

Jorge Garris, sociólogo e historiador: “La verdad es que hablar de Yahvé es complicado, aunque parece fácil en primer momento”
“Hay muy pocos expertos en hebreo-bíblico, ellos son los que saben leer este idioma lleno de consonantes”Jorge Garris Mozota (Zaragoza 1968) es sociólogo, licenciado en Ciencias Políticas e historiador, además de conferenciante y con fuerte vinculación con Teruel. Ofreció una conferencia organizada por el Casino de Teruel.
-¿Por qué Yahvé?
-La verdad es que hablar de Yahvé, ya lo advierto, es complicado, aunque parece fácil en primer momento, porque lo fácil es decir quién es Yahvé. Yahvé es el dios de la Biblia hebrea-política. Pero hay mucho más, porque Yahvé es un personaje misterioso. Es un personaje que, por supuesto, fue el dios del pueblo israelí por hacer un pacto con él, pero también fue el dios de otros muchos pueblos. Y con el tiempo, por traducciones al griego, al latín, a otras lenguas, pues este Yahvé acabó convirtiéndose en nada más y nada menos que el dios universal. Es decir, una idea local acabó convirtiéndose en el dios universal, en las vidas modernas. Y por eso es tan importante conocer a Yahvé e intentar comprender qué ocurrió con ese pueblo, con el pueblo de Israel.
-¿Si Yahvé quiere decir Dios, qué busca con su intervención?
-Vamos a ver, no es que Yahvé sea dios. Esto es un tema que, lógicamente, he estudiado más de cuatro años ciencias bíblicas, pero me baso en las investigaciones de expertos en hebreo-biblico, que es fundamental. Hay muy pocos expertos en hebreo-biblico en el mundo, con lo cual, ellos son los que saben leer el hebreo-biblico. Que, como sabemos, estaba lleno de consonantes y no había vocales ni puntuación, que son los pueblos más orientales, que mucha gente no lo sabe. Con lo cual, ese Yahvé, los israelitas, con el tiempo, lo convirtieron en el dios.
-¿Es Yahvé una clave?
-Efectivamente. Yahvé es el tetragramatón, que se llama en griego. Pero Yahvé son unas palabras que, en el tiempo de Moisés, no existía el hebreo. Es una equivocación que hay. Con lo cual, esa palabra, es una palabra incerta. Después, la Biblia fue escrita en el hebreo bíblico. Pero esa palabra incerta, que hay muchas teorías, que bien puede ser la influencia cananea, o puede ser la inteligencia egipcia. También hay teorías de que Yahvé lo ponen en Creta, y que viene con los puertos del mar. Es decir, hay muchas teorías. Es una clave que la traducción tiene relación, en el hebreo bíblico, con el hebreo ser.
-¿Qué contiene el Arca de la Alianza?
-El Arca de la Alianza es fascinante, porque fue instruida y ordenada por el propio Yahvé, al pueblo de Israel. Le dio las dimensiones, materiales y demás. Es algo interesante, porque luego, con posteriores estudios físicos, ya Nicolás III lo hizo, lógicamente, es un gran condensador y más cosas. Con lo cual, el Arca de la Alianza, lo que contenía eran varias cosas. Primero, lógico, eran las tablas de la Alianza, las tablas de Moisés, contenía la vara de Aarón, y también una piñajarra de oro con el maná, en recuerdo a lo que Dios había hecho para con el pueblo de Israel. Es decir, es un artefacto, un artilugio bastante complicado e interesante.
-¿El Arca de la Alianza podría ser una fórmula para la paz en estos tiempos tan convulsos y de guerra?
-Pues realmente, ahora mismo no le veo ninguna relación para con la paz, porque recordemos que Yahvé era un dios local de un pueblo, el pueblo israelita, que fue el que lo cogió, lo protegió, hizo el pacto con él. Otros pueblos de las tribus de Israel, los amoritas, los amores, tenían otro tipo de dioses, el de Elohim. Con lo cual, si uno lee la Biblia, la Biblia del Tanaj, la parte de la Torah, ve que era un dios muy belicoso, muy, muy belicoso. Ha habido algún especialista que ha calculado algunos redondos de que Yahvé fue responsable de la muerte de 25 millones de personas. Nada más y nada menos.
-¿Son las Tablas de la Ley la salvación?
-No. No voy a decir si es salvación o no salvación, simplemente explico lo que quería decir. Las tablas de Mosaicas, que se dice que fueron 10, pero que había 10 preceptos, pero que otros especialistas hablan de que había muchos más, eran simplemente unas disposiciones que dio Yahvé para con el pueblo de Israel, que exigía absoluta obediencia. Es más, decía que no se podía apostar ante ninguna otra imagen y ningún otro dios que no fuera él, porque si estaba en competencia con otros dioses, sería en otros pueblos. Con lo cual, era simplemente un código de conducta para un pueblo específico que era Israel.
-¿La biblia tiene escrita la solución, si la leemos detenidamente?
-Vamos a ver, pues eso es un problema muy complejo. Es muy interesante, porque ¿de qué Biblia hablamos?. Si hablamos de la Biblia hebrea, que es la origen, hay muy pocas personas que sepan hebreo bíblico, muy pocas personas. Entonces, el que sabe hebreo bíblico, lo que ha hecho es leer y decir lo que pone ahí. Mire, yo digo lo que pone aquí, luego usted interprete, diga, lo que sea. ¿Qué ocurrió? Había una concentración de judíos en Alejandría, que desconocían el hebreo, no entendían el hebreo, con lo cual, hablaban en el greo. Con lo cual, se hizo una traducción de la Biblia hebrea, después de los puntos masoléticos, una transformación masolética, que ya le cambia el significado, al greo, con lo cual se perdió una cantidad de información tremenda, es decir, se tergiversó, y se cambió la información, es decir, siempre que vas pasando de una lengua a otra, pierdes información, porque hay conceptos que están en una cultura y otros que no están en otra cultura.