terminó aprendiendo, además, na’vi, el lenguaje empleado en la película Avatar. Hoy viernes compartirá su experiencia con sus vecinos de Monreal del Campo dentro en una nueva edición del ciclo Monrealeros por el Mundo, del que se deshace en alabanzas.
-¿Cómo acabó una chica del Jiloca en el mundo Disney?
-Yo soy estudiante de Periodismo y Comunicación Audiovisual en la Universidad Carlos III. Al igual que la gente hace Erasmus, en mi universidad ofrecen un programa en el que te vas a trabajar a Disneyworld, en Estados Unidos. Es un programa de intercambio y con inmersión lingüística. Yo llevaba la idea de haber hecho este programa con la Universidad pero lo suspendieron por la pandemia. Como yo acababa ese año pensé que ya no podría hacer ese programa, pero me enteré por otro lado de que un chico con el que tengo amigos en común iba a solicitar el programa que yo quería. Lo miramos a través de una agencia de Londres y pasé dos entrevistas: una con una agencia de Londres y otra con Disney. Y ya solo nos quedó hacer el papeleo.
-En qué fechas estuvo en Orlando?
-Me fui el 15 de junio y el programa acabó el 28 de agosto.
-¿Qué función desempeñaba dentro del parque?
-Yo trabajaba en la tienda de Pandora, de la película Avatar. Disneyworld se divide en diferentes zonas. Están Magic Kingdom, Animal Kingdom, Hollywood Studios ... son diferentes mundos en el mismo terreno. Disneyworld tiene 120 kilómetros cuadrados, es una barbaridad. Yo estaba en Animal Kingdom, que es el parque de los animales y que está dividido en África, Kilimanjaro ... y hay otra parte que es Pandora. Era brutal porque era como estar dentro del mundo de Pandora, de la película de Avatar. Y allí tenían una atracción que era muy famosa en la que vas en uno de los banshees (dragones sobre los que se vuelan los habitantes de Pandora) y como a la gente le encantaba esa atracción en la tienda había muchísima faena.
-¿Cuál era su labor dentro de la tienda?
-Me podía tocar tanto dentro de la tienda como fuera. Fue una experiencia muy buena.
-Usted viajó a EEUU para mejorar su inglés
-Yo me fui a Orlando con un ingles de Monreal del Campo, es decir horrible, por lo que el fin del viaje era mejorar mi nivel. Llegué allí un poco impresionada pero no soy de ese tipo de personas que se asustan ante los problemas sino que soy de las que lo digo y si no acierto, pues no he acertado. Cuando aplicas el programa, este te da la opción de elegir entre Merchandising, atracciones, comidas y bebidas, barrendera .... yo elegí Merchan porque era lo que más me gustaba. Y menos mal, porque yo iba para aprender inglés y en la tienda siempre que podía me ponía a hablar con alguien mientras que si hubiera estado en otro puesto, como en las atracciones, no hubiera podido. Así a mi me daba tiempo de interactuar con la gente.
Al ser Orlando había muchas personas de Latinoamérica. Así, igual que alguna vez algún cliente me decía algo en inglés que yo no entendía y tenía que llamar a mis compañeros para que me ayudase, luego ellos me llamaban a mi también porque ellos no sabían español. Eso fue gracioso.
Lenguaje
-Imagino que el lenguaje le jugó alguna mala pasada
-¡Imagínate! Si se te sienta alguien en el suelo de la tienda le tienes que decir que se levante y una vez le dije a una persona que se levantase y aunque oí que me respondía algo yo le insistí pero siguió sin hacerme caso hasta que al cabo de los minutos vi que le traían una silla de ruedas.
-¿Todo el tiempo que estuvo en Disneyworld lo hizo en el mismo puesto o fue rotando?
-Ellos te ofrecen la posibilidad de ir rotando pero al ser tan poco tiempo no te da tiempo de aburrirte porque a lo largo del día vas cambiando. Igual estás 20 minutos en la caja registradora y potros 20 fuera o en otra zona. No te da tiempo a aburrirte.
Yo no quise porque (trabajar) en Pandora era un poco específico porque lo hacían como un mundo inmersivo. Yo recibía a los clientes saludándoles con un “kaltxi” en idioma na’vi. No podía decir “hello” ni “hola”. ¡No tenía bastante con el inglés, que me ponen también el idioma de Avatar! La chapita que llevaba mi nombre también me la cambiaron en Pandora porque, dentro de la inmersión, Pandora no era Disney sino el mundo de RDA y los científicos de la película. Al ser algo tan específico, luego es difícil ir alternándolo con otros puestos.
-¿Aprovechaba los días libres para visitar el parque?
-Tras la pandemia se hizo obligatorio ir con reserva previa a las atracciones. Sí que nos daban las entradas para ir a dónde quisiéramos, pero con la reserva.
-¿Tiene usted intención de volver a Disneyworld?
-Me encanta el periodismo y me quiero dedicar a ello. Esto fue un buen puente y una experiencia impresionante. Yo ya estuve con mis padres en 2008 y volví en 2022 pero a trabajar. Yo ahora digo que volveré con mis hijos, y hasta entonces ... seguro que vuelvo porque no voy a aguantar sin ir.