El Festival Puerta al Mediterráneo encara esta noche, martes, la segunda de sus propuestas escénicas para este 30 aniversario de la cita, primera de este año que tiene lugar en el Castillo de Mora de Rubielos y una de las que se esperan más multitudinarias.
Se trata del concierto que ofrecerá Ara Malikian, a partir de las 23 horas de esta noche en el monumental escenario de Mora, con el que el genial violinista regresa a la provincia para presentar su nuevo espectáculo, La increíble gira de violín.
Tres cosas saben todos los que han asistido a un concierto de Ara Malikian. La primera es aquella por lo que se ha hecho internacionalmente conocido: su virtuosa técnica. Que es un intérprete dotado de un excepcional talento queda patente en tanto que puede tocar desde una sencilla canción de cuna a una desgarradora aria de Bach o un hit de Led Zeppelin. La segunda es que no se contenta en ser, estrictamente, un violinista, sino también, y casi sobre todo, un divulgador de la cultura musical.
No es fácil presenciar conciertos tan multitudinarios como los que da este explorador de la música de los cinco continentes. Si conoce la música de todo el mundo y quiere expandirla por todo el mundo es porque previamente ha trotado por todo el mundo. Y de ese ir y venir se ha ido enriqueciendo de numerosas influencias musicales, que acrisola cuando compone e interpreta para ofrecerselas al público como si todo fuera un uno completo.
La tercera evidencia que obtiene un espectador de Ara Malikian es el increíble carisma que éste tiene. Presentar las piezas como él lo hace es algo tan fácil y tan difícil como un despliegue de llana simpatía. Es, en definitiva, una estrella absolutamente cercana.
Se inició en el violín a muy corta edad de la mano de su padre. Su talento fue reconocido tempranamente a pesar de las difíciles circunstancias que la guerra civil libanesa le obligaron a vivir. Dio su primer concierto importante con 12 años, y a los 14 el director de orquesta Hans Herbert-Jöris le escuchó y consiguió para él una beca del gobierno alemán para cursar estudios en la Hochschule für Musik und Theater Hannover. Con 15 años fue el alumno más joven admitido en este prestigioso centro superior de estudios musicales. Posteriormente amplió sus estudios en la Guildhall School of Music & Drama de Londres, además de recibir lecciones de algunos de los más prestigiosos profesores del mundo como Franco Gulli, Ruggiero Ricci, Ivry Gitlis, Herman Krebbers o miembros del Alban Berg Quartet. Como intérprete es poseedor de un amplio repertorio que incluye la práctica totalidad de las grandes obras escritas para violín.