Síguenos
Raúl Sebastián, presidente de la Asociación Patrimonial de la Colegiata de Mora de Rubielos: “Hemos recopilado historias  de personas del pueblo, de aparecidos y de fantasmas” Raúl Sebastián, presidente de la Asociación Patrimonial de la Colegiata de Mora de Rubielos: “Hemos recopilado historias  de personas del pueblo, de aparecidos y de fantasmas”
Raúl Sebastián repasa la historia de la villa a las puertas de la ex colegiata de Mora

Raúl Sebastián, presidente de la Asociación Patrimonial de la Colegiata de Mora de Rubielos: “Hemos recopilado historias de personas del pueblo, de aparecidos y de fantasmas”

Raúl Sebastián conduce las visitas guiadas ‘Fantasmas antiguos y leyendas tenebrosas de la villa’ de Mora
banner click 236 banner 236

Profesor de Secundaria y universitario de profesión y morano de vocación, Raúl Sebastián es el presidente de la Asociación Patrimonial de la Colegiata de Mora de Rubielos y se encarga, entre otras cosas, de acompañar a los visitantes que cada agosto y noviembre, quieren conocer las historias y las leyendas de la villa.

-¿Cuál es el origen de estas visitas guiadas?

-Empezamos en torno al 2014, coincidiendo con el aniversario de la salida de Mora de Rubielos de Isidoro de Antillón, que fue hecho prisionero aquí. Y con ese motivo dimos una conferencia en el castillo. Esto sumado a nuestra amistad con los amigos de la colegiata de Rubielos de Mora fue la chispa que hizo que nos sentáramos con el entonces alcalde, Jorge Alcón, y el concejal de cultura, Miguel Clemente, y dijéramos que había que fundar una asociación cultural. Entonces, como el Castillo de Mora ya tiene un buen respaldo quisimos visibilizar la colegiata y todo lo que gira en torno a ella, que como saben dejó de existir en el siglo XIX para ser parroquia. Entonces, empezamos a hacer las visitas guiadas oficialmente en 2017.

-¿Qué se recorre en esos paseos, qué se visita?

-Recorremos diversos puntos de la villa, especialmente los monumentos, porque en Mora no solo están el castillo o la ex colegiata, sino que hay ermitas, hay casonas de los antiguos canónicos que parecen verdaderos palacios que demuestran el poderío que tuvieron en tiempos los canónicos casi como señores feudales de la villa. También recorremos lugares emblemáticos como el portal de Alcalá, el de Rubielos o el antiguo colegio de las monjas. Visitamos lugares que a lo mejor pasan desapercibidos y que tienen un gran valor histórico. Y a los turistas les sorprende muchísimo. Y la visita la repetimos el 1 de noviembre, y en los dos casos, aunque llueva viene gente. Y es la misma temática, leyendas, fantasmas, eso gusta mucho.

-¿Cuál es la tradición sobrenatural de Mora de Rubielos?

-Buena pregunta, porque, mire, yo soy muy aficionado a la literatura de terror, sobre todo los clásicos, y no encontraba ninguna historia de fantasmas en Mora porque aquí no creemos en fantasmas. Pero a raíz de esto, la gente empieza a hablar y repite cosas que le contaron sus abuelos y la verdad es que hemos recopilado historias de personas del pueblo de aparecidos y de fantasmas. Y no sólo esas, sino de fantasmas de carne y hueso, de gente que se ponía una sábana y iba a visitar a una viuda o se ponía una sábana y visitaba al calvario, que es una de las leyendas que contamos y que además está recogida en un libro y que, además, yo la he escuchado de boca de mi abuela y de sus hermanas, que la debieron de oír a su madre, mi bisabuela.

-¿Qué historia es esa?

- Pues la de un señor de la calle Las Parras que en e torno a 1920 hizo la promesa de subir por la noche al Calvario de la Villa con una sábana. Las mujeres lo veían y, claro, al ver de noche una sábana y un candil las mujeres se asustaron y sus maridos decidieron reunirse una noche y cuando el buen señor bajó le dieron una pequeña paliza que ya le quitaron las gamas de subir a arrastrar el calvario a esas horas. Entonces son cosas curiosas y yo la he oído de los labios de mi abuela y de mis tías abuelas.

-Además de las anécdotas de los vivos, ¿existen historias sobrenaturales?

-Sí, muchas, además de las típicas que podemos leer en los clásicos, como las de las almas en pena, que no han recibido un enterramiento como ellos querían y que han tenido que se han aparecido los familiares o que se han manifestado en diversas formas. Contamos una de una señora a la que no habían enterrado con su marido porque no dieron permiso a las autoridades. Y la familia me decía que todos los años en la fecha de la muerte de esa mujer se morían los animales de la casa. Claro, la gente decía que eso era por el deseo de su familiar que no lo habían cumplido. Se solucionó todo cuando la pudieron enterrar con su marido y no volvió a pasar.

Sabemos de muchas historias de masías que han tenido ruidos por la noche, llamadas a la puerta, incluso duendes, dicen, pero la gente es reacia a contarlas. Son historias que constituyen pues una gran riqueza antropológica porque indican mucho de cómo se vivía en esas masías o en esas casas de pueblo con poca luz, que presta a ver cosas que a lo mejor no son fantasmas ... o sí.

-¿En su catálogo de relatos incluye la leyenda de Fátima de Mora y Alfonso de Rubielos?

- ¡Ha metido usted el dedo en la yaga!. Nosotros respetamos ese tipo de historias que ahora se están inventando. No hay constancia documental de esa historia. Y además, la Villa de Mora fue cristiana 150 años antes que la Villa de Rubielos. Por lo tanto, es muy raro que el señor cristiano de Rubielos se enamorara de la señora musulmana de Mora.

El redactor recomienda