Las fuertes rachas de viento que se registraron a última hora de la tarde del martes y durante la madrugada del martes al miércoles en algunos puntos de la provincia de Teruel provocaron la rotura de ramas en varios municipios de la provincia. Además, en Alacón cayó una gran granizada el martes que provocó daños en olivares y vides. La tormenta se sintió a su vez en Montalbán, donde hubo un conato de incendio a consecuencia de la caída de un rayo. En Torres de Albarracín el viento partió varias ramas de una acacia, que cayeron en medio de la plaza del Ayuntamiento aunque no provocaron daños personales ni materiales. El incidente se produjo en torno a las 20 horas, según comentó el alcalde de la localidad, Inocencio Martínez. También en Singra se produjo la caída de varias ramas en el centro de la población, pero no hubo que lamentar daños. El viento alcanzó una velocidad de hasta 90 kilómetros por hora en Muniesa, en la comarca de Cuencas Mineras, cuyas consecuencias se vieron en algunos huertos, plantaciones de árboles jóvenes o incluso algunos tubos de chimeneas fueron arrancados de su lugar, tal y como asegura Azucena Cester, vecina de la localidad, “daba miedo la tormenta”. Esa tormenta dejó un conato de incendio por rayo en la localidad de Montalbán en el paraje de la Rambla- el Romeral, incendio que fue sofocado sin mayores complicaciones esa misma noche. También sopló con gran intensidad en Jabaloyas, donde la mayor incidencia tuvo lugar en la madrugada del martes al miércoles con vientos de hasta 87 kilómetros por hora. Además de en la Sierra de Albarracín, el viento también sopló con gran intensidad en el Jiloca. En Bello alcanzaron los 82 kilómetros por hora a las 21 horas del martes mientras que en Calamocha, a esa misma hora, había 68 kilómetros por hora. En Fonfría a primera hora del miércoles se alcanzaron 71 kilómetros por hora. En la capital turolense se produjeron a su vez fuertes rachas y a las 21 horas del día 18 de julio se alcanzaron los 64 kilómetros por hora. En el Bajo Aragón también sopló el viento, aunque con menor intensidad. Pese a la intensidad del viento, los bomberos de Calamocha no realizaron durante la jornada del martes ninguna salida para atender incidencias causadas por el viento. Las tormentas del martes dejaron consecuencias importantes en Alacón, en la Comarca Andorra Sierra de Arcos, en donde los 50 litros de agua caídos llegaron acompañados de granizo, causando daños en los olivares y vides, así como en los frutales y en los almendros que no habían sido recogidos, y en algunos de los huertos de la localidad. Pero el acontecimiento mayor se produjo en el paraje del Barranco del Mortero, lugar que alberga numerosos abrigos de arte rupestre levantino, según indicó la vecina Begoña Pastor, una gran cascada de agua cayó por este barranco como hacía años que no ocurría, atrayendo hasta el lugar a numerosos curiosos que no quisieron perderse este espectacular salto de agua. Pese a la virulencia de las tormentas, los bomberos de la Diputación Provincial de Teruel no efectuaron ninguna salida.
