

Eva Yuste, florista: "Mis obras están pensadas para llevar a casa recreaciones de naturaleza que duran años"
La autora de la exposición Jardines Verticales II de Albarracín explica que "son decoraciones de flores y plantas preservadas que van bien con todo y ahora mismo son tendencia"Eva Yuste tiene una floristería en Valencia, llamada La Florería, y desciende de Moscardón, por lo que aprovecha siempre que puede para llevar sus creaciones hasta la Sierra de Albarracín. Actualmente expone en El Molino del Gato de Albarracín su muestra Jardines Verticales II, que es una continuación de los trabajos de flores y plantas preservadas que ya instaló durante el pasado verano en este mismo bar. La muestra está ya instalada y se podrá visitar hasta finales del mes de marzo.
-¿Qué ofrece La Florería en El Molino del Gato de Albarracín?
-Es una exposición de una quincena de obras que son jardines verticales, realizados con musgo, plantas y flores preservadas. Es en la misma línea que la que hicimos el pasado verano, pero en esta hemos incorporado el color, los cuadros se componen de flores de muchos colores de diferentes gamas. Están pensados para dar un giro de color a las decoraciones minimalistas.
-¿Qué tamaños tienen estos pequeños jardines?
-Son unos pequeños cuadros que son del árbol de la vida, de 30x30 o 25x25 centímetros hasta de unos 50x60 los más grandes. Pero en los proyectos que hago me adaptado a las demandas de los clientes y no sólo son jardines verticales lo que hago, también hago centros, ramos de flores...
-Es la segunda exposición que lleva a cabo en Albarracín. ¿La primera fue un éxito?
-Me fue muy bien porque me dio a conocer a mucha gente, se trataba de eso, y también tuve alguna venta. El Molino del Gato es mi lugar preferido de Albarracín y ademas el tipo de cuadro parece hecho para ese sitio, es muy acorde con el entorno y con la propia decoración del bar, me parece que mis obras se lucen mucho ahí.
-¿Qué son las plantas preservadas?
-Son plantas que tienen una durabilidad eterna, sin ningún tipo d mantenimiento, ideales para la gente que tiene poca mano para las plantas.
-¿Por qué trabaja con estas flores en vez de con frescas?
-Me encantan las flores y es una forma de darles más vida, estas son cortadas y tratadas, de forma que duran mucho más tiempo. También trabajo la flor fresca por encargo, pero me da mucha pena porque tiene los días contados, pienso que ya que corto una planta o arranco un musgo, con este mantenimiento es una forma de darle más vida, menos agresivo con el medio ambiente.
¿Qué mantenimiento necesitan?
-El único cuidado que necesitan es que les quites el polvo, con un plumero suave o con un secador con aire frío. Es un producto que lo único que tienes que hacer es no maltratarlo, son decoraciones para interior, no les puede dar mucho el sol, ni resisten a las inclemencias. Tengo incluso bonsais preservados que, a diferencia de los naturales, que requieren un montón de cuidados y a la mínima se mueren, estos duran años, eso sí, no crecen.
Clientela
-¿Para dónde compran sus clientes estas pequeñas obras de arte naturales?
-Tengo una gama muy amplia de clientes, ahora acabo de hacer la decoración integra de un restaurante, un asador de carnes, y me voy a poner a decorar una tienda de reformas, pero también tengo una clienta en Albarracín que está decorando su casa a base de jardines verticales. No me encasillo, mi trabajo puede venir bien a cualquiera que quiera llevar un poco de naturaleza a su casa. Trabajo mucho para la hostelería, pero también para particulares, hoteles, clínicas de estética... Por ejemplo ahora he aprovechado en Albarracín para visitar algún hotel y ofrecerles propuestas y he tenido una respuesta muy positiva. Son decoraciones que van tan bien con todo y ahora mismo son tendencia.
-Habla de grandes proyectos. ¿También tiene demanda de pequeños cuadros para colgarlos en un rincón de cualquier casa particular?
-Por supuesto, y le pongo el mismo empeño a un jardín vertical de gran tamaño que a esas pequeñas creaciones que la gente se lleva para lugares variados, desde baños a salones o cocinas. Hay mucha gente que en lugar de poner un cuadro o una foto pone un jardín vertical, hay gente que se lo lleva en pequeño, como un pequeño marco de fotos, se puede hacer desde muy pequeño hasta muy grande.
-¿Desde qué precio te puedes llevar un poco de naturaleza a tu casa?
-Hay de todos los precios, por poco más de 30 euros te puedes llevar un cuadro a tu casa. También intentamos hacer cosas nuevas, figuras en las que decoramos trajes y pelos con musgos, apostamos por la originalidad, por regalos especiales.
-¿Qué perfil de cliente tiene?
-Son personas que se preocupan por hacer un buen regalo, miman y buscan los detalles para esa persona especial. En lo que respecta a edades hay desde jóvenes de 20 años que regalan una flor a su chica a señoras de 70 que quieren darle otro aire a su casa, y sobre todo muchas personas que se molestan por buscar el mejor detalle, cosas muy exclusivas. Son gente que valoran el trabajo artesanal y hago lo que me piden a demanda. Eligen los tonos, el tipo de flor o planta y yo intento hacer algo personalizado, que le vaya a gustar a esa persona. Son regalos con los aciertan.