Síguenos
Lucía Fuengallego, protagonista de la obra teatral 'Belcebú': Lucía Fuengallego, protagonista de la obra teatral 'Belcebú':
Lucía de la Fuente durante su interpretación teatral

Lucía Fuengallego, protagonista de la obra teatral 'Belcebú': "El acoso escolar ha existido siempre, es muy común y ahora se esta visibilizando"

"Con el teatro y con el taller que se hace después es más fácil llegar a los chavales que dándoles una charla"
banner click 244 banner 244
Cruz Aguilar

Lucía Fuengallego es la actriz protagonista de la obra de teatro Belcebú, que estos días se está representando en varios institutos de la provincia de Teruel y que llegará en los próximos meses a todos ellos. La actividad está financiada por la Diputación de Teruel y busca sensibilizar sobre el tema del acoso escolar entre los jóvenes de la provincia.

-¿Es una forma más sencilla de llegar a los jóvenes que con una charla?
-Por supuesto, además no es solo la obra, sino que después de la función se hacen unos talleres en los que ellos interactúan con David Huertas y conmigo, los dirige Begoña Mencía, que es la coach, y les ofrece la posibilidad de hablar con los personajes y simular situaciones en las que ellos podrían encontrarse o están viendo y viviendo. Es muy interesante, hay un espacio en el que se les invita a compartir sus propias historias y nos encontramos situaciones muy bonitas, de repente se sienten con la libertad de abrirse.

-En la obra no hay ganador pero esto por desgracia no siempre ocurre en la vida real.
-Más que no hay ningún ganador podríamos decir que no hay ningún culpable, en nuestra historia terminan ganando los dos, se ha hecho mucho hincapié en que detrás de este tipo de situaciones hay unas razones que empujan a actuar de una forma determinada, pero no hay culpables de lo que les están pasando y ambos encuentran las herramientas para salir de ahí. El acosador también tiene sus razones, en este caso tiene problemas en casa, como dice Max durante la obra, “cuando algo te duele buscas el dolor en otros”, es una forma de expresarse, aunque no es la mejor manera. La obra no te coloca del lado de la víctima y demoniza al acosador, intentamos entender las razones que llevan a cada uno a esa situación.

-No hay culpables pero a ella le sobreviene el acoso.
-Efectivamente, no hay ninguna razón por la que un acosador escoge a sus víctimas, es aleatorio, le ha tocado a ella como podría ser a cualquier otro, el tampoco elige lo que le pasa en casa. Como sociedad no se nos educa emocionalmente, no sabemos gestionar nuestras emociones y cuando nos ocurren este tipo de cosas no sabemos solucionarlas, si me siento mal y necesito descargar mi frustración no me paro a pensar que le estoy haciendo la vida imposible a otro, por eso intentamos que vean que los actos tienen consecuencias.

-En la obra tiene un gran peso la figura de los padres. ¿Es importante que los chavales sepan que se pueden apoyar en ellos?
- Claro, tanto los padres como los profesores, en Belcebú Gema termina hablando con sus padres y le va bien, Max no puede hablar con sus padres, se apoya en los profesores, pero sí se habla en la obra de pedir ayuda a un adulto, que los chavales sepan que no siempre son los adultos el enemigo, sino que están encantados de ayudarles. Muchas veces les da miedo confiar an un adulto y no tienen esa figura con de apoyo.

El acosador

-En los casos de bullying suele aparecer la figura del acosador pero también hay muchos otros chavales que son conscientes de la situación pero callan. ¿Qué papel tienen en la obra?
-Sí, de hecho se trata esto también en los talleres, no queremos ponerlos al mismo nivel, pero cuando una persona ve un caso de acoso y no hace nada es responsable también, aunque hasta cierto punto. Es un tema delicado, muchas veces no hacen nada porque piensan que no lo van a solucionar y que les creará a ellos también el mismo problema. Intentamos que se den cuenta de que hay que hacer algo.

-Tras la obra se hace un diálogo con el alumnado. ¿Se abren los chavales en ellos, es la obra una herramienta de detección?
-No, suelen ser historias ocurridas en el pasado. Pero nosotros no lo hacemos para detectar casos, sino por dar a los chavales ese espacio de confianza en el que pueden contar lo que quieran, le escuchan el resto de los compañeros, que a lo mejor no tienen ni idea de por lo que han pasado. A los profesores en muchos casos les abre los ojos porque no siempre se enteran de todas las cosas que pasan en las aulas.

-En base a su experiencia, ¿el acoso es algo más del medio urbano que del rural o se da por igual en todos los sitios?
-Se da igual en todos los sitios, lamentablemente es algo bastante generalizado, no depende de clase sociales, llevamos varios años con esta gira y vemos quepo todas las partes sucede.

-Han recorrido varios lugares de España con ‘Belcebú’. ¿Creen que cala en el público?
-Totalmente, de hecho hay una cosa que me parece muy bonita y es que en casi todos los sitios cuando terminamos la obra se quedan a hablar con nosotros, muchos no se han visto con fuerza de contar su historia en público pero sí que querían contarla. Incluso alguna vez, pocas, pero alguna, nos han llegado testimonios de acosadores, vemos que cala el mensaje. Es lo mejor que nos puede pasar, que le llegue tan profundo como para desahogarse con nosotros. A veces la gente contacta conmigo por redes sociales y me pide consejo, es una gran responsabilidad.

-Claro, porqu­­e por mucho que se meta en el papel de Gema no deja de ser un personaje.
-Tanto David como Begoña y yo hemos sufrido bullying. Yo lo tengo muy superado, porque hace muchísimo tiempo y mi situación no era como la de Gema, pero sí reconecto en la interpretación de alguna manera con aquello. Es más, también he estado en el otro lado porque en el colegio hubo un chaval al que se lo hice pasar mal, he estado en los dos sitios y sé de lo que estamos hablando. El acoso escolar es más común de lo que se cree, ahora se está empezando a visibilizar pero es un problema que ha estado siempre.