Síguenos
Elena Morales, psicóloga de la Fundación Cruz Blanca: Elena Morales, psicóloga de la Fundación Cruz Blanca:
Elena Morales

Elena Morales, psicóloga de la Fundación Cruz Blanca: "Para consolar a alguien a veces no hace falta hablar, sino estar ahí y que se sienta apoyado"

banner click 244 banner 244

El Casino de Teruel acogió este martes la tercera sesión ciclo Salud y bienestar a todas las edades, sobre Salud y felicidad. La psicóloga turolense Elena Morales Narciso impartió la charla ¿Qué decir cuando no sabes qué decir? con consejos sencillos para aprender a acompañar a los demás cuando tienen un problema. Esta especialista que trabaja en la Fundación Cruz Blanca estudió el grado de Psicología en Teruel y tiene un máster en Intervención social en personas con riesgo de exclusión y formación en Psicoterapia en infancia, adolescencia y familias.

-Es muy frecuente no saber qué decir en situaciones por miedo a meter la pata.
-Suele pasar bastante. Desde un problema normalito cuando eres pequeño, por ejemplo, un amigo que está llorando y no sabes qué decir o en adultos, en un funeral. Tanto a nivel cultural y en todas las edades se dan situaciones en las que ocurre.

-¿Qué hay que plantearse en estas situaciones?
-Tenemos que pensar en la situación que estamos viviendo. A veces todas las frases interiorizadas como: “No llores, tranquilo”, o “Todo está bien” las decimos sin pensar. La clave está en pensar, saber qué decir y de qué manera. Si conoces a la persona sabrás qué necesita y si no es así hay que pensar en qué te podría servir a ti, conocerse a uno mismo es fundamental.

-¿Cuáles son las claves que da en su charla?
-Hablé de claves como decir que no a la invalidación emocional: no negar que la gente sienta lo que está sintiendo diciendo cosas como que eso es una tontería o no te vas a poner así por eso... Con eso no estamos ayudando, estamos empeorando.

-¿Cuáles serían las frases que sí podríamos decir?
-Como somos diferentes, a veces lo que hay que hacer es preguntar a las personas. No somos adivinos, no sabemos cómo le va a sentar, hay que preguntar: ¿Qué necesitas? o ¿Hay algo que pueda hacer por ti? También se puede decir: Entiendo cómo te estás sintiendo y voy a estar para apoyarte. Lo fundamental es darle valor a la emoción, normalizar cómo se siente.

-Actualmente vivimos en una sociedad en la que parece que hay que estar siempre feliz, ¿se hace más complicado actuar cuando alguien no se encuentra bien?
-Cada día se vende más esto. La publicidad de tazas o camisetas son siempre frases superpositivas. Te obligan a estar feliz. Tenemos más emociones y todas son válidas y hay que vivirlas. Hay un a cultura de la productividad hay que estar todo el día hacer cosas y de ser felices y esto es una presión.

Situaciones

-Estas situaciones en las que no se sabe qué decir o se dicen cosas inapropiadas, ¿se dan más en alguna edad?
-Esto no entiende de edades. Es como algo que vamos heredando. Cuando eres pequeño si te pasa algo te dicen: No llores que es una tontería. Tú lo trasladas cuando eres adulto. Afecta a todas las edades, pasa de generación en generación. A veces no hace falta hablar, con estar ahí es suficiente. Si alguien está llorando, igual con ofrecer un pañuelo o con estar ahí la persona es justo lo que necesita, que se sienta apoyada.

-Los problemas de salud mental se están incrementando, este tipo de consejos son muy importantes para aquellos que rodean a estas personas.
-Me parece que hay que cuidar al cuidador. Cuando una persona tiene alrededor a alguien que no se encuentra bien durante largo tiempo también se te traslada y acabas por no saber qué hacer. Hay que cuidarse y saber cómo ayudarle y cómo ayudarte tú.

-¿Por qué ha elegido este tema para su charla?
-Siempre me ha llamado la atención cómo consolar a un amigo o a un familiar. Por eso he investigado sobre este tema y me he ido formando. Ahora estoy trabajando en una fundación con gente con diferentes problemas y necesitas saber qué decir. Investigar me sirve para mi día a día, a parte de para trabajar, para relacionarme con la gente a mi alrededor, para saber qué decirles y me sirve a mí misma.  Cuando tú estás mal también tienes que saber qué decirte a ti mismo.

-¿Cuesta mucho hablar de las emociones?
-Hay muchas emociones y algunas como el miedo, la ira y la tristeza no dejamos expresarlas. Expresar la ira no quiere decir hacerlo con gritos o broncas, pero sí que hay que poder decir que estás enfadado o si alguien se siente triste, hay que dejar que viva su tristeza, no solo la alegría. Vivir las emociones de cada momento es saludable.